⠀⠀⠀✧〻 𝑻𝑾𝑬𝑵𝑻𝒀 𝑺𝑰𝑿.

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─Lo siento mucho, n-no lo sabía

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─Lo siento mucho, n-no lo sabía.─ confesó Minho con mucha pena. ─Se me ha adelantado.

─No te preocupes, lo importante aquí es que tenemos que salir pronto.

─Pero, pero mi aroma es fuerte. Los demás van a sentirlo.─ llevó una mano a su vientre y empezó a sobarse. Su celo siempre había sido complicado.

Chan chasqueó la lengua tratando de no angustiarse por no saber qué hacer. Rápidamente se sacó la chaqueta y se la puso a Minho.

─La ropa me incomoda, Chan.─ balbuceó tratando de regular su respiración. Se encogía levemente por los hincones que empezaban a escocer su abdomen.

─Es necesario y lamento lo que voy a hacer a-ahora.─ habló algo avergonzado y Minho frunció levemente el ceño por la confusión.

Chan lo abrazó con delicadeza, rodeando los brazos del omega y dejándolo inmóvil, posicionando su mentón en aquel pequeño hombro. Por más que pareciera atrevido o mal intencionado, Minho no se alejó. El pelinaranja confiaba en el alfa y sabía que nunca podría hacerle daño, hasta su lobo gimoteó gustoso por el cálido tacto y se regocijó con calma.

El alfa ladeó su cabeza y acercó su pequeña nariz al cuello de Minho, rozándola contra aquella lechosa piel expuesta. El omega no pudo evitar dar un leve sobresalto al sentir algo húmedo y suave tocar aquella zona donde su aroma era más intenso.

─Lo s-siento, Honnie, pero tengo que impregnarte mi aroma de alguna forma.─ avisó Chan tímido, con las mejillas sonrosadas al igual que las del omega.

El alfa dio un par de besos más por toda la extensión del cuello de Minho y luego frotó con suavidad su mejilla con la contraria.

Se separaron lentamente y el omega bajó la cabeza, se sentía algo cohibido por estar una de las etapas más complicadas junto a Chan. El alfa sonrió por la ternura que el pelinegro emanaba, tomó el mentón de Minho con delicadeza y dejó un casto y lento beso en su frente.

Ambos conectaron sus miradas y Chan trató de trasmitirle toda el apoyo posible.

─¿Puedes caminar?─ el alfa se levantó y tomó la mano derecha de Minho.

El omega intentó reprimir las muecas de dolor y trató con todas sus fuerzas poder levantarse. Mas no pudo lograrlo. Las insistentes punzadas en su vientre volvieron y sintió como sus piernas
temblaban y perdían fuerza absoluta. Chan tuvo que sostener su cintura para que no cayera al suelo.

─Soy un inútil.─ murmuró y sus ojos volvieron a aguarse por la acumulación de lágrimas. Estaba demasiado sensible.

─Hey, no digas eso, es propio y normal de tu cuerpo el reaccionar de esa manera.

Minho iba a desmentir aquello, pero ninguna palabra salió al sentir cómo Chan lo sujetaba hasta no sentir el piso bajo sus pies, rápidamente y por inercia, enredó la cintura del alfa con sus piernas.

𝘁𝗿𝗲𝗮𝘁 𝘆𝗼𝘂 𝗯𝗲𝘁𝘁𝗲𝗿 ꗃ᤻ chanhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora