Newt me alcanza corriendo y me coge del brazo para alejarme de ahí lo más rápido posible. Al de un rato nos paramos y me suelta el brazo. Mientras intento coger aire, comienza a reírse sin parar.
NEWT: Creo que a partir de ahora Gally te amará, no tengas ninguna duda —se para para respirar—, de por vida.
HAYA: Pobre chico, me da pena. Enamorarse por primera vez y que no le correspondan... Qué historia más trágica.
NEWT: Y tanto —comienza a andar y me hace un gesto con la mano para que lo siga—. Vamos, te voy a enseñar dónde puedes dormir.
Lo sigo y llegamos a una zona donde parece que los chicos duermen.
NEWT: Ahora te traigo una manta para que te puedas tumbar.
Yo me encojo de hombros y comienza a alejarse. Inspecciono un poco el suelo, y como lo veo un poco sucio, decido subirme a un árbol para dormir más a gusto, yo ya me entiendo.
Veo desde el árbol que Newt regresa con una tela un poco vieja y que comienza a mirar a todos los lados porque no me encuentra. Le llamo y por fin alza la mira y me ve.
NEWT: ¿Qué haces ahí, Haya?
HAYA: Prefiero mantener las distancias con el suelo. Te aseguro que no es nada agradable dormir ahí abajo.
NEWT: Como tú quieras. Sólo espero que mañana no aparezcas desnucada porque te hayas caído del árbol, ¿eh? —me advierte mientras me lanza la manta.
La cojo al vuelo y le respondo:
HAYA: No te preocupes, sé lo que hago.
A la mañana siguiente me despierto por los ruidos, veo a todos los chicos ya en marcha, así que decido bajar del árbol e intentar integrarme un poco. Busco a Newt o a Thomas por el Claro, hasta que encuentro a Thomas cerca de las puertas.
THOMAS: Ah, hola, Haya. ¿Necesitas algo?
HAYA: No, nada en concreto. Te buscaba, bueno, o a Newt. Quiero saber qué puedo hacer.
THOMAS: Mejor busca a Newt, yo estoy un poco ocupado. Los corredores salimos dentro de poco.
HAYA: Ah, bueno, entonces no molesto más. Ya me las arreglaré —me despido con una sonrisa y sigo con mi paseo.
Por fin encuentro a Newt, que se me acerca con ánimo.
HAYA: Newt, ya sé lo que voy a hacer.
NEWT: Yo también lo sé. Ve a donde Fritanga y ayúdale con la cocina, o si no tienes la alternativa de ir a donde los médicos y ayudar allí.
Se me queda cara de estupefacción y de gran decepción, que hasta Newt se da cuenta.
NEWT: ¿No te gusta el plan? Porque es así como funcionamos aquí.
HAYA: Yo había pensado en algo más como.... ser corredora, ¿tal vez?
NEWT: Jajajajaja —comienza a reírse—. Pero Haya, esto sigue un proceso. Todos no pueden ser corredores desde el primer día.
HAYA: Pero es que YO sé que puedo. Lo sé, tengo un presentimiento.
Deja de reírse y me mira con seriedad.
NEWT: ¿Seguro?
Yo asiento.
NEWT: Te doy un día para que te prepares y demuestres si mereces ser corredora o no. Recuerda, velocidad, memoria, inteligencia, agilidad...
HAYA: Lo sé... Tú tranquilo, que lo haré muy bien.
Me he alejado un poco del barullo de la gente y me he ido a una zona apartada del bosque, donde al comienzo, se suponía que iba a correr y a entrenar, pero que finalmente he terminado en un entrenamiento a base de patas y puñetazos al aire, tipo boxeo con variantes de las artes marciales. Oigo que alguien se aproxima y me giro para mirar, y para mi sorpresa, me encuentro con Gally, creo, al que anoche le solté aquella burrada.
GALLY: ¿Qué haces, verducha? ¿Luchando contra un amigo invisible? —se mofa.
HAYA: Te equivocas, aprendo a defenderme de los violadores como tú —le espeto—. Ya sé que soy irresistible —le digo sarcásticamente—, pero contrólate un poco.
Se queda sin habla y de la misma forma que ha venido se va, sin hacer demasiado ruido. 2-0 a favor de Haya... ¡y le gano a ese chulo!
Holaaaa^^
Por fin puedo publicar, buah, después de esta dura semana... A ver si ya me relajo un poco al fin.
Gracias por leer la historia;))
ESTÁS LEYENDO
El corredor del laberinto - Otra historia
Fiksi PenggemarDespués de la llegada de Thomas, al de un tiempo llega Haya, una chica muy despierta que aparte de recordar su nombre, sabe que tiene algo que ver con Newt. No recuerda exactamente el qué, pero sabe que es algo importante en su vida, o que al menos...