❝Replaced❞│Sʜᴀᴅᴏɴɪᴄ│AU

◈6◈ ⚅Vindicta⚅

Sus ojos verdes se abrieron perturbados, extrañamente, el silencio de la habitación no colaboraba en reducir su ansiedad y pavor; se incorporó en una cama vieja y gastada, teniendo a su lado apenas un buró en pésimas condiciones, se examinó el cuerpo y notó vendas limpias y preparadas, queriendo indicar de que alguien con experiencia las trató. Recorrió la "habitación" en busca de más personas, pero solo había un montón de cajas y suministros médicos, probablemente ni era una pieza sino un almacén; se levantó de la cama y comprobó si podía pararse, al ver que no se caería decidió irse a explorar y buscar a sus amigos... Se detuvo en seco, ¿amigos? Knuckles ya no estaba, ni siquiera sabía si Silver seguía vivo, Shadow y Scourge aparecieron de la nada, a uno lo odiaba por ser el causante de todo esto, al otro no se decidía si seguir gustándole en secreto o también mandarlo por un caño.

Realmente parecía una mazmorra más que un refugio, por donde pasaba la basura y suciedad brillaban y hacían del camino algo tedioso, aún así, decidió no comentar nada porque no era tiempo de protestar por un sitio higiénico y decente, ya hasta parecían ratas escondiéndose; era extraño, llevaba buen rato caminando por los pasillos e inspeccionando cada cuarto, en uno habían reservas de cobijo, en otras armas, en algunas dispositivos electrónicos y técnicos, menos gente, el pasadizo terminaba en una serie de gradas que sin problema subió, el verdadero problema era que seguía sin escuchar nada, y esto le preocupaba... ¿Qué tal si él ya los había encontrado, si solo estaba esperando a que subiera para terminar matándolo también? Instintivamente buscó su daga, alterándose brevemente porque no estuviera en sus bolsillos, sino pegada a una de sus costillas, literalmente; tomó del mango y, por sorpresa, se desprendió de su carne sin dejar ninguna sola herida, como si se hubiera quitado una bandita nada más.

Se detuvo finalmente ante una puerta entreabierta, por el resquicio se filtraba una débil y tenue luz amarillenta, como de un foco viejo a punto de expirar; movió muy despacio y se asomó, dejando escapar el aire de sus gastados pulmones al encontrarse con figuras conocidas; Amy y Scourge hablaban con un aparente doctor, Shadow y Rouge de espaldas, y Silver estaba sentado en el fondo con la vista perdida, hasta que sus orbes dorados se toparon de casualidad con los suyos, abandonando rápidamente su sitio para correr y abrazarlo, sus labios se movieron repetidas veces, mas ninguna palabra pudo ser escuchada.

-Me tenías preocupado... Justo íbamos a verte de nuevo, ya han pasado dos semanas y tú... -Silver se calló por el silencio de su amigo, alejándose un poco de sus brazos y verlo, Sonic realmente estaba ahí, pero no parecía entenderlo, más bien, ni parecía escucharlo-, oye... ¿e-está todo bien?