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ナレーター： Narradora
Se encontraban ahora los dos caminando en la U.A; las cosas se habían relajado después de que la peli celeste le había reclamado en haberla dejado plantada en aquel parque.
A pesar del tiempo aquella castaña jamás se separó de su amigo Amajiki, siempre le había prometido nunca alejarlo de ella.
Tamaki a pesar de todo seguía enamorado de aquella chica de dones de plantas, seguía ocultándolo siendo la única que sabría de ese profundo secreto la peli celeste.
Pero no podría dejarla de amar, su forma de ser la cautivó al momento de verla y si tan solo hubiera sido el que la hablara primero.
Tal vez hubieran sido algo más que unos simples amigos...
Pero se retractaba diciendo así mismo, que sería insuficiente para alguien como _____
Ella merecía estar con Mirio...
Alguien brillante cuál diamante merecía también a una persona radiante como el sol
El jamás podría competir con aquel sol de apellido Togata...
Sonó el despertador, que señalaba las 5:30 AM de tono rojo que parpadeaba una que otra vez.
Abrió levemente sus ojos mostrando su iris de tono azul añil, estiró su brazo y apagó el despertador, callando aquel típico "beep"...
Se levantó lentamente para acomodarse y sentarse en su cama, moviendo las sábanas de tonos obscuros.
– Mmmm... – Llevo su mano hacia sus ojos para tallarse – Debo apurarme sino llegaré tarde... –
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Rayos del sol llegaban a la cara de aquel azabache, dónde sentía el calor que daba.
Sintió unos brazos que lo rodeaban en su torso, sus mejillas se pusieron escarlata.
– Tama~ ¡Buenos días! –
– B-buenos días ____ –
Se separó del joven, dejándolo a el con más ganas de sentir ese afecto que hacia su corazón acelerar – ¿Cómo estas Tamaki? ¿Amaneciste bien? – posicionadose a lado de aquel chico siguió caminando hacia la escuela.
– Estoy bien, ¿y tú cómo estás?... –
– ¡Amanecí de buenas! Hoy es una fecha muy especial –
– Mmm? Había un exámen?!... – Comento paniqueado porque no había estudiado nada
