Capítulo 10: Vete

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"¿Cómo está tu enfermedad ahora? ¿Te sientes mejor?" Wu Cheng miró con preocupación a la persona que tenía delante, ¿cómo había llegado a ese estado?

Liao Yichen sonrió acaloradamente, "Ya estoy bien senior, el doctor dijo que en dos días más puedo ir a casa a recuperarme".

"Eso es bueno". Al escuchar la noticia de que Liao Yichen estaba bien, Wu Cheng dio un suspiro de alivio, "Por cierto, esto es para ti".

Levantó la bolsa que tenía en la mano: "Son tus gachas de piel y huevo favorito, recuerdo que te gustaba el que hice antes". Al mencionar una de sus comidas favoritas, los ojos de Liao Yichen se iluminaron. Entonces se dio cuenta de que el senior también estaba sosteniendo un aislante térmico no tan pequeño en su mano... recordó que se la regaló en ese momento. Cuando el senior se lesionó jugando al baloncesto, Liao Yichen se lo dio. No esperaba que, después de todo este tiempo, siguiera usándolo.

Tomó el aislante térmico, dio las gracias, y lo probó. Realmente seguía sabiendo igual.

"¡Delicioso!" Después de días bebiendo gachas de arroz blanco, no podía seguir bebiendo.

"Bebe despacio, no te atragantes". Wu Cheng se sentó junto a la cama de Liao Yichen y se limitó a observar en silencio cómo bebía.

En poco tiempo, las gachas fueron comidas. Wu Cheng agarró el aislante térmico y de repente dudó un poco, pero aún apretando los dientes, preguntó lentamente: "¿Dónde está él?"

Liao Yichen todavía tenía comida en su boca, sus dedos no pudieron evitar apretarse, "Todavía está trabajando". La sonrisa que apenas se arrancó en ese momento picó en los ojos de Wu Cheng. En los ojos de Wu Cheng, esa sonrisa era tan punzante. Conteniendo el dolor, siguió preguntando: "¿Te está tratando bien?". Tuvo que confirmar personalmente con Liao Yichen si estaba bien antes de poder desprenderlo de su corazón, así puede obligarse a soltarlo lentamente.

"Bueno, me está tratando bien". Mirando los ojos sinceros de Wu Cheng, Liao Yichen decidió no decirle la verdad. Con el carácter de Senior, si supiera que no estaba bien, definitivamente se preocuparía. No quería que Senior se preocupara más por él.

Después de frotar suavemente el esponjoso pelo de Liao Yichen, Wu Cheng no tenía intención de quedarse aquí más tiempo, y estaba a punto de levantarse y abrir la boca cuando se abrió la puerta.

Tan pronto como Chu Xuan llegó, vio a las dos personas en la habitación con sentimientos afectuosos. La puerta se abrió casi bruscamente, y cuando los ojos de Liao Yichen vieron a Chu Xuan, se llenaron de sorpresa.

¡Era Chu Xuan! ¡Chu Xuan había venido a verlo! Justo cuando iba a abrir la boca, no esperaba que el hombre abriera la boca antes que él: "¿Qué? ¿Interrumpo a los dos?" Las palabras frías salieron de la boca de Chu Xuan, y la expresión de Liao Yichen se congeló al instante.

Estaba ocupado explicando: "¡No, Chu Xuan! ¡Senior y yo... no tenemos ese tipo de relación!" Sólo que Chu Xuan no le dio la oportunidad de defenderse.

¿"Senior"? ¿Lo llamas bastante íntimo?" La visión de Chu Xuan hizo que Liao Yichen se asustara un poco.

De lado, Wu Cheng frunció ligeramente el ceño y se sintió mal en su corazón, pero aún así le explicó a Liao Yichen: "Así es como solía llamarme".

"¡No te he preguntado! Además, si no recuerdo mal, hace dos años ya te advertí que no volvieras a buscar a Liao Yichen, ¿no tienes mucha memoria?" La cara de Chu Xuan tenía una expresión fría e inquebrantable.

Pensando en lo que pasó hace dos años, el cuerpo de Wu Cheng no pudo evitar temblar, esa noche, definitivamente no quería volver a pasar por ella.

Y aparte, Liao Yichen no se atrevió a decir una palabra. Aunque la cara de Chu Xuan no tenía ninguna expresión, Liao Yichen comprendió que ahora estaba bastante enfadado.

Incapaz de soportar los ojos de Chu Xuan que querían matarlo, Wu Cheng habló y dijo: "Yichen, hoy volveré primero. Tú descansa bien y presta atención a tu cuerpo". Justo cuando estaba a punto de irse, fue detenido por Chu Xuan. Su fría voz sonó: "¿Te he dicho que te vayas?"

"¿Sr. Chu esto es?" El corazón de Wu Cheng palpitó mientras se obligaba a encontrarse con la mirada de Chu Xuan. El aura poderosa hacía que una fina gota de sudor brotara en su espalda, pero frente a Liao Yichen, no quería ser un cobarde.

"No he llegado a un acuerdo contigo sobre la seducción de mi esposo". Justo cuando terminó de hablar, el secretario entró. Chu Xuan hizo un guiño, y mientras Wu Cheng seguía confundido, el secretario rápidamente agarró a Wu Cheng y lo presionó directamente contra el suelo. Antes de que Wu Cheng pudiera reaccionar, la sensación de ingravidez golpeó todo su cuerpo, y al mismo tiempo, sólo se escuchó un "crac", seguido del grito de Wu Cheng. Su dedo estaba roto.

"Esto es sólo el principio. Ya te lo he advertido antes. Ya que no te acuerdas, vamos a hacerte pagar el precio".

"¡Suéltame! Voy a llamar a alguien". Grandes gotas de sudor surgieron de la frente de Wu Cheng. Sus venas se ondularon y su aspecto soleado y alegre desapareció instantáneamente sin dejar rastro.

Liao Yichen, al lado, estaba demasiado asustado para moverse. Era la primera vez que veía a un Chu Xuan así, este no era el Chu Xuan con el que estaba familiarizado.

El hombre sonrió fríamente: "¡Huh, grita, ya veré quién se atreve a salvarte en este hospital!" Chu Xuan estaba a punto de acercarse cuando fue abrazado por un cuerpo suave.

Era esa basura la que abrazaba su cintura: "Por favor, por favor, no le hagas esto, ¡sólo déjalo ir!" En este momento, los ojos de Liao Yichen estaban rojos, miraba a Chu Xuan con miedo. Pero más que su propio miedo, no quería que Chu Xuan fuera así, ni quería que le pasara nada al senior.

"Sólo tengo una amistad con el Senior, por favor, déjalo ir, ¿de acuerdo?" Al ver la mirada impasible de Chu Xuan, Liao Yichen lo abrazó más fuerte. Realmente temía que Chu Xuan le hiciera algo a Senior de lo que se arrepentiría por el resto de su vida.

Si algo le pasara a Senior hoy, no tendría la cara para verlo en su vida.

Chu Xuan gruñó fríamente, pero la ira en su corazón ardía cada vez más. Originalmente estaba feliz hoy y quería pasar a ver a Liao Yichen en su camino de regreso. Quien sabía que esta basura estaba incluso con otro hombre a sus espaldas. No lo permitiría. Incluso si quisiera divorciarse de Liao Yichen, no permitiría que a Liao Yichen le gustara otra persona.

N. del T: un poquito egoísta... bueno, un poquito mucho

En cuanto pensó en que ese tal Wu Cheng era tan importante en el corazón de ese gamberro, se enfadó aún más. Iba a decirle hoy a Liao Yichen cuáles serían las consecuencias de traicionarle.

Ignorando la súplica de Liao Yichen, sus finos labios se movieron ligeramente: "Continúa". Sólo quería que Liao Yichen supiera cuáles serían las consecuencias de ofenderlo.

Sólo se escuchó un gruñido apagado de Wu Cheng, pero no se inclinó ante Chu Xuan, sólo lo soportó, por el bien de Liao Yichen. Valía la pena.

A un lado, Liao Yichen estaba como agotado en este momento. Mirando la cara de dolor de su superior aturdido, el arrepentimiento seguía brotando de su corazón, "¡Por favor! ¡Chu Xuan! Nunca lo volveré a ver". Casi como si hubiera agotado sus fuerzas, Liao Yichen gritó estas palabras, pero a los ojos de los espectadores, era sólo un grito sin aliento.

N. del T: siento lástima por Liao Yichen

Al oír esto, Chu Xuan agitó la mano para indicar a su ayudante que se detuviera. En este momento, Wu Cheng estaba jadeando, pero su corazón dolía mucho, ¿hablaba en serio Liao Yichen? Comparado con perderlo, este tipo de cosas no son nada.

Inesperadamente, Chu Xuan volvió a hablar: "Entonces dile a tu amigo rápidamente que ya no lo necesitas". Todavía con el mismo tono sin ondulaciones, Liao Yichen miró a Chu Xuan, cuyas pupilas eran como un remolino que lo arrastraba, sin permitirle luchar.

Liao Yichen se esforzó por levantarse lentamente, caminó hacia el arrodillado Wu Cheng frente al suelo, sus ojos ya no sólo seguían hablando con él, sino que lo miraban de forma hueca.

"Yichen... no". Casi al mismo tiempo, Liao Yichen también abrió la boca y dijo en tono frío: "Wu Cheng, no nos volvamos a ver, vete".

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