La Purga - KookTae

07

La alarma del auto sonó levemente en su cabeza; su visión está muy borrosa, apenas y podía reconocer a Taehyung que estaba a su lado, con un rastro de sangre saliendo por su labio.
Quiso llamarlo, pero realmente no pudo, su boca no podía emitir ningún sonido, su cabeza daba vueltas y no entendía que está pasando, incluso sintió estar de lado, sobre alguien. Una luz se hizo presente, habían abierto la camioneta. Eran depuradores.
–Lo ves por algún lado?—grito alguien.
-Si, está inconsciente al igual que todos los demás— otra voz que se escuchó lejana, borrosa mente vio cómo se adentra un poco en la camioneta, y jalaba a Taehyung, alejándolo de su lado—. ¿Qué hacemos con los demás?¿los llevamos igual?
-No, déjalos—la otra voz se acercó, Jungkook pestañeo, tratando de recuperar el conocimiento y control de sí mismo.— El señor Lee no nos pagará nada por ellos, además, hay niños. Yo no mato niños.
-Si tu lo dices—volvieron a cerrar la comioneta.
Jungkook no aguanto más y volvió a cerrar los ojos cayendo inconsciente.

-Yoon Gi!
El muchacho volteo al escuchar el grito que si desesperado del pelinegro, su equipo y el se estaban armando porque hoy atacarían una de las fiestas que las personas de la "alta sociedad" realizaban, en donde secuestraban personas a su antojo y hacían con ellas lo que quisieran sólo porque podían.
-¿Qué ocurre Jungkook...— pero no termino de preguntar, porque la cara de preocupación y el llanto del menor lo alarmó. Parecía desesperado, como si un pedazo de su alma hubiese sido arrancada—. Jungkook?
–E-llos...e-llos tienen a...Taehyung—sollozó—. Lo van a matar, Yoon Gi lo van a matar, ¡van a matar a Taehyung si no vamos por el!
-Jungkook cálmate— el mayor tomo de los hombros al chico, a lo cual este asintió aún hiperventilando—. Sé que se lo llevaron, mis hombres y yo iremos al lugar en donde iniciarán las casería, porque nuestro objetivo es salvarlo. A él y a la mayoría de personas que se pueda.
-Quiero ir contigo.
-No. Lo siento, sé que Taehyung te importa pero no voy a dejar que vayas, el destino de muchas personas están en juego—dijo Yoon Gi—. Alisten sus armas, salimos en cinco minutos-
-Por favor— El pelinegro fue ahora quien tomó los hombros del pelimenta, tomándolo desprevenido— Confío en ti pero necesito ser yo quien lo rescate, te lo suplico Yoon Gi. Si fuera SeokJin tú irías aunque no supieras que hacer, sólo déjame ir por favor...por favor.
El más bajo se sintió acorralado, miró a su prometido que ahora se encargaba de atender algunos heridos, sus miradas cruzaron fugazmente. Jungkook tenía razón, si él no fuera el líder de la rebelión y SeokJin o Jimin estuvieran apunto de ser sacrificados sin duda alguna iría a su rescate, aunque no supiera que hacer. Suspiro, resignado asintió.
-Tienes que entender una cosa Jeon Jungkook— habló con semblante serio-. Si te disparan o nos retrasas, con todo el dolor de mi ser, te dejare atrás, ¿quedó claro?— el pelinegro asintió, con una débil sonrisa—. Ahora, ve con mis hombres, ellos te explicarán que haremos y como actuaremos, salimos en cinco minutos.