Hola mis hermosas lectoras... He aquí la 15va. Entrega de este hermoso, romántico y tormentoso fic :3 yo se lo que les digo... van a amar mas este fic XD.
Y bueno que les puedo contar, en un principio no creí llegar a tantos capítulos, pero me he enamorado de mi propio fanfic, se ha convertido en algo maravilloso para mi, el perderme en este mundo del fanfic, nunca antes me había animado a hacerlo, y bueno creo que debí hacerlo hace tiempo, cuanto no hubiera hecho ya... en fin siempre se puede hacer lo que uno desea si se lo propone en verdad.
Bueno por el momento las dejo con uno de los capítulos que dara pie a los mas dramáticos que podrá tener, y uno de los decisivos, les recuerdo el final ya lo tengo listo, pero todo dependerá como mi mente acomode este capitulo al del final, pueden seguir mas o acabarse en el siguiente, un beso y nuevamente les agradezco por leer. por todos sus review y favs.
Cap 15: Ahora o Nunca.
La mañana y tarde de compras transcurrió tranquilamente, se hizo la despensa de la mansión, así como algunas compras extra hechas de una forma muy amable y ya acostumbradas muestras del Conde Phantomhive, vaya que ese desmayo de hace meses y el profundo amor que le tenia a su Demonio-Mayordomo era tan fuerte y capas de volverlo aún mas dulce, o bueno realmente permitirle mostrarlo en verdad, pero en el fondo nuestro amado Conde de ya casi 16 años, no olvidaba su venganza, era algo de lo mucho en lo que se había quedado pensando justo después de que su amado Sebastián le dijera: "-No importa como… No importa lo que me toque pasar, usted tendrá su venganza y Nosotros nuestro amor por la eternidad, ya me decidí…-", Realmente El menor de cabello azulino se había perdido en sus pensamientos, No es que dudara de Su Amado de azabache, si no, que se preguntaba como podría lograrlo, supuesta mente todo seria posible para un demonio de su alcurnia... un principie del mismo infierno, pero... también había "reglas" que respetar, joder acaso los demonios las respetan... ¿En verdad?... Pero no logro comprender, esto realmente era algo que nuestro amado Conde, no podía descifrar... Todo esto y mucho mas era lo que pasaba por la mente de Ciel...
-Bocchan... Bocchan... ¿Acaso no escucha ni lo mas mínimo de lo que le dijo?- Se oyó de la voz de Sebastián, quien tenia algunos minutos hablando sobre algunos té que le gustaría llevar para la mansión, pero este no recibió respuesta por parte de su amo, así que con delicadeza le tomo el hombro, se agacho un poco y le susurro al oído con un tono lento y muy seductor: "-Ciel... Mi amor, ¿Estas bien?, ¿Te sucede algo?-" Basto el susurro de la sensual voz de Sebastián llamando "Mi Amor" para que saliera abrupta mente de sus enredados y quizá melancólicos pensamientos que turbaban su mente desde hace algunas horas.
-¡Ah!... Sebastián... Yo... Ahh... Disculpa, Estaba pensando algunas "cosas"... ¿Que era lo que me decías?... Ah.. ¿Cuando llegamos a la tienda de Té?...- Preguntaba algo desorientado Ciel y omitiendo algo sobre como lo había llamado Sebastián, Quien ante la respuesta de su Joven Amo, solo puso su mano en su frente y suspiro con desanimo, mientras se le quedaba viendo. -Joven Amo... ¿Realmente se encuentra bien?... Lo noto extraño desde que salimos de la mansión... Ya esta empezando la época de frío, ¿No sera que ya se esta enfermando?...- Decía en un tono preocupado el demonio mientras lo miraba y ponía una mano en la frente del joven de ojos zafiro, a lo que este reacciono voleando la cabeza a un lado, sonrojado y apenado... -Estoy... Bien Sebastián... Solo pensativo... hablamos en privado cuando lleguemos a la mansión.- A lo que Sebastián suspiro nuevamente, pero seria paciente, ya que Ciel le daría respuesta después, así que ya teniendo la atención de su amado Conde, se pusieron a elegir variedades de Té, que eran del gusto del Joven Amo, el cual le entrego una sonrisa así como una mirada dulce, así reafirmando un sentimiento en el corazón del Demoníaco de mirada carmesí.
Ya terminadas las compras de la mansión procedieron a regresar a esta, después de una hora de viaje en el carruaje, al llegar a la mansión, como era ya costumbre bajo primero el mayordomo para tenderle de forma amable y dulce a su Joven Amo para que asi bajara de este, cruzaron el umbral, mientras los demás sirvientes bajaban y acomodaban todo, ellos sentían que algo iba a pasar entre ellos dos, era bien sabida por estos la relación que sostenían Amo y Mayordomo, pero no la naturaleza de este ultimo.
-Sebastián, vamos a mi oficina, hay algo que quiero preguntarte...- Fue lo único que menciono nuestro Joven Conde de 15 años... El demoníaco solo acento con la cabeza y lo siguió en completo silencio, pero una ves dentro de la oficina y ya bajo llave, las cosas que quizás estarían por suceder mostrarían algo... Entonces el demonio de mirar rubí hablo. - Joven Amo, dígame que es lo que le sucede, se encuentra así desde que salimos de la mansión en la mañana, Dígame que no es mi culpa... No quisiera que se encontrara mal a causa mía...- Hablaba con gran preocupación el demonio hacia su humano.
-Siéndote honesto Sebastián... ha sido por algo que me has dicho justamente hoy, que lucharías por nosotros, pero no es que me encuentre mal, sino mas bien, estoy intrigado, se que lo podrías hacer lo que sea, pero ya que mencionaste que tienen reglas, cosa que no conocía... me he quedado pensativo, ¿no te seré una molestia?, ¿no saldrás lastimado?... Me preocupa que algo te pase, se que eres un ser inmortal, pero a la ves... ¿Que pasara si después de cumplida mi venganza no encuentras forma y tienes que devorar mi alma, estoy mas que resignado a ello...- Hablo el menor sin pena alguna, aun con su forma tan afable de ser ya, era raro que se expresara tanto, cosa que dejo al mayor perplejo... y comenzó a pensar tratando de asimilar que su Amo... Su amado... estaba preocupado por la seguridad del demonio y no la propia... y mas que realmente no le importaba morir si no se obtenía lo deseado que era vivir su amor eternamente, aun asi le consolaba a cierta forma tétrica que su alma se quedaría como parte de la existencia de su amado demonio: Sebastián Michaelis.
-Ciel... Por favor... Yo no sabría como vivir una vida inmortal sin ti... Ese día se acabaría mi vida misma...-Sebastián se acerco a su amado Ciel para abrazarlo fuertemente, casi en una suplica de que no pensara en ello, que el encontraría la forma de resolverlo... -Ciel... No me importa ya tú alma... aunque sea lo único que mueva a un demonio... desde que soy tu mayordomo desde hace 5 años, me di cuenta que mi vida ya no es vacía, tengo un motivo para el cual existir...- El demonio parecía romper en llanto, algo que tomo por sorpresa a Ciel quien había levantado su rostro en ese abrazo para ver el rostro pálido de su amado, El mayor lo tomo del mentón y lentamente con una voz llena de amor y ternura, asi como de devoción y esperanza dijo: -"Solamente basta que le sirva un Té, para que me entregues una mirada y hagas nacer un sentimiento tan único en mi".-
Bueno hasta aquí llega el capitulo de hoy, espero lo hayan disfrutado, espero sus favs y review, un beso y gracias por seguir mi historia, me alegra que la disfruten.
Hime Diamont, 2014 ©
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Un Té, Una Mirada, Un Sentimiento
Fanfiction[Advertencia: Yaoi, Lemon, OoC] El Joven Conde Ciel Phantomhive ya de 15 años, sufre un desmayo, el cual alarma a todos sus leales sirvientes, pero sobre todo a su Mayordomo-demonio, esta historia nos lleva a ver a un conde pasar por un comportamien...