Dulce intoxicación (XiCheng)

Capítulo 4: Lindura oculta

-Lo siento Jiang Cheng, no los hubiese llamado, por favor a la próxima dime todo antes de que el profesor Zhu hable- Wen Qing se sentó junto al joven y este asintió - Puedes ir a clase- Wen Qing sonrío y Jiang Cheng de nuevo asintió, después salió corriendo dejando los guantes.

- ¿Que fue todo eso? - XiChen realmente no asimilaba nada de eso, tal vez porque el siempre fue buen estudiante, pero sus padres nunca se comportaron así.

-Eso es el motivo por lo cual evitamos llamarlos – suspiro - esto realmente... - Se toco la cien

- ¿Siempre son así? – XiChen esperaba que era solo por el malentendido

-No lo sé, lo que yo he visto nunca los veo de buen humor, pero supongo que siempre los llamamos por algún problema.

- ¿por qué dijo que no le creerían? ¿por qué no le creyeron?

-Xichen hace dos años ¿recuerdas el escándalo? –

-No mucho, la verdad – Era cierto XiChen solo sabia del titular y lo que los demás le comentaron.

- Bueno el conto lo que paso, pero mi primo tenia su versión y realmente hasta yo le creí a mi primo, las pruebas también estaban en contra de Jiang Cheng. Por suerte su amigo Huaisang encontró unas cámaras del hotel en el que se hospedaban y se veía todo lo que paso, pero esto ya era tarde, el escándalo ya había salido a la luz, el nombre Jiang Cheng ya estaba por el piso y ya este había sido señalado como el responsable, lo único que pudimos hacer fue echar a mi primo.

XiChen asintió no recordaba que había pasado con exactitud, pero ahora entendía un poco más su actitud, tomo los guantes del joven e inicio a buscarlo.

Xichen no lo encontró porque este estaba en clase, pese a las heridas de sus manos vio como el joven escribía, y no pudo evitar preocuparse, se veía doloroso, pero aun asi continuo su camino, él también tenía clase. Se retiro a preparar las partituras para la clase de los grados inferiores, antes de sonar al timbre inicio a caminar con la intención de entregar los guantes al joven, pero al llegar al salón ya iban saliendo y al parecer el joven no estaba.

Jiang Cheng después que se retiró de la oficina, cada paso que dio sintió que las lágrimas caerían, pero se negaba y solo seguía reteniéndolas. Al llegar al salón abrió la puerta y la golpeo, el profesor de cálculo lo observo y lo dejo pasar, Jiang Cheng se sentó y saco su cuaderno e inicio a copiar lo del tablero con fuerza, pese a que sentía que cada que presionaba el esfero de le habría una herida.

- ¿Qué te dijo mi tío y mi tía? – Wei WuXian hablo acercándose, pero Jiang Cheng lo ignoro, sentía que si hablaba las lágrimas caerían - A Cheng ¿qué te dijeron? - Insistió.

-Joven Wei, si sigue hablando se sale de mi clase- Wei WuXian asintió y se dedicó a escribir observando de vez en cuando a Jiang Cheng, en el momento que el timbro sonó, Jiang Cheng tomo su mochila y salió disparado quien sabe a dónde.

Lan XiChen había estado huyendo de algunas jóvenes que le pidieron almorzar con él, pese a que era amable no quería involucrarse con nadie y menos con estudiantes, el tema del amor era un tema vetado para XiChen, sin darse cuenta llego a un lugar que no le era conocido, así que trato de retroceder, pero escucho una risa y al final se dirigió hacia allá.

-Me hacen cosquillas – Jiang Cheng estaba agachado alimentando a tres pequeños perritos con su mano, estos lambian también las heridas de Jiang Cheng que ya no tenían curitas, XiChen se acercó.

- Se te pueden infectar las heridas- Jiang Cheng giro al escuchar la voz del hombre

- Gracias por curarlas, por lo de mi carnet y por tratar de interferir con mis padres – Jiang Cheng hablo, pero la voz del joven temblaba.