Amor Infiltrado

La Prueba de Fuego

POV Jimin: 

Me levanté con el estruendo de la puerta y una patada que me dieron. El dolor en el estómago era punzante, pero no podía dejar que descubrieran que me dolió. Con todo el esfuerzo del mundo, abrí los ojos y allí se encontraba Hoseok mirándome con la misma cara de disgusto de ayer. Me meteré en problemas si no hago cambiar su opinión sobre mí. Traté de sonreirle y darle los buenos días, pero no funcionó. Aún seguía mirándome con esa mirada gélida que causaría escalofríos en cualquiera. Sin duda alguna, Hoseok se estaba convirtiendo en un obstáculo para esta misión.

-Levántate, el jefe ha mandado instrucciones para tí. Tu tarea será interceptar un cargamento de armas que llegará pasado mañana al puerto de Incheon. El cargamento será entregado a las 9:00 de la noche. La tarea debes completarla solo, si fallas sabes que es mejor que no regreses.-

-¿De quién es el cargamento?-

-Del Boss.- 

Mis ojos se abrieron como platos, el jefe quería que interceptara el cargamento del segundo más temible en la mafia, Kim Namjoon. Si el clan dragón es temible por Min Yoongi, el clan serpiente es igual de reconocido. Su jefe, Kim Namjoon, es temido por todos pero no al nivel de Min Yoongi, por eso lo apodan el Boss. Los rumores corren de que el día en que Min Yoongi no esté, Namjoon se hará de todo el imperio. No solo tendrá su territorio, sino que también tendrá el de nuestro jefe. Siendo tan parecidos en estrategia y aptitud, ambos clanes han pactado una tregua, así que básicamente he sido mandado al matadero. Esto se debe a que mi participación no tendrá efecto en el clan ya que si me atrapan, soy un desconocido, nadie sabe que me asocio con el clan dragón. Así que quien más tiene para perder si esto no funciona, soy yo.

-¿Puedo utilizar el equipo que tienen?-

-El señor dio el permiso para que utilizarás la habitación de armas y te prepararas.-

-¿Así que puedo salir de esta habitación?

-Mientras sea de día tienes permiso de andar por las instalaciones, pero una vez caiga la noche tienes que regresar a este lugar.-

Con esas últimas palabras Hoseok me guío hasta el cuarto de armas. Cuando entré no lo pude creer, era el cargamento de armas de fuego más grande que había visto. En esta zona solo dos mafias controlan el flujo ilegal de armas, y lo son el clan dragón y el clan serpiente. Es por esto que nunca me había topado con una imagen de tal magnitud. La habitación estaba llena de estantes con diferentes tipos de armas que iban desde un revólver hasta armas automáticas. En el centro de la habitación había una mesa que contenía un mapa, había un pizarrón en la esquina y un archivo con diferentes equipos electrónicos. Lo que tenía que hacer era sentarme a delinear el plan para el atraco porque todo tenía que salir bien, de esto dependía mi vida.

2 días después...

Hoy es el D-day, desde hace dos días que no duermo bien, preparándome para esta misión. Antes de irme de la mansión, doy una ultima vuelta por el cuarto de armas para recoger una Glock19, un silenciador, una cuchilla y municiones. Cuando salgo del cuarto, repaso el plan y recuerdo que Hoseok me dijo que el jefe había destinado un auto para esta misión. Me dirigo al auto ya que tengo exactamente quince minutos para llegar al puerto. Según la información que logré recopilar, el cargamento llegará al puerto a las ocho de la noche y estará siendo vigilado hasta las nueve. A esta hora llegaría Namjoon a revisar la mercancía como siempre hacía. Así que tengo una hora para entrar y salir sin ser visto. Dejo el auto en una fábrica abandonada y recorro el último tramo a pie para evitar llamar la atención. Utilizo los contenedores de mercancía como mi escudo y sigilosamente me voy acercando. Tengo mi arma en las manos y la cuchilla está en mi cinturón. Si mi estrategia no me falla, habrá al menos una persona en cada una de las entradas cercanas al motín y solo uno custodiando las armas. Cuando estuve lo bastante cerca, me trepé encima de uno de los contenedores y me arrastré hasta el borde para poder visualizar la situación.

-Boss, el cargamento ha llegado, lo estamos vigilando por usted.-

Las armas ya están aquí así que no tengo tiempo que perder. Sincronizo mi reloj para dentro de una hora y desciendo del contenedor. Atacaré al vigilante de la entrada sur primero, para no causar revuelo. El tema es que tiene que ser un trabajo limpio, silencioso y sin dejar prueba alguna de quien está detrás de todo esto. Es por esto que a cada uno de los vigilantes de las entradas los ataqué por la espalda con la cuchilla. Es menos rápido que la glock, pero toma más por sorpresa y no da tiempo a reaccionar. Ahora solo me queda el que está con el motín. Como no quiero arriesgarme a ser visto, me trepo a uno de los contenedores y esta vez si voy a utilizar mi arma. Le coloco el silenciador para evitar los ruidos, le apunto y disparo acertando el pecho del otro. Cuando regreso al suelo, me aseguro de que no está respirando y abro el cofre para revisar el cargamento. En definitva las armas están aquí, así que lo cierro y comienzo a caminar hasta el auto. Tengo veinte minutos para salir de aquí. Cuando estoy saliendo del lugar, me encuentro con que a mi lado pasa una flota de autos, eso debería ser Namjoon llegando a la escena. Como desearía haberme podido quedar y ver su cara cuando descubriese que su preciado cargamento había sido robado. Sin embargo, no regresé porque si no, estaba poniendo mi vida y la misión en riesgo. Así que me dispuse a regresar a la mansión del clan. Cuando llegué no habían personas en las afueras, parecía como si estuviesen celebrando algo en el gran salón. Me bajé del auto, saqué el cofre del maletero y me dirigí al gran salón. Abrí las puertas dobles y empujé el cofre hasta que estuvo en el centro de la habitación. Todos se arremolinaron a mi alrededor, expectantes a lo que estaba sucediendo y entonces abrí el cofre.

-Un cargamento de armas robado a su servicio.- dije con un tono de voz algo sarcástico.

Min Yoongi se mostró sin ninguna emoción.

-Me hubiese gustado ver la cara de Namjoon cuando viese que su precioso cargamento no estaba. Has probado la mitad de tu valía, así que ahora quiero que te enfrentes a mi mejor luchador. Jungkook da un paso al frente. Jeong Jungkook es uno de mis mejores luchadores, si lo vences a él obtendrás su puesto en el clan.-

-No lo defraudaré jefe.- fueron las palabras de Jungkook antes de comenzar la pelea.

Jungkook estaba en modo depredador. En sus ojos se notaba que me quería asesinar esta noche. Yo no podía permitir que eso ocurriese, no iba a morir por las manos suyas ni ahora ni nunca.  De pronto Jungkook me propinó un corte en la mejilla y decidí que era lo único que le permitiría. Ahora era mi turno de propinarle un golpe, me lancé sobre él y luché para quitarle el cuchillo. Hubo un forcejeo, siento que me ha logrado atravesar con el cucillo, pero no puedo darle más tiempo y golpeo mi frente contra la suya. Aprovecho ese momento de aturdimiento y golpeo su brazo haciendo que tire el cuchillo y lo pateo lo más lejos posible. Entonces, la pelea se convierte en un combate cuerpo a cuerpo. Golpeo varias veces a Jungkook, pero nada lo desestabiliza, parece tener un balance perfecto. Así que decido utilizar otra estrategia, lo golpeo en la cara con la palma de la mano logrando desenfocarlo y con mis piernas lo derribo. Una vez en el suelo, me trepo encima de él y saco el cuchillo de mi cinturón para acertarle un golpe en el costado.

-La pelea ha terminado. Como es costumbre, el vencedor tomará el lugar del perdedor, y el perdedor quedará desterrado de nuestro clan para siempre.- Esas fueron las palabras que dijo Min Yoongi antes de que dos de sus hombres levantaran a Jungkook del suelo y se lo llevasen.

Lo he logrado, después de varios golpes y de desafiar a la muerte dos veces, ya estoy dentro de las filas del clan dragón. De momento, levanto la mirada porque siento que alguien me está observando y no me he equivocado. Min Yoongi me está observando desde su trono y esta vez no hay astibo de seriedad. Esta vez me encontré con una sonrisa coqueta de su parte. ¿Por qué me mirará de esa manera? Y lo que es más importante, porque siento que me gusta que lo haga. ¿Quién diría que el rey de la mafia también era el maestro de la seducción?

POV Yoongi:

Park ha logrado superar mis dos tareas así que no veo razón alguna para no dejarlo entrar. Este chico me intriga cada vez más. Es astuto, buen peleador y extremadamente atractivo.  La realidad es que Park ha resultado ser toda una caja de sorpresas.