Capítulo 1: El inicio

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 Hola!, ¿Cómo están?, les quería contar que esta es mi primera historia publicada en Wattpad y por el mismo hecho no tengo tanta experiencia de como funciona la aplicación. Me gustaría saber su opinión del primer capítulo a través de los comentarios, además me gustaría conocer sus sugerencias. Si les gusto el primer cáp. ¿podrían votar? :) .... De esa forma conocería su opinión, gracias!!.

Disculpen si hay alguna incoherencia o algo mal escrito, esto es solo un BORRADOR!

Andreil.

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Son las 06:15 a.m. y estamos aterrizando en el aeropuerto de Hamburgo, Alemania. Nos hemos tardado más de lo esperado porque el clima no nos acompañaba y el aterrizaje ha sido bastante difícil, al parecer el día de hoy va a ser bastante caótico.

Al terminar el aterrizaje me dispongo a chequear que todo esté en orden y a llenar la plantilla predispuesta.

-Excelente aterrizaje mi comandante -dice mi copiloto y amigo, Dante.

-Gracias guapo -digo risueña.

Me quedo un tiempo dentro de la cabina mientras los demás desembarcan, me fascina la tranquilidad que puedo lograr encontrar aquí. Estas últimas semanas han sido sumamente agotadoras, no he parado de pilotar a todas partes del mundo, pero pese a lo cansador que es esto, lo sigo haciendo porque es lo que me gusta.

Después de un tiempo decidió desembarcar y me dirijo hacia el edificio del aeropuerto. El aeropuerto es sumamente moderno, además cuenta con un amplio campus en el que se emiten clases para futuros pilotos y azafatas. Lo mejor es que el aeropuerto no es estatal si no que pertenece a la misma empresa de mi aerolínea, VogelAir y por el mismo hecho podemos optar a ciertas comodidades dentro del mismo campus, como lo son las habitaciones del hotel que se encuentra al lado de la aerolínea.

Llevo trabajando para esta aerolínea desde hace 2 años, entre a mis cortos 18 años. La verdad cuando pequeña nunca se me pasó por mi cabeza la idea de ser piloto, siempre pensé en lo común, ser policía, bombero o doctora, pero después en mi adolescencia tenía mi decisión clara, quería ser piloto y conocer el mundo. Me adentro al edificio y me acercó al mesón, generalmente siempre después de un vuelo me quedo aquí a descansar y luego me voy hacia mi casa.

-Buenos días, señorita Becker. -me dice la recepcionista al entrar al hotel- Es un gusto tenerla en nuestras instalaciones nuevamente. Su habitación siempre está desocupada tenga, aquí tiene sus llaves.

-Buenos días para ti también Claudia y muchas gracias, que tengas un buen día -me despido y me dirijo hacia el ascensor.

Al igual que siempre, la habitación donde me alojo está impecable. Me fascina esta habitación porque tiene una vista que da hacia una hermosa laguna que se encuentra a un lado del hotel.

Me dirijo hacia mi equipaje y comienzo a buscar algún atuendo cómodo para ocupar después de tomar una ducha. La verdad es que en mi maleta cabe muy poca ropa y por ende siempre hecho solo solo que sea necesario. Un poco de ropa, ropa interior, pijama y artículos de aseo personal.

Ya son las 12:00 del día y me he pasado la mañana leyendo y hablando con familiares y amigos. Bianka, mi madre se encuentra en Cuba de vacaciones con mi padre Richard. Mis padres siempre dieron todo por mi en mi infancia, nunca tuvimos grandes lujos, pero ahora que puedo siempre trato de consentirlo lo más posible. Después de terminar de charlar con mi madre le marcó a Blume, mi mejor amiga, ella trabaja en Berlín como profesora.

Luego de un tiempo me dirijo hacia el ascensor para bajar al restaurante del hotel a almorzar. No he comido nada desde que hemos despegado de USA y la verdad es que me muero por un buen plato de comida. Al bajar del ascensor mi teléfono vibra y lo sacó de mi bolsillo para revisarlo, sin darme cuenta choco con alguien.

