sunflower | muke

six

Michael's POV

-¡Mamá ya estoy en casa! -dije cerrando la puerta detrás de mi y tirando la maleta de las clases por cualquier lado. -¿Mamá? ¡¿Hola?!

Al ver que no era respondido por nadie le mandé un mensaje a Calum:

>Calummmm, mi casa está vacía, que tal cerveza + chicas? —19:34.

>Wow mike que rebelde te volviste, las compro yo o.. tú? —19:36.

>Las compro yo, mientras cógete el metro o el coche de tu padre y avisa a la gente y Cal, buenas chicas eh no quiero defraudarme, nos vemos x —19:37.

> Descuida, nos vemos mike x —19:37.

Bloqueé mi móvil y lo guarde en el bolsillo trasero de mi pantalón. Cogí mi chaqueta vaquera y las llaves, salí de mi casa con una sonrisa radiante, buena noche iba a pasar. Mi madre debería estar en un viaje de trabajo y ni me debió avisar, porque bueno, es mi madre. Iba andando al almacén más cercano que había y me choqué con una papelera cayéndome al suelo. Imágenes me vinieron a la cabeza al ver a la gente pasar sin ofrecerme ayuda, imágenes en las que me doy cuenta de que soy un chico malcriado y no me gusta nada. La cara seria y llena de dolor de Luke tirado en el suelo es la que me viene a la cabeza en cuanto me caigo. Aparto eso de mi mente y me levanto para seguir mi camino hasta el almacén. Cuando llego empujo la vieja puerta y me adentro en aquel pequeño almacén. Unos ojos grises se ponen en mi nada más cerrar la puerta, pero los ignoro y me adentro un poco más por los pasillos hasta encontrar la cerveza. Aquel lugar está vacío y viejo pero no me importa. Una vez que encuentro la cerveza cojo 5 botellas y me las llevo dirigiéndome al mostrador. Coloco las botellas encima de aquel mostrador y el chico las va pasando por la caja.

-13,47 dolares. -dice el chico de ojos grises.

-Aquí tienes. -le entrego los billetes y me da el cambio.

-Gracias. -dice el chico entregándome la bolsa con las cervezas pero antes de devolverle una palabra veo una foto en la que aparece supuestamente el chico y.. Luke. Luke.

-¿De qué lo conoces? -pregunto con interés.

-Es un viejo amigo.

-¿Viejo? ¿Por qué viejo?

-No te importa. -escupe.

-Uh, okay, hasta luego.

-Espera chico, ¿lo conoces a él?

-Uhm, sí, se podría decir que sí.

-¿Está bien? ¿Lo ves muy dolido? ¿Herido?

-No te importa. -le repetí enviándole una sonrisa falsa. Realmente, si le hubiera respondido bien podría haber sabido más de Luke pero en cambio, me dí la vuelta y me fui de ese lugar. Mientras iba abandonando el almacén, el chico de ojos grises me gritaba que volviera, que ese chico fue muy importante en su vida y no sé que más. Ya me pondría a investigar más sobre Luke en otro momento, ahora me esperaban Cal y las chicas.

Cuando llegué al patio de mi casa, la música resonaba en mis oídos. Este chico se tiene que controlar y ¿cómo entró en mi casa?

Abrí la puerta y me encontré a Calum guiando a varias chicas por la casa, y más chicas esparcidas.

-¿¡Calum como carajos entraste a mi maldita casa? -grité por lo alto de la música.

-Llave. Macetero. Fácil de encontrar amigo. -dijo Calum riéndose a lo que yo reí también.

Me subí a la mesa del salón y alcé la bolsa de las cervezas gritando:

-¡Mirad lo que tengo aquí chicas!

Todas vinieron hacia mí y fui sacando las cervezas y sirviendo a algunas.

-Hey Mike. -me llamó una rubia cuyo nombre era Hayley creo recordar.

-Dime linda.

-¿Bailas?

-Claro. -la cogí de la cintura y la llevé mas adentro de la casa, empezando a bailar algo improvisado. Empezamos a beber mucho los dos y después vino Calum, me digo algo y rió y después la chica estaba en ropa interior y después no me acuerdo de lo que pasó.

Amanecí en ¿la casa de Calum? y estaba ¿durmiendo en la misma cama que Calum, Hayley, y otra chica? Empecé a gruñir por el dolor de cabeza sin entender nada y llamé a Calum.

-Calum, hey Calum, despierta. -dije sacudiéndolo.

-Dios santísimo, me duele la cabeza como el infierno. -exclamó Calum.

-Eso se llama resaca, querido Cal. Explícame porque estoy en tu casa, con dos chicas en tu cama.

-Tu mamá te echó de casa en la noche. Estabas demasiado ebrio, y besuqueándote con esta -dijo señalando a Hayley- y ella entró y se puso como loca, empezó a gritar y tú pues estabas tan ebrio y enfadado con tu mamá que te fuiste de la casa y te llevaste a Hayley. Entonces, como no tenías otra donde ir, viniste aquí.

-Creo que no podré volver a mi casa en un buen tiempo. -dije sonriendo falsamente.

-Ya lo creo tío.

-Buenos días Calum, buenos días Mike, buena noche la de ayer eh. -dijo Hayley guiñándome el ojo.

-Sí, muy buena. -sonreí, fingiendo acordarme.

-Chicos, creo que Sam y yo debemos irnos ya. -susurró Hayley.

-Sí, tienes razón. -dijo Cal.

-Bueno, chicos, nos veremos en otra ocasión. Mike, te hablaré o te llamaré después. -dijo Hayley de nuevo guiñándome el ojo.

Me sonrió de nuevo y se giró, dispuesta a irse agarrando a Sam, pero antes las dos se giraron como si se les olvidara algo. Sam se le acercó a Calum y ya no vi más porque Hayley me dio un beso cogiéndome desprevenido a lo que me quedé sin saber que hacer pero le seguí el beso.

-Tu beso de buenos días. -sonrío Hayley- Hasta luego chicos.

-Adiós. -dije impactado.

Cuando las chicas se fueron le empecé a hacer millones de preguntas a Calum las cuales no sabía responder.

-¿Pero Calum qué a pasado?

-Michael que no me acuerdo. -suspiró Calum, ya cansado de mí.

-Ya lo tendré que descubrir, estoy harto de tener que ir "investigando" cosas para poder enterarme. -solté un suspiro también.

-¿De qué hablas tío?

-Nada.