Para se clara las horas en esa clase se me hicieron eternas pero cuando sonó la campana no me resistí y salí de allí casi corriendo, no me detuve en ningún lugar solo me fui a casa, me tenía que preparar para la fiesta de Gabriel.
Me quiero dar el lujo de un día como hoy “lunes” escapar de casa para ir a una fiesta.
Me encanta la idea
Son las 8:30 pm, estoy en mi habitación específicamente dentro de mi armario, no he ido a una fiesta pero tengo una hermana menor y sé que como ella se va vestida, la ropa más ajustada y corta posible y en mi armario no conseguí nada parecido, por lo tanto para no verme fuera de lugar decí buscar en su closet ropa “prestada o robada” pero no encontré más que tres vestidos en losas decentes posible y que me gustaron; uno negro, uno rojo y uno blanco.
Los esenciales, que no deben de faltar en un armario, me decí por usar el rojo, el negro se vería muy formal y no quiero que el blanco se ensucie con una mancha de cualquier cosa asquerosa.
Me dirijo al baño, me doy una ducha me coloco el vestido, que por cierto me queda ajustado por todos lados, muy corto por encima de las rodillas, es decir por mis muslos lo cual hace ver parte de mi tracero, y unas plataformas negras que me encantan.
Me maquillo, labios rojos, delineador tratando de enfocar mis ojos marrones oscuros que no son tan emocionantes pero me gustan, me dejó el cabello largo azabache suelto, liso lo veo muy sencillo, así que desidí hacerle unas ondas.
Ya lista, son las 9:30, me asomo al pasillo de la casa para corroborar que no haya nadie despierto, efectivamente no hay nadie despierto y las luces de la casa están apagadas.
Busco una chaqueta negra para salir ya que estamos en otoño comenzando el invierno y las noches se vuelven cada vez más frías, me coloco la chaqueta y es increíble.
¡¡Me cubre más que el bendito vestido!!
Salgo a la calle por la puerta de el patio trasero de la casa para prevenir que no me vea nadie y camino unas calles más y llamo un taxi, la distancia a la cual tengo que ir es un poco lejos y decididamente no voy a ir caminando.
Cinco minutos han pasado y en ese tiempo ya estoy unas calles serca de la casa de Gabriel, pues se escucha música en alto volumen.
Bajo de el taxi, le entrego el dinero al taxista y se va, dejándome sola en la calle.
Caminando unas casas más siguiendo el sonido de la música, pensando que, mis padres no se darían cuenta si yo me escapó de casa, de seguro si se dan cuenta que me fui de la casa harían una fiesta para celebrar que me haya ido.
“amorosos mis padres”
Por más que quieran este último año que les queda conmigo y no se van a librar tan fácil de mí, por más que quieran deshacerse de mí no lo van a lograr.
Siento una corriente de aire en el cuello que me hizo estremecer todo el cuerpo con un escalofrío.
Si, no solo era el frío si no que también es la presencia de alguien.
—no sabía que eras tan hermosa vestida de fiesta- lo escuché decir con la voz ronca y baja.
No sé si el alcohol ya le hizo efecto, pero nadie me ha dicho que me veo “hermosa” y eso me puso un poco nerviosa, para disimular el nerviosismo le hice una pregunta.
—¿debería de agradecer ese comentario?- dije en un tono de interrogación.
—claro que debes, te ves hermosa...
Incómoda situación en la que he de encontrarme en este momento, un halago de este chico es demasiado bueno para ser verdad.
Quien sabe lo que el estaría intentando detrás de ese comentario tan bonito, no creo que sea verdad, todos tenemos defectos y yo tengo muchos.
— gracias, que te parece si vamos adentro- le propuse.
—ok, pero quiero que hagas algo por mí - sabía que algo así pasaría.
—de que se trata, espero que no sea una broma - dije no muy convencida.
—no, no lo es - dice con un tono serio.
—ok, habla- demandé rodando los ojos.
—quiero que actúes ser mi novia y que seas el DJ en la fiesta por treinta minutos.
Esto me cayó como un vaso de agua fría, nadie me habría propuesto un negocio como este, es como una humillación, una declaración de guerra o ¿Qué?.
—¿por que debería?, está es tú fiesta no la mía- esto debe de ser un chiste.
— ok, esto lo estoy proponiendo porque una vez me dijiste que te gusta el electro y quiero escucharte - no estoy muy convencida con esa respuesta.
— esa parte la entiendo, pero no entiendo lo de ser tu novia - no, de verdad que no lo entiendo.
—es sencillo solo tienes que estar conmigo todo el tiempo durante la noche y ya.
— que negocio tan extraño- esa es la cosa más extraña que me pudo haber pedido y pedirlo como un beneficio entre ambos, es algo realmente estúpido.
— ¿cuál sería mi beneficio?-
ESTÁS LEYENDO
24/7-365 estaré contigo
Teen FictionDependerá de los comentarios y correcciones... No tengo decidida como y de que trata la historia, pero por ahora esto es lo que tengo, después veré .