Suicide //Completa, En Edición//

parte 1

POV Harry

No creía en cada hermosa melodía que tus palabras me proporcionaban. Estoy totalmente roto por culpa del amor, roto por esas dulces palabras que tanto me dedicas a cada instante.
Duele demasiado creer algo que mi cabeza niega , pero escuchar de tu preciosa boca esas palabras tan hermosas, hacían que mi pobre corazón volviera a latir.

Pero es demasiado tarde para nosotros, ¿Es que no lo entiendes?

Yo estoy roto, soy un "peso muerto" que cargas sobre tus hombros.
Odio que sufras por mi culpa pero aún más odio tus palabras que hacen que te crea ¿no sabes lo que duele? escucharte decir esas dos hermosas palabras y que después para mi mente sean una gran mentira.
¿No te das cuenta de lo profundo que es un sentimiento como lo es el amor?, Si lo sientes, lo tienes que sentir de verdad y soportar todo lo que conlleva amar.

Cargar ese peso que conlleva los problemas de la persona que amas como si fueran los tuyos y eso es duro, cansado y muy agotador...

Ciertamente sé que tu sientes por mí este tipo de amor. Pero enamorarte de mí sería demasiado para ti, al igual que para cualquier persona.

Enamorarte de mí sería un suicidio.
¿Qué trágico no crees?

Es algo que podrías evitar y aquí sigues a mi lado.

-Harry cariño, volveré en un par de horas. Debo ir a recoger unos libros que me he dejado en la universidad y luego, antes de volver a casa, iré a hacer la compra.- Me besa en la mejilla.

asentí.

Cuando escuché la puerta de la entrada cerrarse me dirigí hacia el baño a paso lento como si el simple hecho de moverme fuera lo suficientemente duro de realizar.

Me miro en el espejo observando las enormes ojeras bajo mis ojos las cuales toco lamentandome por cada segundo que pasa lo horrible que me veo en este momento. Mi piel que antes era de un hermoso tono rosado a pasado a ser de color blanco, pero no cualquier blanco, era ese tono blanco "transparente" con el cual se podian ver hasta el color de las venas, un tono enfermizo.

Me lamento tanto al verme en este estado, sólo puedo llegar a pensar que todo lo que he intentado conseguir en mi vida con el cabo de los años ha sido un auténtico desperdicio.

Decidido a acabar con esa ansiedad que me proporcionaba el mero hecho de verme al espejo, abro uno de los cajones del baño donde escondía dentro de una pequeña caja unos repuestos de cuchillas de afeitar.
Pequeños puntos de ese color rojo carmesí comenzaban a brotar de mi antebrazo izquierdo. Miraba lo que me provocaba sin sentimiento alguno, no sentía nada, solo quería ese dolor que me proporcionaba hacerme aquello. A veces, incluso hacer eso servía de poco.

De repente la imagen de tu rostro aparece en mi mente al igual que se desvanece al instante como si de una estrella fugaz fuese.

Entonces, vuelve ese sentimiento de culpa que tanto detestaba.

-No quiero amarte.- Lloraba intentando emitir el menor ruido posible.
-Amarte duele.- Las lágrimas no dejaban de caer por mis mejillas, probablemente acabaría agotado del propio estrés que me causaba el hacerlo.

La cara de Louis, de mi Louis aparecía sin parar en mi mente aun cuando yo solo quería acabar con todo en ese momento.

Mi precioso novio, mi dulce amor, tu haces que quiera volver a creer en lo bonito de la vida.

Pero recordarte mientras me autolesionaba también provocaba que algo oscuro dentro de mí saliera a relucir y es que, ¿Por qué no me engañarías? alguien como yo no sería nunca suficiente.

Todos los días es la misma historia, siempre el mismo pensamiento.

Nada más abrir los ojos al despertar todo viene a mi cabeza dándome cuenta de cuán miserable soy y me siento tan triste... Tan triste que vuelvo a caer sin cesar en esta oscuridad de la que no puedo salir, es como un bucle que no acaba.

Por dios Louis, vete de mi vida , huye de mi, se feliz sin mi y así no te causare daño.

-¡Harry Volví a casa cariño!- Avisó Louis desde la entrada de la casa.

Sonreí tristemente, su voz resonando en mi cabeza suena tan dolorosa y a la vez tan dulce .

Me coloco una sudadera tapando las heridas de mis brazos.

A paso lento bajo las escaleras y me dirijo hacia la sala de estar donde mi querido novio se encontraba leyendo algunos apuntes, esperándome.

-Bienvenido.

-Hola de nuevo amor -sonríe.

Amor... Que bonito suena.

Me siento a su lado en una silla al lado de él observando cada fracción de su hermoso rostro .

¿Por que me quieres ?¿por que no podrías "odiar nuestro amor como yo lo hago"?¿por que me dices cosas bonitas ?¿por que haces que nuestro amor me "lleve al suicidio "?

Sin duda tenía un gran problema del cual no me daba cuenta , esos pensamientos tan contradictorios me llevarían a la perdición.

-¿Tengo algo en la cara?- Pregunta.

niego con la cabeza.

Él me sonríe y dice:

-Te amo mi precioso Harry.

Y ahí de nuevo mi mundo se derrumba y a la vez una pizca de felicidad surge en mi corazón.

se acerca poco a poco hacia mí besándome de manera dulce y suave, como si yo fuera la cosa que más apreciaba en el mundo.

Tan cálido, tan bueno, tan tierno, pero también tan doloroso .

Cuando nos separamos le sonreí , intentando no mostrar que estaba a punto de llorar y entonces, luego de darle otro beso, esta vez en la mejilla, me dirijo hacia nuestra habitación a paso rápido , desesperado por encerrarme en el cuarto y descargar lo que estaba sintiendo.
Con mis manos temblorosas cerré el pestillo y comencé a llorar en la cama .

-Por favor para -susurro.
-No digas esas cosas, ódiame , así sería todo mucho más fácil.- Me digo a mi mismo sollozando.

-Pero te amo Louis...