Secretos de Rayo Y Metal IV (SeongJoong)

Capítulo 24

SeongHwa debía admitir que nunca iba al clan del agua o a la playa porque detestaba el mar, no sabía si era algo familiar o solamente cosa suya. Pero demonios que odiaba el mar.

Habían escapado de la isla hace un día más o menos y la verdad es que todo había ido relativamente bien a excepción del estómago de SeongHwa que no podía con las comidas y el movimiento de las olas empujando el barco.

Gracias a los dioses ningún barco se desvió y tampoco tuvieron imprevistos. Lo único considerado un problema fue que los espíritus de oscuridad empezaron a protestar de que les llegaba mucha luz y eso que varios ya podían exponerse, pero aún así querían seguir en la oscuridad. Y por mucho que la nación se hubiese esforzado en esos barcos no podían cubrir el barco completo, no jodan.

SeongHwa se había quedado despierto gran parte de la noche mientras se quedaba en el timón del barco de la nación para que no perdieran el rumbo. El GPS iba en el barco de la alianza y la que había tomado el turno para llevar el barco había sido una chica de la alianza.

Para trasladarse de un barco a otro había que lanzar una cuerda al otro lado y lanzarse desde un punto en alto hacia el barco al que quisieras ir. No mucha gente lo había hecho, pero ChungHa ahora estaba en el barco de la alianza para estar con Hongjoong y hacerle compañía.

Si, Hongjoong emocionalmente no estaba muy bien y para qué hablar de Yeosang, JongHo y los Choi, ellos si que estaban mal. La abuela de Christine no había dicho mucho al respecto, pero ella no se veía angustiada o triste. Era como si ya se hubiera imaginado que algo así fuese a pasar.

Cuando el turno de SeongHwa terminó y llegó Namjoon el pelinegro se fue a los camarotes para dormir un rato y después volver al barco alfa. 

Según lo que decía el GPS era probable que estuviesen unas semanas en el mar, ni idea cómo es que el GPS lo sabía, pero había que creerle.

(...)

SeongHwa aterrizó en la cubierta y miró a su alrededor encontrándose a YunHo y a Mingi en la proa mientras miraban el mar, San estaba en el puesto de vigía mientras que Wooyoung estaba en la cubierta cargando a su bebé y Yeosang con JongHo dormían apoyados en la pared.

San había dado a luz poco tiempo antes de que abandonaran la isla, dio a luz a un hermoso y sano niño al que llamaron Taeyoung. Era muy parecido a San, pero Wooyoung insistía en que se parecía a él. 

El pelinegro subió hasta donde estaba el timón y en vez de encontrarse a la chica que debía estar al mando se encontró a ChungHa que tenía una sonrisa de oreja a oreja mientras sujetaba el timón. Desde que Lia había muerto efectivamente ChungHa se veía distinta, estaba un poco más delgada y tenía notables ojeras.

Si SeongHwa no mal recordaba los hermanos Jeong tenían unas joyas familiares. YunHo llevaba la de Aisha y la suya mientras que ChungHa la de Lia.

-Supongo que esto debe ser un paraíso para ustedes. - Murmuró SeongHwa.

-El mar es precioso, hay tantas maravillas que descubrir...- Dijo ChungHa para después mirarlo. - Hongjoong se durmió hace un rato, realmente estaba mal. -

-Siento que soy muy insensible. No me siento lo suficiente triste como Hongjoong, los Choi, Yeosang y JongHo. Es como si estuviera tranquilo y no quiero estarlo, Christine acaba de morir y yo no he derramado ni una puñetera lágrima. - Comentó SeongHwa frustrado.

-La abuela de Christine está igual que tú, de hecho mucha gente la ha criticado. A fin de cuentas era su última nieta viva. Pero no sé, esa señora sabe demasiadas cosas...-

SeongHwa soltó un suspiro para tomar la tablet y mirar por donde iban. El aparato decía que debían seguir recto hasta que llegaran a una barrera de rocas, iban a tener que atravesarla para continuar el viaje.