Be Mine-Akalynn

Yo soy...

Han pasado 3 años desde la última vez que la vi, la he buscado en todas partes e incluso he ido a los festivales de su antiguo clan con la esperanza de volverla a ver, pero...es como si se hubiese esfumado en sus bombas de humo..."no brilla"... recuerdo que cuando la conocí apareció en mi muñeca un dragón verde que no se borraba por nada del mundo, no recuerdo haberme tatuado nada pero, ahora, hasta parece desvanecerse "¿Dónde estás cariño?" susurró a modo de súplica esperando que algún Dios lo escuchara, Evelynn se encontraba en el balcón de su cuarto sintiendo la brisa pasar por sus cabellos lilas, bajó su mirada a su muñeca a la par que observaba las calles nocturnas ser transitadas que al ser viernes estaban a rebosar de estudiantes y trabajadores que buscaban una pequeña salida a lo cotidiano, fijó su mirada entonces a una pequeña niña que parecía buscar algo o alguien, sin embargo, al no encontrarlo empezó a llorar, de pronto dos hombres se acercaron a esta queriendo llevarla por la fuerza, no sabía por qué una ira se apoderaba de ella haciendo que saliera de su habitación rápidamente para dirigirse fuera del edificio y encarar a ambos hombres.

-Me parece que encontraron algo que es mío- dijo empujando a los dos hombres tomando a la pequeña cargándola

-Pero, solo íbamos a llevarla a un lugar mejor preciosa, ¿por qué no nos acompañan ambas? -dijo uno de los hombres tomándola por el brazo, esta cansada hizo lo impensable sacó sus lazos y mirando fijamente con sus brillosas orbes doradas apuntando con sus filosas puntas a cada uno en el cuello para añadir

-Me parece que sus padres no les han dejado en claro lo que es un ¡No!, así que por su seguridad espero puedan comprender que debemos regresar a nuestra casa- dijo esto haciendo que la soltaran para posterior regresar con la niña en brazos al edificio hasta llegar al gran pent-house donde la bajaría y la sentaría en un sillón.

-¿Te encuentras bien, cariño?- la pequeña asintió y sonrió leve

-Mutas gacias ñodita

-No hay por qué preciosa ¿dónde están tus padres?

-Me peyí ábamos compando opa con tios taban bando con abu y me depade cuado vi a un tito- la demonio enternecida rió y preguntó

-¿Un tito?

-Si un tito ...mmm... -caminó a la ventana y grito señalando a la calle- ¡tito!- la mujer caminó a la ventana hincándose para ver a donde señalaba la pequeña riendo y sonriendo al darse cuenta que se refería a un "perrito"

-Vale preciosa, eso es un perrito, son muy bonitos, pero debemos buscar a tus padres ¿tienes o sabes algún número para comunicarme con tus padres, o llamo a la policía?- la niña asintió y sonrió mirando a la demonio a la par que sacaba una plaquita estilo militar que llevaba 3 números de teléfono y en letras mayúsculas el nombre Diva, la mujer miró esto y con desagrado puso sus ojos en blanco mientras pensaba "esa placa pareciera de mascota, ¿qué idiota haría eso?", estaba por marcar a uno de los números telefónicos cuando un grito se oyó detrás de ella

-¡Oh por Dios, Evelynn! ¿ahora robas niños?- dijo la líder corriendo hacia diva abrazándola con cierto nerviosismo, hasta que la niña sonrio y correspondió al abrazo riendo a la vez que gritaba

-Tía Ahdi- esto desconcertó a la mujer haciendo que esta alzara una de sus cejas

-¿Tía?, no sabía que tenías hermanos Ahri... de hecho para ser tanto tiempo que te conozco jamás mencionaste que tengas familia -dijo la sucubo caminando hacia la lider que trataba de buscar alguna excusa hasta que se oyó la puerta principal abrirse, no era mas que la bailarina quien llegaba de las compras y al percatarse de la presencia de la pequeña primero las miró desconcertada hasta que la pequeña y la ángel se reconocieron al instante haciendo que la bailarina entrara en pánico