𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗥𝗢𝗕𝗢𝗧𝗜𝗖𝗦 │ DOTAE

02

TWO

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—Kun, no entiendes.

—¡Sí! Te vas a meter en problemas.

—¡Ese no es el punto aquí! —Doyoung se quejó y se dejó caer en el sofá. Hablar con Kun era mucho peor que con su propia madre.

—¿Entonces cuál es? ¡Ves una puerta extraña y de repente necesitas saber qué hay detrás! ¿Y si no es nada? —Kun preguntó, sabía que debía haber algo, pero ahora mismo, todo lo que tenía que hacer era convencer a Doyoung de que no fuera.

Doyoung dejó escapar otra queja y se levanta del sofá con un ruido sordo mientras se estrellaba contra el suelo.

—¿Estás bien? —Kun preguntó, arrodillándose para ver cómo estaba Doyoung.

—¡Vamos! ¡Entraré a escondidas por 5 minutos! ¡Sólo dame 5 minutos! —rogó Doyoung, tomando las manos de Kun mientras suplicaba.

Kun frunció el ceño— No puedo. Realmente no quiero meterte en problemas. —dijo con un tono suave.

Fue entonces cuando Doyoung se dio cuenta de que volvería a perder contra Kun, pero no podía. Esa puerta rogaba que DoYoung se abriera.

—¡¿Sabes que?! —Doyoung se levantó del suelo— ¡Me voy! —declaró, pisando fuerte hacia la puerta de su dormitorio.

—¡¡No!! —Kun gritó, sorprendentemente. Era el peor en alzar la voz.

Doyoung se sorprendió cuando escuchó a Kun gritar. Se congeló allí cuando Kun bloqueó la puerta.

La expresión de enojo de Kun se suavizó cuando vio al sorprendido Doyoung. Le hizo sentirse culpable por gritarle.

—Lo siento, sólo... —Kun se calló, no siendo capaz de encontrar las palabras para disculpar su comportamiento.

—E-Está bien, supongo... —respondió Doyoung, haciendo que la atmósfera fuera incómoda para los dos.

—Iré contigo. —decidió Kun, caminando hacia su habitación para agarrar algunas cosas.

—¿Qué? ¡No! ¡Kun, no tienes que hacerlo! —Doyoung persiguió al chino y lo vio meter lo esencial en su bolso.

Kun enfrentó a Doyoung con una mirada severa como si dijera que no hay nada que lo cambie de opinión— Si te vas, entonces yo iré contigo, no puedo arriesgarme a dejarte ir solo.

—Kun, te meterás en problemas si te atrapan. ¡Todo el trabajo duro de tu familia se desperdiciará! —Doyoung accidentalmente dejó que se le escapara de la boca, no había tenido intenciones de mencionar los antecedentes de Kun.

Kun dejó de guardar las cosas y dejó escapar un suspiro— Eso no es justo. —dijo sin mirar a Doyoung.

Doyoung vio las manos de Kun agarrando la bolsa con fuerza, sabía que se equivocó cuando mencionó a su familia.

Kun se volvió de espaldas y finalmente miró al más joven (por un mes)— Antes de que me enviaran aquí —comenzó— me dijeron que yo también debería divertirme, arriesgarme a veces. No querían que me dedicara exclusivamente a hacerlos sentir orgullosos y estudiar, así que, ¿puedes dejarme ir contigo? —Kun preguntó, mostrándole ojos de cachorro.

Doyoung no podía y no quería decir que no— Bien —le permitió unirse, sabiendo que se iba a arrepentir más tarde.

—¡Gracias! —Kun saltó feliz antes de continuar agarrando su computadora portátil y los cables.