Rosé aspira el aroma de su ropa, sintiendo aún lo poco que quedaba del aroma natural de Jennie en ella.
Después de cenar y ayudar a sus amigas preparando sus maletas para mañana partir, no podía quitarse a Jennie de su cabeza... una vez más.
Revuelve su cuerpo, dando vueltas por su cómoda cama, el sueño no llegaba. Entonces recordó la anterior noche en el cuarto de Jennie, Rosé todavía no podía creer que debajo de esa fea y vieja jardinera azul se escondiera un cuerpo esculpido y bien proporcionado como lo tenía Jennie, aunque la luz de la habitación no permitió ver bien su cuerpo, se notaba que Jennie tiene un trabajado cuerpo.
Rosé se cansa de rodar por su cama, mira el reloj junto al ramo de flores, de su mesita de luz, 5:57am. Rosé no recuerda la última vez que se haya levantado tan temprano de no ser por la escuela.
Preparar un café vino a la mente de Rosé, al igual que ver lo que era el gran campo mientras amanecía también sonaba bien para ella. Pone en sus pies las pantuflas de pollito que su padre le había regalado ya hace unos años, dispuesta a ir a la cocina e iniciar el día, el cual sería el último para despedirse de sus amigas.
Estirando su cuerpo camina en dirección a la cocina, arrastrando un poco sus pies.
Pero todo el sueño desaparece de su cuerpo, topándose a Jennie, tenía un pantalón que le llegaba a las rodillas y un croptop, ropa de deporte, su cabello en una cola alta y una taza con algo humeante en ella.
––Buenos días señorita –
––Buenos días Jennie –
––¿Quiere café? Recién terminado –
––Eso estaría bien, gracias –
––No hay problema –
––¿Esta es usualmente la hora en que te levantas? – Rosé decía, sirviendo en una taza el café recién preparado.
––Bueno, tengo suerte si llego a dormir, pero sí, a estas horas me levanto normalmente –
––Sabes, es raro que no lleves tu jardinera – Rosé decía, mirando descaradamente el cuerpo de Jennie de arriba a abajo.
––¿Ah sí? – Jennie deja su mirada en Rosé unos segundos, para después contestar ––Por las mañanas me gusta salir a correr, por lo menos unos quince minutos recorriendo un poco el lugar, jugando con algunos de los perros callejeros y alimentarlos –
––Eso es muy dulce de tu parte – Jennie sonríe un poco ante las palabras de Rosé, con un pequeño sonrojo en su mejillas.
––Bueno, será mejor que ya salga. Después tengo que volver a hacer el desayuno – Jennie deja su taza recién lavada en la mesada, dejando su posición en la silla.
––¡Espera! – Rosé la detiene antes de que siguiera con su camino.
––¿Si? –
––¿Puedo acompañarte? –
––¿Irás con tus pantuflas de pollito? –
Rosé se sonroja un poco, negando.
––No, no, dame un minuto y me cambio –
––Te esperare en la entrada –
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Rosé intentaba seguir los pasos de Jennie. Ambas habían empezado el 'entrenamiento' después de estirar por unos minutos, bueno Jennie estiró sus extremidades y Rosé bueno... Disfruto un poco la vista.
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Campo de Rosas ✗ ❪Chaennie❫
Ficción GeneralRosé pasará su verano en el gran condominio de su padre. El lugar tiene lo que cualquier adolescente soñaría: piscina, internet, juegos, un gran campo, y ahora tiene a Jennie. ➸ Esta es solo una adaptación de la historia original... © Todos los créd...