♦Stolitz Week♦ [Helluva Boss]

Día 3 [Realización/Sueño]

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Todo estaba oscuro, como siempre, hasta que por instinto volteó y se encontró con un destello de sagadora luz. Cerró un momento los ojos y cuando los volvió a abrir se percató que estaba en una habitación desconocida, observó a su alrededor, era un cuarto algo grande, las paredes poseían papel tapiz color vino con las siluetas de estrellas y caballos más oscuras, era bastante bonito; los muebles eran pequeños y estaba decorados como para un bebé...

¿Bebé?

Oh...

–Blitzy~– la suave voz de Stolas resonó en sus oídos llamando su atención, sorprendiéndose de ver al búho sosteniendo entre sus largos brazos un pequeño bulto envuelto en una pequeña sabana morada con estrellas– vamos, acercare mi adorado IMP~– la sonrisa que le fue suficiente para hacer que se moviera y obedeciera.

Con algo de inseguridad fue caminado hasta donde el príncipe estaba sentado, su confundida mirada examinaba con cuidado la situación, realmente no sabia que estaba pasando, qué rayos era toda esta situación. Sin embargo, al estar a un lado de Stolas, su abrumada cabeza se puso en blanco y sus amarillos ojos se abrieron muy grande demostrando lo tan desconcertado que se hallaba.

Aquel bulto envuelto en una suave manta era nada más que un bebé, uno dormido y aferrado al pecho del demonio de la realeza, pero lo que más tuvo impacto en él, fue el hecho de que era una combinación de ellos dos; tenia plumas rojas que parecían cubrir todo su pequeño cuerpecito, pero una mancha blanca abarcaba una pequeña sección de sus ojitos cerrados, era similar a la forma de un antifaz, su pequeño piquito de mochuelo dejaba salir suaves suspiros, su cabeza poseía un mechon de cabello oscuro y dos cuernos pequeños, eran negros con la punta blanca. Era un búho, pero también un IMP. Un hijo de él... de él y Stolas.

Levantó la mirada de golpe y se topó con la dulce expresión del príncipe, se veía tan feliz y sereno, también muy enamorado.

–Finalmente esta aquí con nosotros Blitzy– susurró el más alto apegándose al pecho del diablillo quien al estar parado y el otro sentado llegaba perfectamente– ahora tenemos a nuestra amada Talitha, ¡¿no te emociona querido?!– la voz ilucionada del búho hizo que se estremeciera y observará hacia abajo otra vez.

–Si– fue lo único que sus labios pudieron dejar salir al sentir como el otro comenzaba a tararear una suave y tierna canción de cuna.

Una hija. De él y ese pervertido pajarraco.

Debería odiarlo...

Y aún así, sentía que lloraria en cualquier momento. Se sentía tan cálido y feliz. Tan conmocionado, maldita sea.

–Ahora somos una familia completa ¿no lo crees cariño?– mencionó el de orbes rojos, tan brillantes e hipnóticos– Loona, Octavia, Talitha... tu y yo al fin juntos siendo padres de tres lindas princesas... esto es como un sueño...

–Si... como un~ ¡espera!– se alarmó, su corazón se aceleró y jadeo sintiendo su frente sudar. Por alguna razón se sentía asustado.

–Despierta Blitzy...– el susurro del ave le hizo voltear, pero ya no había nada.

Porque todo había sido un sueño.

Ahora con sus ojos abiertos y el pecho comprimido, acostado en su solitaria cama, en ese momento solo deseo estar entre las suaves plumas del búho y que le dijera que aquello... que eso que tal parecía anhelar, no era solo un...

–Un sueño–

♦ f i n. ♦