-Lo siento, disculpa iba distraído, no te vi. -dice el sujeto.

-No te preocupes igual fue culpa mía por no ir atenta, aparte fue sin intención, ¿no es así? -sonrió.

-Claro que sí -él también sonríe- oh, no me he presentado, me llamo Bernardo -dice extendiendo su mano.

-Kate -aprieto su mano.

-Bueno Kate.... y qué haces tú por acá?, quiero decir si se puede saber. ¿eres familiar de alguien de por aquí?

-No -respondo, con una pequeña sonrisa- Soy una de las comandantes de la aerolínea.

-No lo habría imaginado.

- ¿Por qué?,¿Por qué soy mujer? -preguntó con cierta curiosidad.

-No, simplemente te ves muy joven.

-Si, en realidad hace solo unos pocos meses comencé a ejercer como piloto, y me ascendieron con rapidez.

-Bernardo -se escucha una voz femenina a lo lejos- te estamos esperando.

-Lo siento, mi prometida me necesita -se disculpa- bueno nuevamente te pido disculpas, ha sido un gusto.

-Igualmente.

Me despido de Bernardo y me dirijo hacia una mesa libre que se encuentra junto a los grandes ventanales. Luego de un corto tiempo se acerca el camarero hacia mi mesa y ordeno mi comida. Posteriormente vuelvo a subir a mi habitación, pasaré una noche aquí y mañana me iré a mi casa. Llega la noche y caigo rendida en la cama.

******

Hoy, el día está radiante, me baño y visto para comenzar a guardar mis cosas en la maleta. Bajo al lobby del hotel y le aviso al recepcionista que me retiro para que el pida que me traigan mi auto. En el lobby también está Bernardo con varias personas más. El me saluda con un asentimiento de cabeza y con una señal de su mano me indica que me acerque.

-Buenos días -digo, dirigiéndome hacia todos.

-Buenos días -me saluda Bernardo- ella es Kate, es una de las comandantes de la aerolínea, la conocí ayer por la tarde en el restaurant, no la vi y choque con ella -dice Bernardo presentándome con los demás- ellos son mis padres, Dakota y Klaus -el matrimonio asiente en forma de saludo- mi prometida Dalia -Dalia me sonríe y yo correspondo de la misma manera- y mi queridísimo hermano mayor Gerald -dice de forma burlesca.

-Un gusto señorita Kate....

-Kate Becker Müllen -respondo.

-Señorita Kate Becker Müllen -repite de forma lenta y con cierta gracia- ¿de dónde es oriunda?

- De Kassel, pero ahora vivo acá en Hamburgo -respondo simplemente.

-Señorita Becker, su auto ya está afuera -me avisa el recepcionista.

-Gracias -respondo- Un gusto -digo dirigiéndome a los familiares de Bernardo.

Salgo del edificio y me subo en mi Ferrari SF90. Las calles de Hamburgo el día de hoy están muy llenas y es agotador esperar en las interminables filas de vehículos. Por fin llego a mi edificio y esta tal cual como lo deje, solitario. En dos días más tengo que volver a viajar, esta vez mi destino es Rusia.

Estoy en la cocina preparando mi almuerzo cuando me entra un llamado proveniente del aeropuerto.

-Señorita Kate, le habla Susan, la llamaba para confirmar la charla con la nueva tripulación que tiene agendada para mañana a las 11:30 a.m.

-Hola Susan, si no hay problema hay estaré, me puedes confirmar por favor en qué sala será.

-De inmediato déjeme revisar...Mmm...sala número 7 en el segundo piso.

-Okey, muchas gracias, ah, y Susan, que tengas un excelente día.

-Muchas gracias, señorita -responde.

Terminé de preparar mi almuerzo y prendo mi computador para estudiar un poco italiano. Siempre me han llamado la atención los idiomas, el inglés, italiano, español y portugués en general, por el momento solo me estoy enfocando en el italiano.

Ya llegada la tarde me dirijo al centro de la ciudad a comprar un poco de comida, ya que con tanto viaje no puedo tener muchas cosas porque luego caducan y no se pueden comer.

EmpíreoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora