Capítulo 12: Visita inesperada.

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- Perdón por aparecer de repente, pero tu padre me dijo que estabas aquí y quería verte después de mucho tiempo... - dijo Katie dirigiéndose a Cassie.
Cassie me miró y Katie lo notó.
- Soy Katie, una amiga de Cassie, encantada. - me dijo a mí esta vez.
- Izzie, su..
- Hermanastra. - me interrumpió Cassie. - es la hija de la mujer con la que sale mi padre.

¿Cómo? ¿En serio Cassie acaba de decir que soy su hermanastra?

- Bueno y cuéntame, ¿qué tal por Barcelona? - preguntó Cassie para evitar seguir con el tema.
- Bastante bien, sabes que el cambio me costó muchísimo. - respondió Katie. - y más después de lo que pasó, me dejó muy tocada.
- Es entendible, yo tampoco lo pasé bien el día que te marchaste.
- No lo parecía, ni siquiera te despediste en el aeropuerto.

Me iba a ir al restaurante del hotel a comer algo pero parece que se está poniendo interesante la conversación, así que yo me quedo.

- Bueno, Katie... ¿cómo querías que fuera? Me moría de vergüenza, no podía aparecer así porque sí después de lo ocurrido.
- Ya, preferiste no dar la cara sabiendo que la responsable del problema fuiste tú.
- No, no era eso. Sabía que lo había hecho mal y mi ego era el que me dominaba en ese momento.
- Me importa una mierda tu ego, Cassie. No solo me pusiste lo cuernos...

¿Ha dicho cuernos? Ui, sí que se pone interesante.

- ... sino que encima fue con mi mejor amiga.

Hostia... vaya tela con Cassie. A mí eso no me lo contó.

- Creo que es mejor que continuemos la conversación las dos solas, no creo que a Izzie le importe mucho el tema.
- Interesarme me interesa, porque parece que ya no te conozco. - pensé.
- Si quieres vamos a tomar un café y lo hablamos tranquilamente. - sugirió Katie.
- Sí, vayan a tomarse el café, yo aprovecho y recojo mis cosas. - dije.
- ¿Tus cosas? - preguntó Cassie extrañada.
- Sí, me vuelvo a casa.
- ¿Cómo que te vuelves a casa? Izzie, no digas boberías.
- Katie te está esperando, disfruta del café. - le dije con voz desafiante y seguidamente me puse con el móvil para evitar que la conversación siguiera.

Me puse a recoger todas mis cosas para irme porque no dejaré que nadie juegue conmigo de esa manera. De verdad, no entiendo la razón para mentirme.

Terminé la maleta y bajé pensando en no encontrarme a Cassie porque si tiene alguna explicación que darme, no quiero escucharla.
Pero para mi suerte, efectivamente me la encontré. Ojalá haberla visto sentada sola pero no, estaba riendo a carcajadas con Katie mientras se tomaban el café.

- ¿Esa no es tu hermanastra? - preguntó Katie a Cassie.
- ¿Dónde? - respondió preguntando mientras se volteaba a ver si me veía. - Ah pues sí, es ella. Espera, ahora vuelvo.

La vi dirigiéndose hacía mí e intenté ir por otro lado pero ya era demasiado tarde.

- ¿Izzie? - me preguntó Cassie con cara de confundida.
- ¿Qué? - le respondí borde y seca.
- ¿A dónde vas?
- ¿Cómo que a dónde voy? A casa, Cassie.
- ¿Pero por qué te vas?
- Tiene cojones que me lo preguntes.
- No entiendo, hablemos.
- No, no tengo nada que hablar con mi hermanastra.
- Ah, ¿es por eso? Qué boba.. no te lo tomes así. No quería decirle nada de lo nuestro, lo pasó muy mal cuando lo dejamos.
- ¿Y? Llevo escondiendo mis sentimientos todo este tiempo delante de nuestros padres y ahora que por fin hemos podido ser una pareja sin preocupaciones, me dices que también los esconda delante de TU EX. Yo flipo - le dije, con voz dominante y caminando a paso ligero para evitar más conversación.
- Izzie, para. - soltó agarrándome del brazo.
- Suéltame, Cassie. - le dije con lágrimas en los ojos. - Me voy al aeropuerto, si de verdad te importo, nos veremos allí.

Me fui corriendo sin mirar atrás y sin poder evitar que las lágrimas recorriesen mi cara.

- ¡Taxi! - exclamé con profundidad. - Al aeropuerto, por favor. - le dije al taxista mientras miraba hacía el hotel llorando.

Una vez llegué al aeropuerto, me bajé y compré un billete para el próximo vuelo. Me quedé sentada esperando a ver si Cassie aparecía. Algo dentro de mí quería verla por última vez pero por otro lado prefería irme.

Han pasado 1 hora y 40 minutos y en 20 minutos sale el vuelo. Ya perdí la esperanza, no creo que Cassie aparezca.

Me dirigí a la zona de embarque y escuché un grito.

- ¡Izzie! - exclamó una voz conocida.

Me giré y vi a Cassie viniendo hacía mí. Algo dentro de mí hizo que me diese un escalofrío.

- Izzie, antes de que te vayas quiero decirte una cosa. - me dijo que Cassie mirándome a los ojos.
- Dime Cassie. - le respondí a punto de llorar.
- Por favor, perdóname por todo pero escúchame lo que te voy a decir.
- Se viene. - pensé.
- Eres una persona increíble, maravillosa y la chica más guapa que he conocido nunca. Desde el minuto uno sabía que entre nosotras pasaría algo mágico. Te has convertido en alguien importante y en mi debilidad. - se sinceró mientras me agarraba la mano. - Después de Katie no pensé que iba a volver a enamorarme, pero lo hice, me enamoré de ti. Cometí muchos errores con ella que no quiero que vuelvan a ocurrir, por eso quiero dar marcha atrás y aprovechar la oportunidad que me da y quedarme para volver a intentarlo con ella.
- ¿Perdón? - grité sin darme cuenta.
- Izzie, lo siento, pero tienes que ent...
- ¡Qué te den! - grité con más ganas mientras soltaba sus manos con energía.

Me di media vuelta y me dirigí a embarcar. Me subí al avión, me senté en el lado de la ventana y lloré, pero lloré a mares.
Esas palabras se han clavado en mí como una daga en el corazón. No me esperaba para nada esto de ella, pero ojalá le vaya todo bien, yo no le deseo el mal a nadie.
Pero sí quiero decir una última cosa y es a ti, lector, aprovecha tú que puedes volver a releer esta historia las veces que quieras, yo ya no puedo volver a vivirla.

{EL FINAL DE ESTA HISTORIA TAN BONITA Y PICANTE. SIENTO HABER TARDADO TANTO PERO ESPERO QUE HAYA VÁLIDO LA PENA🙏}

La locura que me provoca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora