Capitulo XXI

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-¿Estas segura? ¿Para que vas a ir, para reclamarle lo que te hizo, o para juzgar a tu hermana?--Alex se aparta de mi abrazo y vuelve a cruzar los brazos, y yo dejo caer los míos a mi costado.

-Oye, ¿cual es tu problema?--le reprocho--yo solo he venido para que me acompañaras por si las cosas se ponian feas. Pero veo que estas muy a la defensiva--me giro dispuesta a salir pero Alex me toma del brazo.

-Espera, ya te acompaño--dice con un tono de voz escaso de expresión.

-No gracias, yo iré sola, no te preocupes--y me suelto de su agarre, tengo muchas cosas en la cabeza como para todavía preocuparme de mi novio que en vez de apoyarme, me juzga. Así que salgo sin volver la vista atrás.

***

Aún recuerdo perfectamente la casa, después de cuatro años, se muy bien su ubicación, no ha cambiado mucho a pesar del tiempo. Las mismas ventanas, el mismo color blanco, que ahora esta ennegrecido, incluso las cortinas que adornan las ventanas siguen siendo las mismas. Me imagino a mi misma entrando por esa puerta, si estará Susan, mi madre, en casa, si habrá alguien que le haga compañía, ¿se habrá vuelto a casar? No puedo saberlo con seguridad, no la conozco lo suficiente.
Y sobretodo Catherine. ¿Qué voy a decirle?
¿Cómo va a reaccionar al verme aquí? Estoy a punto de dar media vuelta y marcharme cuando un hombre de unos cuarenta y pocos años sale por la puerta, me quedo petrificada en donde estoy, expectante. ¿Quién es este hombre? ¿Será pareja de Susan? Tengo muchas preguntas y pocas respuestas. El hombre va vestido con unos pantalones de mezclilla y una camiseta a cuadros, tiene la tez clara, y una barba prominente, un cabello negro azabache, igual que la barba, pero lo que más me impacta es su penetrante mirada, que más que ser amigable es hostil; lo que noto es que no me reconoze, aunque, ¿cómo va a hacerlo si nunca me ha visto en toda su vida? Me examina un momento y luego dice:

-¡Hey tu! ¿Qué haces aquí? Si vienes a ofrecer cualquier producto, te aviso desde ahora que no me interesa--su voz es grave y fuerte.

-Yo...--tengo que inventar algo rápido--. Amm, pues, verá, estaba buscando a una persona, un chico, es alto, moreno y guapo hasta perder el sentido--digo con la mejor sonrisa que tengo. El hombre hace una especie de sonrisa arrogante.

-Chica, aquí no vive ningún chico, no te creas de todo lo que te dicen--noto el desdén en su voz, acompañada de lástima. Luego se gira y se aleja por la calle. Yo me quedo un momento más, esperando a que el hombre se haya alejado lo suficiente.
***
Cuando llego de nuevo a casa, Alex esta sentado en uno de los escalones que dan a la entrada de la puerta. Yo intento pasar de largo pero fallo estrepitosamente, tengo que decirle algo, y él también.

-Lo siento por lo de hace rato--dice mientras se pone de pie. Yo suelto un suspiro de resignación, no puedo estar mucho tiempo enfadada con él.

-Sólo quiero que me apoyes en esto que me esta pasando. No se que fue lo que te paso hace rato, y tampoco se si estas molesto porque no te lo había contado ¿es por eso?

-No, claro que no...es sólo que, es raro, si yo me peleara con alguien de mi familia, no me separaria de ellos--frunzo los labios ante su comentario. Él no es yo.

-Esto no te concierne a ti--digo con la voz baja y la vista clavada en el suelo--y si vas a pensar eso, entonces no te contare nada al respecto. Siento que me ves como la mala del cuento, cuando en realidad yo no hice nada malo.

-Alicia, ¿crees que te veo como una mala persona? Por Dios ¡claro que no!--dice acercandose a mi y tomandome la cara con las manos, lo que hace que alze la vista y lo vea directo a los ojos.

-No, tranquilo, esta bien. Estoy bien--y lo abrazo ocultando la cara para que no pueda ver mi expresión. Él no lo entiende, y no creo que cambie de opinión. Con lo que dijo hace un momento, me queda claro que él todavía duda de mi, y que cree que yo soy quien debe ofrecer perdón a mi madre y a mi hermana.

Perdon por no subir ayer, aún no estaba listo el capítulo, pero aquí tienen este. Espero que les guste.

Enamorada de mi Mejor AmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora