La Princesa Renacida- Towa

ceremonia del té cap 20

Kirinmaru
Estaba afuera esperando en la proa del barco a que  Towa llegue mientras me sentía tan bien la brisa golpeando mi rostro por un momento cerré mis ojos para relajarme, después de unos minutos siento la presencia de Towa que se estaba acercándose al abrir mis ojos y verla ella que venía con la misma ropa de ayer fruncí mi ceño no era por le quedaba mal o me moleste pero esa vestimenta seguía siendo algo provocadora, cuando por fin llegó  al barco se bajo del lomo de Ah-un y la salude..
 
-hola princesa- dije haciendo una pequeña reverencia
 
-hola Kirinmaru, buenos días- me dice ella haciendo también una pequeña reverencia
 
-bien vamos, hoy tenemos mucho que hacer- dije dirigiendo hacia la puerta para entrar
 
-ohh bien, entonces vamos- me dijo ella amablemente
 
Al entrar estuvimos caminando en silencio  al pasar frente de mi biblioteca Towa se de tuvo ya que no oía sus pasos pero yo continúe caminando hasta que me percate que ella no me seguía me di media vuelta y la mire detenidamente, porque ella también me estaba observando con la mirada confundida.
 
-hoy no vamos a leer los manuscritos, hoy te enseñaré otra cosa ven vamos- dije para que me siguiera
 
-ahh y que me enseñará?- me pregunto ella con algo de duda en su voz
 
-no es nada de otro mundo te enseñaré como debes sentar ante un rey o de los antiguos más poderosos- dije con voz firme
 
-esta bien- me respondió en un susurro
 
Ella sin decir más  me siguió,  la guie hasta unas de las habitación que estaba más al fondo, al abrir la puerta de la habitación ella se asombró ya había preparado las alfombras, los cojines y la mesa, además tenía todo preparado para que ella aprenda a preparar el té de la ceremonia y servirlo como debe.
 
-ohh usted preparo todo esto?- me pregunto algo asombrada
 
-si yo mismo lo preparé- dije muy orgulloso de mí
 
-wow increíble- dijo ella observando cada rincón de la habitación
 
-bien, ahora siéntate- le dije para ver como se sentaría
 
Vi que ella se acerco hasta el almohadón junto sus pies y piernas luego se arrodilla pero no inclinó bien su cabeza tampoco se arrodilló bien si lo hace ante un rey vi que tendría enseñarle como hacerlo, además sus manos deberían estar frente su pecho y no a los costados de su cuerpo..
 
-levántate Towa te diré cómo debes sentarte e inclinarte ante una realeza- le dije mirándola hacia abajo ya que yo aun seguía de pie
 
-uhh bueno- me dijo mirando con curiosidad mientras se levantó
 
-escucha atentamente, cuando te arrodilles a la ves debes hacer una reverencia de 45° grados con tus dos manos en el pecho las palmas de tu mano deben estar apoyando tu pecho mientras te sientas haciendo esta reverencia- le dije mientras le hacía unas señas
 
-esta bien lo intentaré- me dijo muy convencida de si misma
 
Vi que ella trataba de arrodillarse haciendo una reverencia y con sus manos en sus pechos como le dije, pero aún era complicado para estuvimos bastante tiempo practicando, la estuve observando de costado todo el tiempo  que ella practicaba, hoy pude verla más de cuerpo completo ya escritorio no me estorbaba, decidí sentarme ante ella como lo haría un rey, medí cuenta que ella me observó, entonces intentó sentarse como debe pero yo no lo hice para ayudarla sino para verla de frente porque quería ver su rostro, quería volver a ver sus ojos magenta.
 
