El corredor del laberinto - Otra historia

5º CRUEL es buena

Newt y Alby ponen cara de preocupación, al igual que los demás.

HAYA: Entonces... ¿eso significa que vamos a quedarnos sin verduras? —pregunto dubitativamente mirando a Thomas y a esos dos.

NEWT: Y eso como poco —me responde con una voz muy grave.

GALLY: Se nota que eres una verducha aún. No sabes nada —me dice acusativamente, y resopla.

HAYA: Uy, perdóname, Gally, siento no ser una experta en la vida en el Claro como tú —le respondo intentando defenderme.

GALLY: Ya, eso ya lo has demostrado completamente —me dice acercándose a mí y mirándome fíjamente a los ojos con una expresión muy tosca.

THOMAS: Se puede suponer de esto que probablemente nos dejarán sin algo la siguiente vez que suban la caja.

ALBY: Que no traigan más verduchos nos da igual por el momento, pero como muramos muchos corredores, terminaremos siendo muy pocos.

NEWT: Y eso no nos conviene —complementa él.

ALBY: Bueno, chavales, fuera todos. Ya ha terminado el espectáculo.

Todos comienzan a retirarse a sus quehaceres diarios, y mietras yo me acerco a Newt para hablar con él, me cruzo con Gally, (ese asqueroso chaval que odio desde el primer día), y me da un codazo en el costado al pasar.

GALLY: Clonc.

El golpe que me da es tan fuerte, que me deja por unos instantes sin respiración, pero cuando consigo recuperarme al de poco, le hago tropezar con mis piernas y lo derrivo. Otro comienzo de una pelea entre un gilipollas y yo. No sé cómo me las he arreglado para enemistarme con ese tío.

En cuanto Gally se levanta se avalanza sobre mí, hasta que Newt nos consigue separar con ayuda de otros chicos.

***********

NEWT: ¿Será posible que algún día dejes de pelearte con ese retrasado? —pregunta mientras me ayuda a vendarme la palma de la mano con la que he pegado a Gally.

HAYA: Lo veo un poco complicado, la verdad —le sonrío.

Newt se me queda mirando a los ojos largo rato, acercando cada vez su cara más a la mía. De repente sacude la cabeza y se aleja de mí rápidamente.

***********

—Mira, Haya, acércate —oigo que una persona me dice. Es una mujer, pero no le veo la cara, está oculta en las sombras.

Noto que mi cuerpo se mueve hacia la mujer y me pongo de puntillas para mirar a través de una cúpula de cristal.

—Ahí es donde estarás cuando seas mayor —dice señalando al interior—. Pero no te asustes, no te pasará nada —me intenta tranquilizar.

—¿Por? —oigo que digo yo misma, pero con una voz más suave e infantil.

—Porque tú has de vivir, tú vivirás, sobrevivirás —responde poniendo ambas manos sobre mis hombros—. Gracias a ti la humanidad vivirá.

—Pero yo no quiero entrar ahí, tengo miedo —me alejo un poco intentando marcharme.

—No tengas miedo, Haya. CRUEL es buena.

**********

Me despierto sobresaltada al día siguiente, más temprano de lo normal, por culpa de un incesante ruido y gritos. Miro hacia el suelo y los alrededores y veo a mucha gente cerca de una puerta del muro. 

Bajo de un salto del árbol donde últimamente duermo, y me aliso un poco la ropa, aunque no sirva para nada realmente.

NEWT: ¡¡Corre, Haya!! ¡Te necesitamos urgentemente! —me grita mientras corre hacia a mí y me arrastra consigo corriendo hacia el muro y toda la gente.

HAYA: ¡¡Ey!! —suelto asustada.

Llegamos por fin a donde toda la gente está reunida, alrededor de algo desconocido. Newt me abre paso entre todos los chicos y me señala a Gally en el suelo, tumbado, con un aspecto horrible.

HAYA: ¿Qué... le ha pasado? —pregunto horrorizada—. Menos mal que no he desayunado, que si no lo poto todo aquí mismo —añado tapándome los ojos con las manos.

Tiene toda la piernas derecha en carne viva y la izquierda está tan mal que hasta creo que le han desaparecido cachos de carne. La cara la tiene completamente ensangrentada, un hombro parece estar dislocado y el brazo roto.

ALBY: Un lacerador —responde secamente.

HAYA: ¿¿Cómo?? —pregunto muy asustada mientras me acerco a Gally y le pongo el hombro en su sitio de un movimiento rápido—. Si me dijistéis que aquí estábamos alejados y protegidos de los laceradores.

Ellos parecen asentir con la mirada, pero la dirigen hacia otro lado.

HAYA: Anda, ayudadme a llevarme a este pingajo a la enfermería... —suspiro, en el fondo estoy aterrorizada por el hecho de que puedan entrar laceradores al Claro.

***********

Holaaa^^ de nuevo jejee

Hacía tiempo que no publicaba aquí. La verdad, es que no tenía ninguna idea de cómo seguir con la historia, además con tan pocos lectores últimamente. Así que bueno, he conseguido sacar fuerzas gracias a algún comentario diciendo que siguiese y tal, y pues eso, aquí está el siguiente capítulo. Espero que me haya quedado un poco mejor, al menos, que el anterior de los médicos.

Así que bueno, pues eso, espero que os guste y eso, muchas gracias a los lectores y lo de siempre;))