Su olor era dulce e irresistible-Deku está en celo-
Él omega más codiciado de toda la escuela estaba en celo y para su mala o buena suerte en la recámara de aquel alfa.
Deku estaba harto vivió tanto tiempo siendo sumiso y denigrado por como vestía...
Disclaimer: ⭕️Los personajes de Boku No Hero Academia no son de mi autoría. ⭕️La actitud de ciertos personajes es distinta para así poder adaptarse a la obra, sin embargo intento mantenerme lo más apegada posible. Algunas personalidades tienen cambios muy notorios ya que hay sucesos que no sucedieron por lo cual nunca se vieron forzados a actuar de cierta manera (ejemplo: Todoroki). ⭕️Información adicional agregada en corchetes [].
OjO que soy mexicana y luego se me escapan ciertas groserías durante la redacción, perdón si les incomoda.
Sin nada más, disfruten la lectura.
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-¿En serio?- dijo mientras tomaba mis manos entre las suyas.
-Por supuesto, será un placer- creo que ahora entiendo porque dicen que los encantos de un omega pueden ser la perdición de un Alfa.
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Llegando a la casa de Izuku...
Entrando a la casa del peli verde todo fluyó natural, entre risas, y algún ocasional sonrojo del bicolor todo marchaba en orden. Sin embargo, TODOS sabemos (si no sabias pues ahora ya sabes) que el amor vuelve idiota a la gente y Todoroki Shoto no sería la excepción.
En primer lugar cuando estaba ayudando a barrer se le cayó varias veces la escoba y en uno de sus intentos de recogerla, la piso mal haciendo así que la escoba se le regresará, terminando por pegarse en sus joyas doradas, exacto, los todowebos. Después a la hora de trapear se le cayo la cubeta con agua, resbalándose y cayendo estrepitosamente al piso, dañando así su bellísimo, prácticamente patrimonio nacional, rostro.
Unas cuantas caídas después Izuku decidió que quizás le iría mejor con los trastes pero, de nueva cuenta, la idiotez toca la puerta y todoroki le abrió y hasta le invito un té y galletas. Dejando aún lado que casi rompe varios trastes la gota que colmó el vaso fue cuando el peli verde volteo y lo vio lavando su taza favorita; sí, esa que tenía una imagen de su héroe favorito, de aquella serie que debes en cuando veía; su instinto le dijo que algo no iba resultar bien y en efecto. Como si de cámara lenta se tratase Izuku corría desesperadamente para cachar aquella taza que lentamente caía a una muerte segura. Una vez que logró tener la taza en sus manos después de un magnífico derrape, Se levanto como resorte y abrazando al objeto con recelo le dirigió una mirada juzgadora y con un ligero toque de irritación muy ligero obvio, notase el sarcasmo.
-bueno ¿qué te pasa? ¿Siempre eres así de pendejo o te tomas descansos?- escupió Izuku sin escrúpulos, no fue hasta que se dio cuenta de lo que dijo que con toda la vergüenza del mundo tapo con su mano libre su boca- Lo siento, perdón, no quería decirte eso, un Omega no debería hablar así- habló rápidamente y con el nerviosismo a flor de pie.