-creo que ya has practicad bastante, ahora prepararas el té  y lo servirás- le dije mirándola muy atento
 
-si, claro prepararé el té – dijo ella con una sonrisa mientras se inclinó un poco hacia la mesa
 
-espera un momento Towa, no debes inclinarte si vas a preparar el té tienes que hacerlo desde tu lugar con la espada muy recta- dije con voz firme
 
-pero entonces, como lo voy hacer?- me pregunto ella algo confundida
 
-yo mismo te guiare, como debes hacerlo- le dije voz suave y tranquila
 
-bien,  estoy lista para escucharlo- me dijo mientras sonreía
 
-bien, escúchame aquí hay tres tipos  de teteras, la primera está en las brasas calentándose el agua, en la segunda tiene las hojas del té y en la tercera servirás el té para después servirlo en los vasos que están frente de ti- le dije mientras le señalaba cada unas de ellas
 
-esta bien, lo intentaré- me dijo algo desanimada
 
-ohh cierto todo esto lo debes hacer con la mano derecha, espalda recta y con mucha delicadeza- le dije mirándola fijamente
 
Mientras ella  preparaba el té en ningún momento le quité la mirada ya que no había nada que lo impidiera, no se porque pero disfrutaba verla concentrada además su postura para servir el té era muy buena además con la delicadeza con que lo hacía, pude darme cuenta que sus manos son algo pequeñas al lado de las mías, en un momento ella agarra unos de los vasos para darme unos a mi pero la detuve..
 
-espera Towa para darme el vaso de té debes agarrarlo con las yemas de tu mano derecha y la mano izquierda debe estar debajo del vaso así podrás darme lo como se debería- le dije
 
-de acuerdo are- me dijo muy tranquila
 
-ahh por cierto cuando me ofrezcas el té debes inclinar un poco tu cabeza- le dije
 
-esta bien, lo intentaré- me dijo en un susurro
 
Cuando ella me ofreció el té con la mano derecha agarrando con las yemas de los dedos el vaso de té y con la otra mano izquierda debajo del vaso mientras ella inclinó su rostro, no se porque lo hice pero acaricie la piel de su mano y descubrí que su piel es muy suave de seguro también es delicada, bebí un poco de té estaba delicioso, ella también bebió un poco de té de repente nos miramos detenidamente pude observar que sus labios estaban algo húmedos por tomar el té, no se porque pero nunca me había detenido para ver sus labios en un momento ella me habló.
 
-que es lo que quiere  Sun Wukong con nosotros?- me pregunto ella sin ruedos
 
Me sorprendió su pregunta en este momento pero era obvio que en algún momento me lo preguntaría..
 
-bien te contaré, Sun Wukong quiere tener mi reinado para gobernar esta región si eso sucede se ocasionara un caos, además el tiene razón en algo- dije haciendo silencio
 
-que razón tiene él?- me pregunto Towa algo confundida
 
-es que, un rey no puede gobernar sin una reina además todo rey necesita un heredero- le dije observándola
 
Medí cuenta que desde de decir esto último sus mejilla se ruborizaron, era la primera vez que la veía así ella desvió su mirada para ver su vaso que estaba entre sus manos, no me dijo nada estuvimos en silencio por unas horas en la misma posición en ningún momento aparté mi vista de ella no se porque lo seguía haciendo mirarla sin mover ni un músculo pero creo que solo me gusta verla en un momento ella habló.
 
-discúlpeme Kirinmaru, pero ya debo retirarme- me dijo ella mientras se levantó
 
-si,  de acuerdo- dije mientras también me levanté
 
Cuando ella se dirija hacía la puerta para retirarse vi su cuerpo esculpido dentro de ese traje, no porque razón me enojé pero ya no quería verla con ese traje entonces le dije.
 
-hoy no entregaste, entonces porque viniste con esa ropa?- le pregunté apropósito con voz algo áspera
 
-si tiene razón hoy no entrene, pero es la única ropa que tengo ya que las otras están muy gastadas – me contesto al darse media vuelta con voz de enojada
 
-ya veo pero tu deberías….. fui interrumpido por ella
 
-se como debe vestirse una princesa, pero a mi me gusta así porque puedo pelear bien sin ningún problema, además debemos prepararnos para lo que sea- me dijo sin decir más se retiró de la habitación
 
Sonreí de lado ya que podía ver el potencial de ella ante una situación de comodidad para la batalla además después de todo no deja de ser una princesa, volví a sentarme y a seguir bebiendo té no se pero el hecho de tenerla cerca me hacía sentir bien y tener curiosidad, en un momento me enojé ya que no podía creer en lo que acababa de pensar arroje el vaso contra la pared y se hizo mil pedazos.
 
Towa
 
Era de mañana muy hermosa al levantarme  recordé que tendría que ir de vuelta para el barco de Kirinmaru entonces le pregunte a mi madre Rin…
 
-hola bueno días madre, sabes donde esta mi otro ropa?- le pregunté con curiosidad
 
-buenos días mi niña, pues tu ropa está toda deshecha- me dice mi madre Rin
 
-ohh bueno no habrá ningún problema si voy así también hoy- dije en un susurro
 
-ya te irás?- me pregunto mi madre Rin
 
-si, prefiero ir ahora sin perder tiempo, además debo leer muchos papeles- dije antes de retirarme
 
Después de salir de la cabaña de mi madre me fui a fuera para llamar Ah-un con un silbido como en la otra ocasión, esperé unos minutos hasta que Ah-un apareció me subí enseguida en su lomo sin perder más tiempo nos fuimos rápidamente, estando volando recordé cuando Kirinmaru estuvo detrás de mi sosteniendo el pergamino para que no se me callera en mi frente, no se porque pero sentí mis mejillas arden y sacudí mi cabeza para no recordar otra vez ese suceso.
 
-pero en que rayos estaba pensando- dije en un susurro
 
-vamos Ah-un debemos llegar rápido- le dije para distraerme
 
Después unos minutos recordé que debía preguntarle a Kirinmaru sobre Sun Wukong y cual es su objetivo en todo esto, estando cerca del mar tuve una sensación extraña no se que fue pero sentí un escalofrío en todo mi cuerpo no era porque sentía peligro a lo contrarío se sentía bien, estando cerca del barco de Kirinmaru vi que él e estaba esperándome afuera no se porque pero lo veía tan tranquilo, en un momento me doy cuenta que el me estaba mirando pero su mirada penetrante pero a la vez tranquila, al llegar hasta su barco me bajé del lomo de Ah-un, el me saludo muy amable.
 
-hola princesa- me dijo él haciendo una pequeña reverencia
 
-hola Kirinmaru, buenos días- le dije haciendo también una pequeña reverencia
 
-bien vamos, hoy tenemos mucho que hacer- me dijo Kirinmaru dirigiendo hacia la puerta para entrar
-ohh bien, entonces vamos- le dije amablemente mientras lo seguía
 
Mientras lo seguía por el corredor para dirigirnos hacia la biblioteca sentí ese mismo escalofríos que sentí unos minutos antes de llegar era algo que nunca había sentido además estaba con él y nosotros dos solos, tratando de calmarme un poco, no se porque pero en un momento solo observaba su cabello pelirrojo lo vi tan interesante, se me cruzó en la mente en acariciarlo, pero hache mi cabeza para sacar ese pensamiento absurdo, al levantar nuevamente la cabeza vi que estábamos frente las puertas de la biblioteca y me detuve para que el abriera la puerta o para poder abrir la puerta, pero siguió caminando no sabía que tramaba estaba confundida no dije nada hasta que vi que el se detuvo y se dio media vuelta..
 
-hoy no vamos a leer los manuscritos, hoy te enseñaré otra cosa ven vamos- me dijo mientras hacía un gesto para que lo siguiera
 
-ahh y que me enseñará?- le pregunto con algo de duda en mi voz estaba muy confundida
 
-no es nada de otro mundo te enseñaré como debes sentar ante un rey o de los antiguos más poderosos- me dijo con voz firme y convincente
 
-esta bien- le respondí en un susurro
 
No dije nada más y lo seguí estaba algo nerviosa porque nos centrábamos cada vez más en el barco, además puede observar que él me había hecho pasar frente a otras habitaciones hasta que llegamos a la indicada, al abrir la puerta pude ver que él había decorado toda esa habitación con alfombras muy elegantes, unos cojines muy hermosos y había una mesa con teteras y vasos muy llamativos no dude en preguntar…
 
-ohh usted preparo todo esto?- le pregunte algo asombrada
 
-si yo mismo lo preparé- me dijo muy orgulloso de di mismo
 
-wow increíble- dije  observando cada rincón de la habitación ya todo era muy precioso además lo preparó para mmm…mi
 
-bien, ahora siéntate- me dijo haciéndose un costado
 
Mientras que me acerque al cojín y me arrodille Kirinmaru en ningún momento aparto su vista de mi sino que sentía me estaba observando todos mis movimientos, estaba nerviosa pero trataba de no demostrarlo ya que eso seria peor, él no se mueve de su lugar aún sigue ahí parado mirándome con mucha atención, hasta que me habla…
 
