Papi «JIKOOK»⑴ ┇ Adap

➭『Capítulo: 51』

JungKook despertó y tallando sus ojos hizo puchero, había tenido un sueño donde JiMin regresaba y todo estaba bien entre ellos dos. Suspiró pesado para levantarse de la cama y entrar a la ducha. Sus ánimos estaban por lo bajo, de ser cierto lo de su sueño JiMin estuviera en la cama con él ¿Y qué fue lo que encontró? Nada, él no estaba ahí.

Bajó las escaleras triste, encaminándose a la cocina. Al entrar se quedó paralizado al mirarlo de espaldas mientras este trataba de cocinar algo. Sonrió grande, no había sido un sueño.

JiMin se dio la vuelta mirándolo con una sonrisa, JungKook corrió a sus brazos. JiMin se sorprendió pero lo abrazó de igual forma. El mayor besó su frente con cariño.

─Pensé que solo había sido un sueño ─ dijo bajito aferrándose al pecho del mayor.

─Creo que no lo soy, de serlo apuesto a que soy el mejor sueño que has tenido ─dijo divertido. JungKook se rio un poco.

─Lo eres ─contestó sonrojado.

JiMin lo envolvió en sus brazos, besando sus labios con ternura. JungKook sonrió en el beso entrelazando sus manos en el cuello del mayor.

─Toma lugar, el desayuno está listo.

JungKook asintió, dando saltitos llegó hasta la mesa donde ya se encontraban preparados los platos y cubiertos. Se acomodó en su lugar relamiendo sus labios. La comida de JiMin olía muy bien.

─Te preguntarás... ¿Cómo es que sabes cocinar si la última vez lo tuvo que hacer Tae? ─ fingió una voz chillona, haciendo reír al menor ─. Simple, aprendí rápido, en el internado nos daban clases de lo que nosotros queríamos para no aburrirnos y bueno, que tiemble YoonGi, ocuparé su lugar ahora, dile que no se sorprenda cuando abra mi propio restaurante.

JungKook se rio fuerte mirando a JiMin servir su desayuno en su plato. El mayor lo miró divertido, dejando la sartén en su lugar para luego sentarse.

─Se lo diré, espero que cuando lo cumplas le des trabajo ─le siguió el juego. JiMin negó sonriente.

─No lo haré, no está a mi nivel.

JungKook se volvió a reír mientras tomaba sus cubiertos. Pero alto, había olvidado algo muy importante ¿Dónde estaba SunHee?

─¿Dónde está mi bebé?

─Estoy enfrente de ti ─dijo con obviedad y diversión en su voz.

─No tú, tonto, SunHee, mi bebé SunHee ─ JiMin rodó los ojos haciendo a JungKook reír cada vez más.

─Se fue con Jin y Tae, ellos la llevaron a la escuela y a la salida irán por ella porque dijeron algo que no les presté atención, solo recuerdo que dijeron que la traerían mañana después de la escuela ─anunció. JungKook asintió más relajado.

─Es cierto, SunHee se iba a quedar con ellos dos, Tae me dijo que quiere acostumbrar a Jinie a estar con niños, extraño, no se la razón ─entre cerro sus ojitos. JiMin guardó silencio culpable.

Él había sido el de la idea de aconsejarle al menor que si quería un futuro con SeokJin que lo dejara de soñar y lo cumpliera.

─Eh, sí... Tae es extraño ─dijo con una sonrisa de culpa.

JungKook se rio, ya sabía que JiMin era el responsable de eso. Pronto comenzó a comer maravillándose con el sabor de la comida, JiMin parecía haber mejorado desde la última vez, aunque la verdad es que nunca probó algo hecho por las manos de JiMin pero no podía ser tan malo ¿No?

Cuando terminaron dejaron los platos en el lavabo, JungKook los lavó mientras JiMin subía por su celular y sus zapatos. Cuando bajó JungKook ya lo esperaba. JiMin caminó hasta él dejando un beso en sus labios para entrelazar sus manos y salir de casa.

─Espera, olvidé las llaves de mi auto ─dijo el menor.

─Iremos en el mío ─ JungKook alzó sus cejas mirándolo sorprendido.

─¿En el tuyo? ¡Wow, Miniie!

─Papá me lo dio ayer en la mañana.

JungKook sonrió, pronto se encaminaron al auto de JiMin. JungKook lo admiró, era un lindo auto. El mayor corrió hasta él y le abrió la puerta, JungKook se sonrojó pero entró sin dejar de sonreír.

Cuando JiMin entró, lo miró para luego encender el auto y ponerse en marcha. Irían a casa de sus padres por sus maletas, luego irían al departamento de JiMin para dejar todo en su lugar.

Los padres de JiMin abrazaron a JungKook cuando lo miraron entrar de la mano de su hijo. También felicitaron al mayor porque había regresado por su familia. La señora Park se quedó con JungKook mientras JiMin y su padre bajaban sus maletas para llevarlas al auto.

Los dos señores se despidieron de su hijo y novio para luego verlos partir. Estaban tan felices por su hijo, al fin había encontrado a su familia donde pertenecía.

Llegaron a casa, JiMin suspiró antes de meter sus llaves a la cerradura.

No quería mirar la casa por dentro, tenía malos recuerdos, también buenos pero no quería recordar cosas malas en ese momento. JungKook notó que JiMin se había tensando y que estaba dudando en abrir o quedarse así por mucho más tiempo. Suspiró, caminando hasta él para abrazarlo de su espalda. JiMin lo miró sonriendo un poco.

─Está bien Miniie, ya pasó ─le sonrió.

JiMin asintió, pronto giró la llave en la cerradura. Esta se abrió, después de un suspiro del mayor entraron. La casa se veía limpia, al parecer los chicos seguían yendo a casa y no solo eso, la mantenían limpia y ordenada. Caminaron hasta su habitación, JungKook se ofreció a ayudarlo a ordenar su ropa y JiMin aceptó. Cuando terminaron se dejaron caer en la cama, estaban un poco cansados.

JungKook gateó en esta hasta quedar en los brazos de JiMin, el mayor le sonrió abrazando su esbelto cuerpo mientras besaba su frente. JungKook se dirigió a sus labios ¿Por qué limitarse a besos en su frente cuando podía besar sus labios? JiMin sonrió al encontrarse con el menor besando su rostro y luego sus labios.

Había extrañado esa calidez, esa sensación que solo JungKook le transmitía. JungKook lo hacía sentir tranquilo y en paz, también lo volvía loco, algunos toques suyos lo hacían perder la cabeza, ¿Cómo era posible que una persona lograra calentarlo y trasmitirle ternura a la vez? Sí, JiMin mentiría si dijera que no sentía atracción sexual por el menor.

JungKook era hermoso, su cuerpo era perfecto, ya lo había visto con sus propios ojos y vaya que era hermoso.

El beso dejó de ser algo tierno, tornándose un poco brusco. JiMin le pidió permiso para entrar a su boca, JungKook accedió entrelazando sus lenguas en una cálida batalla. Las manos de JungKook recorrieron de su cuello hasta su pecho bajando un poco más y concentrarse en el cinturón del pantalón de JiMin.

Lo querían, los dos lo necesitaban. JiMin se separó de sus labios para cambiar la posición dejando a JungKook abajo y él arriba cuidando de no aplastarlo. Sus manos se colaron debajo de su camisa acariciando su piel desnuda. La piel de JungKook vibró ante el toque.

Eso estaba a punto de pasar, no había marcha atrás, los dos se necesitaban.

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Actualización.
Hoy si darle Finalización.
(*˘︶˘*).
Se nos viene el Smuts.