En una calle desolada
con el cielo nublado,
unas cuantas luces rotas
sin gente por ningún lado.
El asfalto destrozado
y la tensión en el aire,
valijas en las manos
y una campera inflable.
Entre caras y murmullos
escondidos entre cortinas,
rompe el cielo
y la tormenta se avecina.
Con pasos de cristal
y lágrimas de acero,
se quiebra la cara,
tiembla el suelo.
Y entre mármol y madera
las luces se encienden,
que si bien es algo tenue
siempre se agradece.
Correr quien pudiera
y que camine el que tenga el don, entre el agua se oyen los pasos
de un hombre en desesperación.
A los brazos del consuelo
y al hombro de la esperanza,
las valijas caen
y la tormenta se calma.
Con palidez notoria
y derramando gotas escurridizas,
sorpresa es ver
de su boca una sonrisa.
Comer adecuadamente,
dormir en un cálido lugar,
que tan poco se nesecita
para a alguien ayudar?
Siempre llega un nuevo día,
una nueva oportunidad,
puedes ser el que las toma,
puedes ser el que las da.
Hoy podrías ser alguien sumido en el dolor,
quizás mañana seas la luz de un corazón.-Ferza.
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Un Trozo de sentimiento
PoesíaEntre escalones de costados amurallados y alambres finos color carbón, mi mente diluvia un nuevo mundo atrapada en su propia prisión. Mientras tanto sentada me encuentro cantando una larga canción. Que su letra se vuelvan poemas, Y el público adm...