Capítulo 8: " Relâcher"

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Norton Campbell

No sé que pasa últimamente, pero....me siento mal, no sé si fue algo que comí o un ejercico que hice mal, pero no quiero dejar mis ejercicios, ya estoy muy acostumbrado y no quiero dejarlo, y menos mal Luchino se fue temprano a trabajar, en la mañana estaba perfectamente bien, pero cuando terminé mi práctrica de bala, empecé a sentirme mal, me duele todo el cuerpo y me siento débil, odio esta sensación, pensé que en el laboratorio de mi alfa habría algo de medicina, la vez pasada que entré ví el botiquín, además..él se pone sobreprotector cuando me enfermo o me siento mal, aspi que mejor busco algo antes de que vea que estoy así.

Entré en el laboratorio, debe haber algo aquí, es un labotorio después de todo, estoy seguro...empecé a buscar en los cajones, nada, en los armarios...tampoco, ¿qué rayos hace este hombre con el botoquín, pasé un buen tiempo, pero no lo logré...no está, yo juré que lo ví, no lo entiendo.

Luchino: ¿Cielo?, ven aquí- rayos, debo ir, debo finjir, es la única opción que me queda, no puedo hacer nada más- ¿cómo te fue?

Norton: Bien...todo normal- me duele mucho el cuerpo, ahora me cuesta estar de pie, pero debo aguantar....

Luchino: ¿A caso te duele algo?- ahora si me sorprendí, ¿cómo lo supo?- amor, dímelo, tu aroma te delata.

Norton: Me siento mal- las piernas no me respondieron y caí al piso, o bueno eso hubiera pasado si Luchino no me hubiera salvado- me duele el cuerpo, pero esta mañana no estaba así, no se qué pasó- empecé a llorar, yo jamás me enfermé, y digo la verdad, siempre fuí cuidadoso con mi salud y mis rutinas, pero veo que las cosas cambian, me llevó a la habitación y me acostó en la cama, menos mal ya tenía la pijama puesta.

Luchino: Al menos no tienes fiebre, eso me alivia un poco pero no me explico lo del dolor corporal, ¿hiciste bien tu ejercicio?- asentí con la cabeza- entonces no es dolor muscular....en tus ejercicios salías cuanod hacía mucho frío o algo así?- empecé a recordar...

Norton: Ahora que recuerdo...entre esta semana y la semana antepasada, empecé a salir muy temprano, hacía mucho frío pero no le tomé importancia ya que con el tiempo dejaba de darme frío, pero...no pensé que esto me fuera a pasar.

Luchino: Te congestionaste- lo miré raro- ¿no te enfermaste de niño?- negué con la cabeza- vaya, aunque se nota que te cuidas, lo que pasa es que con el frío, te puede dar gripe...o en otras palabras, unfluenza- ay noooo- ay si, tienes un resfriado, me imagino que en cuestión de tiempo te darán ganas de estornudar y tos- de la nada pasó- pero no tan pronto, te haré té caliente con limón, descanza- besó mi frente y se aseguró de que las cobijas me taparan bien, de verdad agradesco que se preocupe por mí, aunque a veces se pone un poco insoportable, pero sé que lo hace porque solo quiere que esté bien.

Luchino

Desde esa noche he estado cuidándolo, trabajo mediodía para asegurarme de que está bien, cuando lelgué a casa escuché golpe, silenio, otra vez golpe....es extraño, Norton debería estar en cama reposando, no .......no está en el patio, ¿entonces?, otra vez esa secuencia, seguí esos golpes hasta la biblioteca, abrí y empecé a buscarlo, apartó todos los escritorios y...al parecer está entrenando con pelotas de tenis.

Luchino: ¿Qué haces?, deberías estar reposando- me lanzó la pelota y me cayó en la cabeza.

Norton: Perdón, perdón, perdón, no calculé, cuando me llamaste pensé en voltear a verte y a la vez lanzar la pelota- me acarició la frente y me verificó- al parecer no te hice nada, lo lamento, de verdad no fue con intención.

Luchino: Descuida, sé que no fue con intensión, estabas concentrado y yo te despisté- toció fuerte y fue a tomar su té- ¿si te lo estás tomando?- asintió con la cabeza- me alegra, tu aroma está más fuerte, me alegra que te estés recuperando, pero al menos deja de entrenar- me miró mal- sé que estás haciendo todo lo posible, y sé que tienes nervios por la prueba- miró hacia abajo, sé que está nervioso,de verdad desea participar en los juegos olímpicos, de verdad lo desea- ven- lo abracé y le acaricié la cabeza- pero por favor descanza, si sigues enfermo no vas a ir- me miró...

Norton: Esta bien- guardó todo y le ayudé a acomodar las cosas, fuímos a la habitación y pedí que me ayudara a comodar unos papeles, de vez en cuando veía como los leía, se supone que es información confidencial, pero a él le dejo leer mis asuntos del trabajo, no le veo problema- ¿qué es todo esto?, leo pero...no logro entender mucho- de verdad eres adorable.

Luchino: Reportes de contabilidad, un día de estos te voy a explicar, tal vez no entiendas mucho, pero al menos sabrás unas cosas.

Norton: Esta bien- siguió leyendo mientras acomodaba, al final logré terminar lo que normalmene me tardo un día entero en hacer, ¿cómo lo hace?, eso es algo que debo descubrir, pero no en estos momentos. De un momento a otro ví que empezó a temblar..

Luchino: ¿Tienes frío?- asintió y se abrazaba para tener algo de calor, fuí por una cobija térmica y lo arropé, toqué su frente y me empecé a preocupar- iré por el termómetro- lo encontré y rápidamente le tomé la temperatura- descuida no está tan grave- acaricié y besé su cabeza- te haré más té.

Norton: Gracias- después de hacer más, le dpi un vaso irviendo, y se tomó la mitad a esa temperatura- ¿qué pasa?

Luchino: Está irviendo- me miró raro- esperaba a que solplaras o esperaras a que se enfriará nun poco....- lo hice reír, cada día me das sorpresas, y aún espero más.

 Hasta el próximo capítulo....



Mon OmegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora