Un corazón roto duele, pero romper el corazón del amor de tu vida y el tuyo al mismo tiempo, no tiene comparación
"Seremos felices y viviremos bien"
"...a-ayuda..."
"Perdóname porfavor"
"Me quedaré"
-Los lamentos no sirven, no decepcionas a nadie má...
ㅡNada ni nadie va a impedir que te siga amando Sora, esperarás por mi no es ciertoㅡ eso no era una despedida solo era un hasta pronto.
ㅡEsperaré por ti incluso si nunca llegas Namjoonㅡ las lágrimas eran las unicas testigos que luego desaparecerían, de cuanto amor demostraba la joven pareja, sabían que no eran el uno para el otro pero querían amarse.
Un ataque inesperado de parte de antis de la dinastía Min había acabado casi con la mitad de Seúl en menos de dos semanas, Namjoon coronel al mando de tropas había regresado hace un par de días con un informe para el rey Yoonsuk, y ahora, antes de partir de nuevo hacia el campo de batalla había decidido despedirse de su amada Sora, quien estaba en su octavo mes de espera de su cachorro, no quería despedirse pero era mejor hacerlo, nadie sabía que es lo que podría suceder.
Un amor no destinado, un alfa con una omega que la madre luna no había elegido para que se complementasen.
Kim Namjoon alfa coronel, mano derecha y mejor amigo del rey y Park Sora omega, una de las esclavas que trabajaba en el castillo. Sin duda alguna si esos jovenes amantes llegaban a ser descubiertos perderían todo y en el peor de los casos perderían su propia vida.
Namjoon solo visitaba a Sora en las noches, cuando nadie los veía y Sora hace mucho que empezo a trabajar solo en los establos para ocultar su embarazo, que con el tiempo cada vez era mas evidente.
ㅡAdiós Soraㅡ ninguno negaba sus lágrimas por mas que quisiese ㅡHasta pronto Namjoonㅡ y quizá por última vez ambos se fundieron en un profundo abrazo, mezclando sus aromas por unos segundos, escencia de vainilla y cereza y petricor de café y chocolate amargo.
Justo caída la medianoche en la que su despedida se convirtio en su unica promesa, Namjoon partió de regreso hacia las afueras de Seúl donde aún se libraba una trágica batalla, donde no existía piedad de parte de nadie.
Sora solo se había quedado en aquel establo donde había pasado ocultandose la mayor parte del tiempo los ultimos meses, al ser esclava a nadie le importaba si vivía o moría, solo una de sus compañeras de trabajo Jihyo, se preocupaba por Sora ya que al estar en espera era mas complicado hacer todo.
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3 sᴇᴍᴀɴᴀs ᴅᴇsᴘᴜᴇ́s
Parecía que el tiempo había volado cuando en realidad no pasó mucho.
Por fin hubo tregua entre los rebeldes y la dinastía, no de la mejor manera pero al final era evidente quien debía ganar.
El "adiós" de Namjoon fué en vano, regresó a casa, y el "hasta luego" de Sora se hizo presente una vez más la joven pareja se volvió a ver, pero esta vez, saludaban a alguien más.
Su pequeño cachorro había nacido, días antes de que Namjoon regresara, Sorá había dado a luz un cachorro varón, en medio de la noche y con dificultades pero su cachorro había nacido sano y salvo y ella también estaba en perfecto estado pero no había salido del establo por la seguridad del cachorro y por la de ella mismo.
