Corrí lo más rápido que pude a la habitación de Yoongi. Cuando llegue habían muchas personas, así que les grite que se largasen no sin antes decirles que investigaran quien financió el ataque de Jungkook y que se deshicieran de los cadáveres. Una vez todos se fueron, fui a la cama y ahí se encontraba Yoongi, temblando y con una mano en la herida.
-¿Por qué hiciste esto? ¿Por qué te interpusiste? Pudiste haberme dejado morir y no estaríamos pasando por esto.
-¿Te crees que es fácil verte morir- Me grito Yoongi molesto. Los dos estábamos agitados y se notaba que nada bueno saldría de que peleáramos.-
-Vamos, ¿te puedes sentar? Voy a curar la herida.- Él intento sentarse, pero no pudo. Cogi el botiquín de primeros auxilios que estaba en la cómoda de Yoongi y entonces lo ayudé a sentarse. Como pude, le quite la camisa y entonces lo vi. Toda su espalda está llena de cicatrices, algunas largas y otras más cortas. Decidí atender la herida primero antes de que Yoongi se desangrara. Pude ver que por suerte la herida no fue profunda por lo que no se debe de haber perforado ningún órgano. Así que me dispuse a limpiarla y comenzar a coserla. Una vez todo estuvo listo, ayudé a Yoongi a recostarse y me encerré en el baño para limpiar los utensilios. Una vez en la oscuridad y soledad del baño, me dí cuenta de que mis manos todavía tenían la sangre de Jungkook y ahora estaban mezcladas con las de Yoongi. ¿Qué me está pasando? Acabo de asesinar a una persona, no es que no fuese mala y mi vida corriese peligro, pero tampoco fueron las razones correctas y de haberlas no debí de haberlo matado. Mi responsabilidad como policía es atrapar a los criminales, no impartir la justicia con mis propias manos, pero es que no lo pude evitar. Cuando vi la sangre de Yoongi en mis manos y él colapsó en frente de mi, todo mi mundo se cayó. Tenía ira y sed de venganza, quería lastimar a quien le hizo eso, a quien lo hirió de esa forma, y lo hice. No tengo excusas por lo que hice, pero lo volvería a hacer de nuevo. Mientras decía esto, tenía mis manos en el lavamanos y miraba fijamente al espejo. En mi reflejo había otro, ya no era el mismo policía de hace dos meses y medio, no, mi estadía aquí me ha cambiado. Esto que estoy negando sentir por Yoongi, me ha cambiado y no sé si estoy listo para sumergirme en este infierno. Solo sé que entre más intento alejarme de él, el resultado es inverso porque termino más cerca de él. Termino de lavarme las manos y cuando regreso a la habitación, Yoongi se había quedado dormido.
Yoongi seguía sin ponerse la camisa y sus cicatrices seguían a la vista. Mi corazón dolía de tan solo pensar en que lo han lastimado muchas veces. El pensarlo solo en una habitación curándose sus propias heridas, amenazaba con que mis lágrimas salieran. Con mucho cuidado me senté en el lado opuesto de la cama y con mucho miedo extendí mi mano. A mitad de camino me detuve, ¿qué estoy haciendo?, es lo único que pienso. Mi mente decía que tenía que irme, pero mi corazón decía que no huyera de esto porque me arrepentiría. Así que con uno de mis dedos comencé a recorrer las cicatrices que estaban en su espalda, se sentían como un mapa por los momentos más dolorosos de la vida de Yoongi. La vida no había sido dulce con él, no lo culpo por haber elegido este estilo de vida. Entiendo que entre salir lastimado o ser el que lastima, ninguno elegiría la primera opción. Lo que me causó mayor dolor es saber que yo he sido participe en llenar su cuerpo de cicatrices. Fui yo quien hizo que Jungkook deseara una venganza y por protegerme Yoongi salió herido de nuevo. Perdido en mis pensamientos no me di cuenta de lo que hacía, pero fui acercando mi rostro a su espalda. Entonces, posé mis labios en una de sus cicatrices, no sé porqué, pero quería confortarlo. Sin darme cuenta una lágrima golpeó su espalda y cuando alcé la vista, Yoongi había despertado y me estaba observando. ¿Por qué hice eso? ¿Por qué tuve que dejar mis sentimientos al aire? Me acabo de exponer a él y sé que lo usará en mi contra, no debí hacer esto.
Comencé a retirarme, pero Yoongi me detuvo. Me cogió por el brazo y me acercó a él. Nuestros rostros quedaron a centímetros de distancias y podía sentir que mi corazón se aceleraba. Yoongi estaba mirándome intensamente y sus ojos viajaron hasta mis labios. Entonces, pude ver como sus ojos brillaron antes de que cortara el espacio que había entre nosotros y estampara sus labios con los míos. El toque fue suave y delicado, al inicio todo fue despacio. Aún no salía de la sorpresa de que Yoongi me estaba besando, pero no tardé en responderle y pasar mis brazos por su cuello hasta hundir mis dedos en su cabello. Entonces, el beso se intensificó, Yoongi pasó su brazo por mi cintura y me acercó más a él. No sé qué pasaba, pero no quería parar. Quería dejar de pensar y solo sentir por un momento así que me dejé llevar por los sentimientos y por el momento. Dejé que Yoongi me guiase y tomara las riendas del momento, pero aunque pensé que el beso duraría más, no lo hizo. Muy pronto Yoongi separó sus labios de los míos y recostó su frente en la mía. Y ahí estábamos los dos, con la respiración agitada, mirándonos a los ojos. Él con su mano aún en mi cintura y ahora mis manos descansaban en su pecho desnudo. ¿Yoongi se siente como yo? ¿Esto fue real? Es que no lo puedo creer, no es la primera vez que me han besado, pero nunca antes habia sentido esto. Ese beso fue electrizante, despertó cada uno de mis sentidos y algunos que no sabía que tenía. A su lado me siento seguro y siento que esto es correcto. Siento que al lado de Yoongi es donde pertenezco.
Sin embargo, no pude dejar de sentir una tormenta en mi interior. Siento contradicción porque mi padre fue asesinado por alguien como Yoongi y eso me hace sentir culpable, pero no puedo negar lo que siento. Entre más corro de ese sentimiento, entre más me resisto, más crece la conexión y mi anhelo por él. Así que he decidido dejarme llevar por lo que siento esta vez, Yoongi no puede ser tan malo si puso su vida en peligro por mi.
-Yoon, debes descansar. Nos vemos en la mañana.- dije esto mientras empezaba a despegar nuestras frentes. Sin embargo, Yoongi puso su mano sobre la mía y con la otra viró mi rostro para que lo mirase a los ojos, esos ojos avellana que me han hechizado.
-Por favor, no te vayas. Quédate a dormir aquí hoy.- me suplicó.
¿Cómo decirle que no después de lo que acabamos de vivir y luego de ese beso? La verdad es que yo tampoco quería separarme de él, pero pensaba que era lo correcto. Sin embargo, Yoongi me lo estaba pidiendo y esta vez lo hacía consciente y despierto. Así que me recosté en la cama y él recostó su cabeza en mi pecho. Yo rodee su cuerpo con mis manos y lo fungi en un abrazo. Hacía un rato que habia una pregunta que rondaba por mi mente y no estaría tranquilo hasta que la hiciese.
-¿Por qué me salvastes?
-Porque era lo correcto. Tú no habías hecho nada para merecer un castigo de muerte a manos de Jungkook. Además, no podía ver morir a alguien más después de lo de Hoseok y mucho menos a ti. No podía verte morir.
-¿Por qué?-
- No estuve seguro hasta ese momento, pero tu cambiaste todo en mi. Desde aquel día que llegaste con tu actitud arrogante y tiraste el maletín con armas, supe que había algo en ti que encajaba conmigo. Me fascinaste, quería descifrarte. Eso levantó mi interés e hizo que te prestara atención. Y fue tanto lo que te estudie que comencé a encontrar a mi mente divagando en pensamientos sobre tu sonrisa. Luego vino lo de Hoseok y no pude soportarlo, pero sobreviví gracias a ti. Me cuidaste, te mantuviste a mi lado, y entonces comencé a sentir calidez cerca de ti. Y hoy, cuando vi a Jungkook apuntándote, no me pude contener. No podía perder a la persona que se convirtió en un rayo de luz en mi oscuridad. No podía dejar que te arrebatasen de mi lado.
No tenía idea de que Yoongi sentia todas estas cosas por mi. Pensé que era el único que había desarrollado sentimientos por el otro, me estaba volviendo loco. Creí que me imaginaba cosas. A tal confesión, no sabía cómo responder así que simplemente le di un suave y dulce beso en la frente, al cual el respondió con un apretón de manos.
-¿Yoongi de que son esas cicatrices?-
-Son heridas que me han dado a lo largo de los años. Llegar a tener lo que ahora poseo no viene de manera fácil. -
-¿Desde cuando eres así? -
-Desde pequeño, mis padres me abandonaron y solo me quedó la calle para sobrevivir. Aprendí de mala manera lo que es defenderse y luchar para sobrevivir. Estaba solo en el mundo, me tenía a mí mismo, pero no me iba a sentar a llorar. Iba a sobrevivir costase lo que costase. Tal vez no te lo puedas imaginar.-
Que triste vida la que ha llevado hasta hoy. No puedo creer que un padre abandonase a un hijo de esa manera. No me puedo imaginar a un pequeño Yoongi con frío buscando que comer. Durmiendo sobre un cartón en cualquier hueco, y mucho menos siendo herido por alguien. Esa visión de Yoongi me partía el corazón en mil pedazos. Cuando fui a preguntar algo más, me percate de que Yoongi se había quedado dormido debido a los analgésicos. Se ve lindo cuando duerme, es la primera vez que duerme tan en paz. Como desearía que tuviese otra vida, otro trabajo. Que nuestras vidas fuesen diferentes. Que él no tuviese que preocuparse porque lo van a matar y yo no tuviese que dividirme en dos. Sé que esto no debió ocurrir, pero tener a Yoongi en mis brazos se siente correcto. Quisiera detener el tiempo y que nos quedemos así para siempre. Hacia mucho tiempo que no sentía tanta paz y tranquilidad, una seguridad de que podría dormir bien. Aunque sea por un segundo quiero olvidarme del mundo exterior y de mis obligaciones, y dejarme llevar por el momento, por el aquí y ahora, y eso es Yoongi.
-Yo también sé lo que es estar solo, perdí a mi padre a manos de un mafioso.- fueron las últimas palabras que le dije al silencio antes de quedar profundamente dormido.

ESTÁS LEYENDO
Amor Infiltrado
FanfictionY: Todos tiemblan ante mi nombre. J: Me aseguraré de acabar con hasta el último mafioso. ¿Podrán un mafioso y un policía encubierto convivir? ¿El policía será descubierto? ¿El mafioso será vencido? Solo recuerda que a veces, las cosas no son lo que...