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— Así que ... ¿Quieres dos días libres? ¿En serio? —Miró de forma burlona al rubio— Cuatro años trabajando sin descanso y de repente vienes a pedirme días de descanso... ¿Hay algo que quieras decir, Bakugou?
—No tengo nada que decirte, coneja. —Le mantuvo la mirada— ¿Me darás el maldito fin de semana o no?
—Solo si a cambio me dices porque el repentino interés en tus días libres. —Una sonrisa afilada surco por los labios femeninos— Me parece un trato justo.
—Con una mierda. —Chasqueo la lengua— Solo quiero dos putos días lejos de tus estupideces y de la bola de extras de esta agencia. —La coneja levanto una ceja de forma incrédula ante las palabras del explosivo— Carajo, me largo.
—Mañana regresa "Red Riot" y más te vale estar aquí para recibirlo. —No quito la mueca de su rostro— Termina los reportes semanales de los practicantes para enviarlos a la academia y después haz patrullaje junto al chico, yo me encargo de Uravity. —Apoyo su espalda contra el respaldo de su silla— Cuando termines te largas y nos vemos hasta el Lunes con todos los detalles.
— ¿Te encargaras de la mocosa?
— ¿Te importa? —Fingió mirarse las uñas con desinterés— He leído tus reportes y parece ser un buen elemento. Quiero comprobar con mis propios ojos que es tan buena como dices y no estas dejándote llevar solo por tratarse de una fanática tuya.
— ¡No me jodas, Mirko! —Gritó llamando la atención de todos los que caminaban fuera de la oficina de la heroína— ¡Se hacer mi maldito trabajo, carajo! ¡No tienes ninguna puta queja de mí!
—Solo quiero confirmar tus palabras, Bakugou. —Tomó entre sus manos algunos papeles que había sobre su escritorio— Ahora lárgate a trabajar, anda. —Escondió su rostro detrás de los papeles— Hoy los practicantes no vienen así que puedes tener tu ronda tranquilo. Ya, vete. Largo, largo.
Con el ceño fruncido de siempre el rubio salió de aquella oficina para dirigirse a la propia y terminar con los papeles que la mujer le había pedido. En su camino se atravesó con varios héroes novatos de la agencia a los que simplemente ignoro mientras estos se hacían a un lado para no importunar al de ojos carmín. Todos conocían el humor del héroe número uno asi que era mejor dejarlo tranquilo.
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—Vamos Ochako, cuéntame algo.
—No hay nada que contar, en lo prometo Mina. —Mantuvo su atención sobre el cuaderno frente a ella— Kirishima y yo trabajamos junto a Dynamight en el patrullaje y de vez en cuando entrenamos en la agencia... ¿Tienes la respuesta de la pregunta diez?