-levántate Towa te diré cómo debes sentarte e inclinarte ante una realeza- me dijo mirándome ya yo estaba arrodillada
 
-uhh bueno- le dije mirándolo con curiosidad mientras me levanté ya pensé que sería fácil
 
-escucha atentamente, cuando te arrodilles a la ves debes hacer una reverencia de 45° grados con tus dos manos en el pecho las palmas de tu mano deben estar apoyando tu pecho mientras te sientas haciendo esta reverencia- me dijo el mientras me hacía unas señas con las manos
 
-esta bien lo intentaré- dije muy convencida de misma
 
Intente sentarme como él me dijo pero me era difícil hacerlo correctamente ya necesitaba muchas prácticas para que saliera bien, además era imposible concentrarme si alguien te mira con mucha atención sentía que su mirada recorría todo mi cuerpo, en un momento el se arrodilla frente mío y lo observo como hizo una pequeña reverencia se arrodilló poniendo sus dos manos abierta encima de sus piernas mientras mantenía su espalda recta, en ese momento me esforcé en arrodillarse bien como él me lo había indicado, su mirada aún seguía en mí, estaba más nerviosa ya que estábamos frente a frente y solo nos separaba mesa que no era muy ancha que digamos..
 
-creo que ya has practicad bastante, ahora prepararas el té  y lo servirás- me dijo mirándome muy atento
 
-si, claro prepararé el té – dije con una sonrisa mientras se inclinó un poco hacia la mesa
 
-espera un momento Towa, no debes inclinarte si vas a preparar el té tienes que hacerlo desde tu lugar con la espada muy recta- me dijo con voz firme
 
-pero entonces, como lo voy hacer?- le pregunte algo confundida
 
 
-yo mismo te guiare, como debes hacerlo- me dije voz suave y tranquila me sorprendió como me hablaba
 
-bien,  estoy lista para escucharlo- le indiqué mientras sonreía
 
-bien, escúchame aquí hay tres tipos  de teteras, la primera está en las brasas calentándose el agua, en la segunda tiene las hojas del té y en la tercera servirás el té para después servirlo en los vasos que están frente de ti- me dijo mientras me señalaba cada unas de las teteras
 
-esta bien, lo intentaré- le dije algo desanimada ya que sabía que sería difícil
 
-ohh cierto todo esto lo debes hacer con la mano derecha, espalda recta y con mucha delicadeza- me dijo mirándola fijamente a los ojos  
 
Mientras servía el agua caliente en segunda tetera para hacer el té como Kirinmaru me lo había dicho, lo estaba haciendo con mi mano derecha y con la espalda recta que fue lo más difícil de hacer, lo hice con mucha atención y delicadeza por un momento me orgullecí de mi misma lo estaba haciendo perfectamente, por un momento ignore la mirada de él solo quería concentrarme para hacerlo bien y aprenderme cada movimiento que debería hacer, cuando por fin serví el té en los vasos estaba por entregarle uno a Kirinmaru, hasta que él me interrumpió.
 
-espera Towa para darme el vaso de té debes agarrarlo con las yemas de tu mano derecha y la mano izquierda debe estar debajo del vaso así podrás darme lo como se debería- me dijo él
 
-de acuerdo are- le contesté  muy tranquila
 
-ahh por cierto cuando me ofrezcas el té debes inclinar un poco tu cabeza- me sugirió él
 
-esta bien, lo intentaré- le dije dudando un poco
 
Al inclinar mi cabeza mientras le ofrecía el té agarrando el vaso con las llenas de mis dedos con la mano derecha mientras que con la mano izquierda sostenía el vaso de abajo pero con La mano abierta, en un momento sentí como Kirinmaru acarició mi mano derecha sentí un escalofrío pasar por todo mi cuerpo no se porque pero en un momento quería irme, pero a la vez no, para no mostrar mi nerviosismo también agarre el vaso y tomo un poco de té, estaba tan delicioso al levantar mi vista veo que Kirinmaru me esta observando como lo hacía anteriormente, nos quedamos mirando hace unos par de minutos, por un instante  veo que su mirada se desvía hacia mis labios y no sabia fue hacer hasta que recordé que debía preguntarle sobre Sun Wukong..
 
-que es lo que quiere  Sun Wukong con nosotros?- le pregunte a sin ruedos
 
Su rostro primero era de asombro pero después cambió a más tranquilo..
 
 
-bien te contaré, Sun Wukong quiere tener mi reinado para gobernar esta región si eso sucede se ocasionara un caos, además el tiene razón en algo- me dijo haciendo un poco de silencio
 
-que razón tiene él?- le pregunto a Kirinmaru algo confundida
 
-es que, un rey no puede gobernar sin una reina,  además todo rey necesita un heredero- me dijo observándome
 
Al escuchar lo último que me dijo sentí mis mejillas arder, vi como Kirinmaru me observaba con una mirada penetrante no sabía que hacer hasta que solo desvíe mi mirada hacia mi vaso que esta entré mis manos estuvimos en un silencio algo incómodo por unas hora ya que sentía como él aún me estaba mirando, quería hablar hacer algo pero no sabía que hacer ya estaba muy tensa esa situación hasta que tome volar y hablé.
 
-discúlpeme Kirinmaru, pero ya debo retirarme- dije  mientras me levanté
 
-si,  de acuerdo- dijo mientras también el levantó
 
Mientras me dirijo hacia la puerta para retirarme aún sentía su mirada en mí, tenía una sensación de nerviosismo y tranquilidad a la vez no entendía porque me pasaba eso hasta que Kirinmaru me habló..
 
-hoy no entregaste, entonces porque viniste con esa ropa?- me pregunto apropósito con voz algo áspera
 
-si tiene razón hoy no entrene, pero es la única ropa que tengo ya que las otras están muy gastadas – le contesto al darme media vuelta con voz de enojada
 
-ya veo pero tu deberías….. le interrumpi antes que siguiera
 
-se como debe vestirse una princesa, pero a mi me gusta así porque puedo pelear bien sin ningún problema, además debemos prepararnos para lo que sea- le dije algo enojada sin decir más me retire de la habitación
 
Al salir de la habitación camine por el corredizo para salír del barco me sentí un poco por contestarle así a Kirinmaru me sentí mal por un momento quise volver y disculparme pero al ver al cielo ya se había hecho de noche así que decidí irme a mi casa, al ver a Ah-un ahí no lo pensé dos veces y me subí en su lomo nos fuimos volando sentía esa brisa tan hermosa en mí rostro cerré por un momento mis ojos y me imaginé por un momento esos ojos verdes esmeralda y sonríe como una tonta pero después sacudí mi cabeza para sacar esa imagen de mi mente y solo concentrarme en ir hasta la Aldea.
 
Después de viajar por unos momentos llegué hasta la aldea y decidí ir a la cabaña de la anciana Kaede porque seguro Setsuna o Moroha se encontraría ahi al bajarme de Ah-un entre a la casa de la anciana Kaede, al llegar la saludé.
 
-hola anciana Kaede- le dije con una sonrisa
 
-hola Towa, hace tanto que no te veo- me dijo también sonriendo
 
-vine a visitarla y ver si Setsuna o Moroha, estaban aquí- dije mientras me acerqué a ella que estaba cerca de fuego
 
-gracias por tu visita, últimamente Setsuna y Moroha has estado matando demonios pero seguro mañana vendrán temprano- me dijo la anciana Kaede mientras removía las leñas en el fuego
 
-ohh genial, podría quedarme sí para esperarlas?- le pregunté
 
-si, claro quédate- me dijo la anciana Kaede
 
-gracias anciana Kaede- le respondí
 
-aldeas ya es hora de dormir- me dijo ella
 
-si, uuh recordé que le avisé a mi madre que estaría aquí- le respondí
 
-porque no le das un mensaje a Ah-un para que se lo lleve a tu madre- me respondió la anciana Kaede
 
-si tiene razón- le sonreí
 
 
Inmediatamente escribí sobre una madera con un carbón diciéndole a mi madre que estaría en la casa de la anciana Kaede, después de eso le Ah-un para que se lo entregue a mi madre, volví entrar en la casa  y después eso solo me acosté, de vuelta al cerrar mis ojos, imaginaba esos ojos verdes esmeralda que me observaba continuamente y no podía dormir bien, hasta que concilie el sueño..

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