Los dos contra el inframundo

Te encontré

Alice's pov

Frente a mi, se encontraba un chico de tez muy palida, cabellos negros que caían sobre su frente y cubrian parte de sus ojos, sus ojos azabaches, rodeados por unas visibles ojeras, su delgado cuerpo, su camisa negra con una calavera, zapatos converse negros y pantalones pegados, negros con cadenas.

Frente a mi estaba Nico di Angelo.

Me bajé de los hombros de Luke y corrí hacia el.

No estaba tan lejos, cuando llegué, me tire sobre el y lo besé.

Ya nada me importaba.

Solo eramos el y yo.

El colocó su mano en mi cuello para apretarme mas a el, como si fuera a uir en algun momento.

Me besaba tan fuerte, con....nesecidad.

Hace un año que lo llevaba esperando, todas las noches soñaba con el.

Soñaba con nuestro reencuentro.

Y ahora estaba sucediendo.

Tuvimos que separarnos por el condenado oxígeno y el tomo mi cara en sus manos.

-Te encontre -dijo en tono burlón

-Me alegra que me hayas encontrado -dije antes de volver a besarlo.

-Y esta vez, no te dejare ir, no de nuevo -dijo el, pegando nuestras frentes.

-Yo no me iré a ningún lado, no te preocupes.

Ahora fue el quien volvió a besarme.

-Te extrañe, Scott -dijo después de reirse.

Me mordí el labio.

-Yo mas a ti, sombritas.

Otro beso.

¡Dioses!

Jamás me cansaría de besarlo.

Es más, no habrá suficiente tiempo para besarlo durante toda mi vida.

Lo ayudé a levantarse. Cuando me dí la vuelta, Luke y Charles miraban a otro lado, incómodos. Pero Silena estaba llorando de la felicidad.

-¡Eso es a lo que una hija de Afrodita llama verdadero amor! -Dijo después de abrazarme.

Vio a Nico y dijo:

-Disculpa, ¿Eres Nico di Angelo? ¿Hermano de Bianca?

El asintió con la cabeza.

-¡Por Afrodita! -exclamó Silena -¡Mira como has crecido!

-¿Lo conocias? -pregunté con una sonrisa

-Cuando tenia unos 9 años.

Nico se puso colorado.

-Y...¿son novios? -preguntó Silena

¡¡BOOOOM!!

Ahora yo me puse colorada.

-Ummmmmm...No lo se....

-¿Alice? -Preguntó Nico

-¿Uh?

-¿Quisieras ser mi novia? -Preguntó Nico

Algo se movió dentro de mí.

Lo decia tan...natural.

Y eso me encantaba.

-Dejame pensarlo...