El Ángel Del Mar (Nico Di Angelo)

capítulo 13

POV. NICO

Me encontraba entrenando con Nidia, este mes ella a entrenado conmigo todos los días, es entretenido estar con ella, siempre tiene esa sonrisa en su rostro y sus constantes muecas me causan gracias,  también es muy perezosa, se cansa muy rápido.

Estaba sentado junto a ella descansando del entrenamiento, se recostó en el piso mirando al cielo y dijo.

Nidia: cuando estaba en Filadelfia me gustaba ir a un pequeño prado cercas de mi casa… como me gustaría estar en un lugar así – al voltear y mirarla, me di cuenta que se quedo dormida, se veía tranquila, muy relajada.

La observe por unos minutos, no me gustaba admitirlo pero de verdad era muy bonita,  parecía tan frágil como de cristal que con un solo rose podría romperse en mil pesados, pero era todo lo contrarió, era fuerte y muy valiente.

Me acosté junto a ella mirando el cielo, no sé que tenía esta chica que me volvía loco.

Cerré los ojos sintiéndome tranquilo, a estas horas del día casi no hay campistas entrenando, después de un largo rato escuche unos quejidos y al abrir los ojos mire a Nidia removiéndose en sueños.

Nico: Nidia, despierta – la moví suavemente pero no despertaba – oye, despierta – ella abrió los ojos de repente y me miro con tristeza.

Sin decir nada se abalanzo sobre mi abrazándome con fuera, pude sentir en mi pecho algo húmedo por lo que supuse que está llorando, no la aparte de mi, parecía afectada por algo, lentamente ella fue desapartando su rostro de mí pecho, sus ojos estaba hinchados y sus mejillas rojas por el llanto.

Nidia: discúlpame Nico… sé que no te gusta que te toque – se limpio las lagrimas con la manga de su blusa.

Nico: no importa… ¿Qué te paso? – pregunte.

Nidia: tuve una pesadilla… o eso creo, se miraba tan real – sollozo, rápidamente pensé en lo que podría ser… sueños mestizos.

Nico: vallamos al comedir, ya hemos entrenado bastante – ella asistió y juntos llegamos al comedor.

Cortamente me despedí de ella y avance hacia mi mesa, mire hacia la mesa de Zeus, Jason estaba hay muy concentrado en su comida, después mire la de Poseidón, donde Percy recibía con gran alegría a su hermana, ella por su parte solo le sonrió sin ánimos, parecía triste y eso me preocupaba, después hablaría con ella.

Pov. Nidia.

Después de quedarme dormida en el entrenamiento tuve una horrenda pesadilla, al despertar Nico me miraba confundido, lo único que pude hacer fue abrazarlo, sabía que no le agradaba que lo tocaran, pero de verdad lo necesitaba.

Cuando me separe de él me disculpe y pareció comprender que no me sentía bien y terminamos el entrenamiento, al llegar al pabellón me dirija a mi mesa, en ella ya estaba Percy quien al mirarme me sonrió cálidamente.

Percy: hola hermanita – saludo.

Nidia: hola Percy – conteste en voz baja.

Percy: ¿Qué tal el entrenamiento?

Nidia: bien, he mejorado mucho – cerré los ojos y pensé en mi comida.

Percy: ¿estás bien? – al abrir los ojos me encontré con la mirada preocupada de Percy.

Nidia: si, solo un poco cansada, eso es todo – trate de tranquilízalo.

Percy: sabes que si sucede algo puedes confiar en mí.

Nidia: lo sé Percy, no pasa nada, no te preocupes – le sonreí más animada y eso pareció convencerlo.

Después de la comida, Percy insistió en que tuviera un combate con él, para ver que tanto era lo que había avanzado con la ayuda de Nico, ciertamente no quería, de verdad estaba cansada,  pero no quería desanimarlo, así que acepte.