Amor Extraño ||Hirogo|| En Edición.

Capítulo XXI

Bien bien decidí volver a escribir, quiero aclarar una cosa o varias .
Ja,ja bueno es que recién me doy cuenta que de verdad les agrada y siendo sincera deje muy abandonado el fic, ¿Sé preguntaran el por qué?.
Pase durante unos dos años recuperándome, a volver a tratar a sonreír, pase por una depresión que fue horrible, no me da vergüenza decirlo, sin embargo, ahora volveré con ánimos, y otra cosa, estoy rectificando los capítulos anteriores para que logren tener coherencia.
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La duda se impregnaba en Hiro, alguien lo llamaba en este momento, en que debía partir al cumpleaños de una de sus mejores amigos, ¿Quién podría ser?, asintió con la cabeza y notificó a Baymax.

—Bien Baymax, acepta la llamada, por favor — el adolescente recogía las cosas necesarias que necesitaría en el día.

El robot, de contextura de un gran malvavisco, acepto las órdenes de Hiro y conecto la llamada entrante.

—¡Cerebrito!, por fin respondes mi llamada— la voz era aguda en los oídos del azabache.

—¡Ah!, Karmi, eres tu nuevamente— su cabeza no soportaba que le gritaran, y más por el día pesado que tuvo—¿Ahora qué sucede?, ¿Faltó algo en nuestro proyecto?.

— Sí, falta la hipótesis del problema planteado, así que esperaba reunirnos hoy día para...

El azabache, inhalo profundamente, respondió con sutileza, no quería sonar irritado pero tampoco grosero, tenía bastante con los sucesos acontecidos en estos días.

—Karmi, te parece dejar un mensaje sobre lo que debo hacer, no puedo reunirme hoy contigo, tengo unos planes urgentes — respondió Hiro mientras acariciaba su propia nuca— son importantes, por favor Karmi.

—De acuerdo, pero cumple con tu parte, te dejo adiós— la adolescente de cabello castaño colgó la llamada con prontitud.

Por otro lado, con ansiedad, los pasos de Gogo de un lado a otro se marcaban, para ella, había transcurrido demasiado rápido el tiempo, escuchó la voz pronunciada y familiar.

—¿Y bien enana, cómo me veo?— era la forma peculiar que saludaba a su mejor amiga.

— no me quejo, he visto mejores galas— respondió con sarcasmo la joven.

—Que mi atuendo sea genial para la querida Honey, me siento cómodo y feliz — sacudió los cabellos de Gogo.

—Oye más despacio, pase arreglando mi cabello, al menos para el cumpleaños de mi mejor amiga sea bueno — alejo las manos de Isamu, quienes estaban sobre su cabeza.

Ambos amigos, seguían molestandose como siempre en medio del camino, gracias a la ayuda del GPS de Google, como solía decir Gogo:" tenía una pésima orientación al momento de buscar una calle".
Tomaron lo más temprano un taxi para poder ir al lugar de la celebración de cumpleaños de la rubia, no se cansaban de lanzarse bromas o sacar la lengua como en los viejos tiempos.

—Así que Gogo, ¿te arreglaste para ver a tu ex?— guiño el ojo al instante.

—¡Agh!— trato de disimular su nerviosismo.

A pesar de que hace poco habían dado por fin en la relación, aún no entendía porque cada vez que recordaba esa escena, en donde el azabache y esa adolescente de cabello castaño, platicaban y reían, hacía estremecer su corazón, peor aún sentía oprimido su pecho.

—Soy una joven brillante y lista, como apasionada en la robótica , entiende Isamu— recalco con su voz, golpeó ligeramente la frente con su dedo índice a su amigo — no quiero seguir en ese estado de "Ay mírame, mi novio me dejo, ahora somos extraños", es difícil, aún duele, puesto que tenía muchas expectativas, e incluso puedo parecer tonta, pero intento seguir, baboso—le saca la lengua.