Me senté en mi banco y me quedé pensando en aquel chico, en aquel misterioso chico. Llegó Jason y me monté en el mercedes negro que él conducía. Todo el camino me quedé pensando en como podría acercarme a ese chico cuyo nombre no tengo ni idea. Antes de llegar a mi casa me bajé en el pequeño campo que hay en frente de esta.
-Hey Jason, déjame aquí. Puedes retirarte yo ya voy andando.
-Pe-pero señor tengo que hacer lo que me pide su madre.-tartamudeó el anciano.
-Por favor Jason, yo le explicaré a mi madre.
-Está bien señor, tenga cuidado sea lo que vayas a hacer.
-Ya sabes que puedes llamarme por mi nombre de pila.
-Lo siento, Michael.
Jason avanzó hacia mi casa y yo me quedé en el campo, buscando algo significativo para darle al chico de cabellera dorada. Y pensé en como no, un girasol. Arranqué algunos y me los guardé en la chaqueta dirigiéndome hacia mi casa.
-Hola Mamá. -dije besándole la mejilla.
-¿Hijo? ¿Por qué viniste solo y andando? ¿¡Qué te pasó en la cara?
-¿Qué tengo? -dije ignorando su primera pregunta.
-¡Te has quemado la cara! Ven aquí que te ponga protector solar. -dramatizó mi madre.
-Mamá, exagerada -rodé los ojos- tengo 19 años, ¿cuándo me superarás? Estoy cansado ya de que me trates así, ¡cómo si a mí me importara el dinero tanto cómo a ti! No me importa lo que vayan a pensar los demás de mi aspecto físico, ¿es qué no te das cuenta? ¡Te lo he dicho mil veces! Déjame vivir libremente alguna vez, ¡dios mío! -tiré la maleta que traía de las clases al aire y no me importó donde hubiera caído, como si rompía el jarrón más caro que pueda haber en esta casa. Subí a mi cuarto rápidamente y me tiré en la cama bruscamente dejando ver los girasoles que sobresalían de mi chaqueta. Los tiré furioso y cayeron al suelo, cogí mi móvil y le mandé un mensaje a Calum mi mejor amigo.
>Hey Cal, por casualidad ¿tienes alcohol en tu casa? De tu padre o algo, ya sabes, para reunirnos con los chicos y pasar un buen rato --20:53.
>Wow mike te encuentras bien? Las palabras alCOHOL y michael no concuerdan en si lol --20:55.
>Venga tío ¿tienes? Por una vez en mi vida que va a pasar, eso es lo que tú me decías medio año atrás. --20:59.
>Si pero... dejalo, claro que tengo y de todo --21:00.
>Pues a que esperas llévate las que puedas y vamos a "nuestro" lugar, el de siempre a las 21:30 ¿Te parece bien? --21:00
>Esta bien mike yo aviso a los demás --21:04
Leí el último mensaje que me dejó Calum y una sonrisa se me dibujó en la cara, esta noche me iba a divertir, mucho. Preparé la ducha y entré en esta dejando caer la cálida agua sobre mi cuerpo para después salir y vestirme con pantalones negros ajustados camisa de cuadros y vans negras. A diferencia de mis padres, yo vestía muy informal y ellos solo vestían ropa de marca, cosa que no me gustaba para nada. Peiné mi cabello rosa pastel como pude, cogí mi móvil y me dirigí hacia abajo.
-¿A dónde vas? -preguntó mi madre con un toque de preocupación.
-Voy a salir con Cal.
-Ya sabes que no me agrada ese chico hijo.
-Y ya sabes que no me importa, adiós, no me esperen llegaré tarde. -dije friamente y salí por la puerta cerrándola detrás de mí.
Llegué a aquel lugar el cual era un callejón escondido en un barrio grande y allí estaban algunos de los chicos incluido Calum. Saludé a John, Cole, Nathan y finalmente Calum.
-Trae eso para acá. -le arrebaté la botella de vodka que tenía en las manos y bebí un largo trago.
-Hey Michael cuidado, eso te quema toda la garganta, al menos a ti. -dijo Calum muy sobreprotector.
-Sí lo sé Calum y, ¿sabes qué? no me importa.
-¿Pero qué mosca te ha picado hermano? -dijo dando palmaditas en mi espalda y soltando carcajadas.
-Uhm, nada, ¿no puedo divertirme?
-Claro que sí.
Toda la noche se basó en seguir bebiendo y reirme sin parar, a veces con sentido y otras sin ninguno. Ya empezaba a ver todo con menos claridad menos en el instante que mis ojos se abrieron como dos órbitas y la botella se deslizó de mis manos cayéndose al suelo provocando un ruido espantoso.
-¡Te dije que no vinieras por aquí retrasado! -gritó un chico un poco musculoso con una bandana que le cubría toda la frente y le mantenía su larga cabellera.
-Lo-lo siento, no volverá a ocurrir, t-te lo prometo Ashton. -dijo aquel chico de cabellera dorada, ojos azules... sí, el mismo.
-No me vale eso, ¡en cualquier momento podrías volver aquí! -gritó aún más furioso el tal Ashton hasta que le pegó en toda su mejilla, fuerte, fuertísimo. -gilipollas.
Mi alma se esfumó en cuanto vi caer al chico al suelo, ahora no me importaba cuan ebrio estaba, él estaba sufriendo y alguien tendría que ayudarlo. Fui diractamente hacia él pero algo o alguien me interrumpió.
-Hey, ¿qué haces, estás loco? -dijo Nathan.
-Yo.. Yo al chico rubio lo conozco... bueno no, no pero lo he visto, yo sé lo.. lo que hago. -dije confundido pronunciando esas palabras. Me acerqué a el para mirarle bien el rostro y tenía varios rasguños más aparte del de la mejilla.
-T-tú... -murmuró el chico rubio.
-¿Lo conoces? ¿Ahora también me mientes? -dijo Ashton escupiendo cada palabra que salía de su boca, con furia. Le pegó otra vez, una patada en toda las costillas. El chico hizo una mueca de desagrado, a punto de romperse a sollozar ahí, en medio.
-¡DETENTE! -grité lo más fuerte que pude- ¡Le estás haciendo daño!
-No es de tu incumbencia. Luke, vámonos. -El chico... Luke se levantó como pudo y al pasar por mi lado me susurró.
-Gracias por el intento.
-¿Pe-pero, qué haces? ¿Por qué te vas con él? ¿Mmm Luke? ¡Él te hace daño! -dije frustrado. Luke y Ashton ya estaban lo bastante alejados pero pude descifrar lo que gesticuló Luke con sus labios intentando decirme algo, a pesar de lo ebrio que estaba supe que dijo un triste lo siento.
Hey, la primera nota de autorasss ssss. Somos 2 personas (chicas) las que escribimos esta fanfic y bueno este capitulo lo escribió Ana (yo) y lo escribí escuchando a shawn, mi bebé shawn aaaaaaaaa. Voten y comenten plsssss chau
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sunflower | muke
FanfictionSoy Luke y tengo 18 años, vivo de la pobreza. Soy Michael y tengo 19 años, vivo sobrado de dinero y no es todo lo que me importa.