†La infernal familia Agreste†

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†Notice me senpai! [2da parte]†

»-»Acto 2/10: Cuervos«-«

6:30 a.m. Paris, Mansión Agreste.

—¿te sientes mejor? -pregunto _____ terminando de poner los vendajes en la espalda de Hugo, el ataque que había recibido de su padre lo habia herido-

—si mamá, gracias...

—pequeño, no te preocupes por lo que me pase, tienes que vivir tu vida al máximo, evita estos conflictos con tu padre -le paso la camisa que este se la puso-

—pero siempre tienes que soportarlo por nosotros, ¿¡como puedes seguir con ese mald- -su madre lo interrumpió cubriéndole la boca-

—Mi niño, no digas nada mas por favor -susurro mirando la puerta, tembló un poco- no quiero que vuelva a tocarte...

—mamá...

—por favor hijo...-le acaricio la mejilla- ve a la escuela, sigue tu rutina -se levanto para irse de ahí dejando al menor solo, este solo se miro su brazo con una pequeña venda, y se lo cubrió con su sudadera para agarrar la mochila y irse a la limusina encontrándose con sus hermanos mayores.

—hola.

—hey Hugo -saludo Louis- ¿como te sientes?

—mejor, mamá me ha curado las heridas.

—¿mamá? -pregunto esta vez la rubia-

—si, ¿por que?

Los mayores solo se vieron tristes y negaron toda pregunta del menor y subieron y finalmente partieron hacia la escuela, la shoras pasaron tranquilamente hasta que llego la hora del descanso, Hugo como siempre sentado debajo de un árbol con sus dos hermanos.

—que buen día hace hoy.

—la verdad, Louis -Ushio escribía en su pequeño diario-

—oigan -Hugo los llamo, pero no le hicieron caso, miro hacia donde estaban mirando encontrandose a las personas especiales de sus hermanos a lo lejos de ellos hablando con otros chicos, algo que le hizo sacar una mueca- ¡Louis! ¡Ushio! -aplaudió delante de ellos trayendolos a la realidad- ni siquiera piensen en desaparecer a esos sujetos.

—¿a que te refieres? ¿¡no ves que esta muy cerca de Emma?!

—¿y eso que importa? -ambos lo vieron mal- tenemos que pensar que darle a mamá por su cumpleaños.

—no te preocupes por eso -el pelinegro lo miro- papá siempre la llena de regalos.

—si, aja, y ¿de nosotros tiene algun regalo? No, no lo tiene, así que colaboremos para darle un regalo, como por ejemplo, ir al parque de diversiones, se que le gustara -el castaño estaba emocionado por la idea-

—¡ni pienses en llevar a esa mujer ahí! -grito asustando a su hermano menor-

—Louis, no hagas una escena aquí, baja la voz -Ushio apego a ella a Hugo- el no sabe.

—claro, se nota.

—¿saber que?

Su hermano suspiro pesadamente para sentarse de nuevo y mirarlo.

—Saber que la perdonaste luego de haberte intentado asesinar -lo miro con el ceño fruncido- me es frustrante que pienses así.

—Hermano...

—asi que no cuentes conmigo para su cumpleaños -se levanto y se fue realmente muy molesto.

—va a estar bien, mamá dijo que no volvería a hacernos eso...¿verdad Ushio?...

—¿acaso ya olvidaste lo que te hizo? Hizo que papá te golpee y aparte te dejo una cicatriz en el brazo.

—¿acaso solo viven con rencores?

—mamá después de eso intento ser buena madre, pero aun así, no me interesa tampoco tener lazos fuertes con ella.

—¡pero si ella ha estado para nosotros!

—eso no me importa -su hermana lo miro enojada- ella no ouede tocarnos ni siquiera intentar matarnos.

—ella no pero ustedes si ¿eh? Van a privar la vida de alguien mas solo por su beneficio, ¿crees que mamá ama a papá? Dennis nunca va a- -fue interrumpido por dolor en su mejilla-

—silencio, Hugo. -dijo su hermana-

Las horas pasaron y ya era tiempo de ir a casa, los tres estaban muy callados y molestos, llego la limusina y se subieron en silencio, cosa que a su padre se le hizo un poco extraño, pues sus dos hijos mayores los saludaron pero el menor solo balbuceo un "buenos días" y ni una palabra mas.

—¿que tal las clases Hugo? ¿como esta Melissa? -dijo aun en el volante el rubio-

—bien.

—me alegro, esta de que la traigas a la casa alguna día.

—no.

—¿eh? ¿por que?

—¿donde esta mamá?

—ah, my lady se quedo en casa, no esta en condiciones de salir por un tiempo, se porto muy altanera y tuve que castigarla -Hugo palidecio- intento escapar de nuevo pero no lo consiguió, tengan esto en cuenta niños, si intenta escapar, de le una pequeña lección para que aprenda.

—si papá.

—gracias por tus consejos, y no te preocupes, se que mamá te amara muy pronto.

—gracias mi niña.

—*malditos cuervos* -pensaba Hugo-

Al llegar, el castaño se bajo rápidamente diciendo que tenia mucha tarea, evitando así salir de paseo con su padre, y al ver ya a la limusina irse, desactivo las cámaras y se fue de inmediato a la habitación de su madre, y al abrir la puerta miro horrorizado a la mujer que sollozaba en el suelo, con ropas delgadas y su cuerpo todo rojo.

—mamá...-Hugo se acerco a ella- mami...

—Hugo...-_____ levanto la mirada para verlo, y de inmediato agarro su bata para colocársela y arreglarse un poco el cabello- hola hijo, bienvenido a casa ¿que tal tu dia en la escuela? -su sonrisa era débil, aun podia ver el rastro de lagrimas en sus ojos- ¿tienes hambre? ¿y tus hermanos? ¿tu papá también vino? Va a estar encantado con el almuerzo que prepare.

—mamá, solo estoy yo, tranquila, ni mis hermanos, ni mi papá estan aquí -la guió a la cama para sentarla- ¿como estas?

La mujer de inmediato rompió en llanto para abrazar a su pequeño niño, al único en la familia que finalmente había logrado entenderla.

—mi Hugo -volvió a sollozar- mi bebé...estas aquí, no sabes cuanto te extrañe mi pequeño niño -acariciaba entre sollozos los cabellos castaños del mejor, haciendo que un nudo en la garganta de este se formara y la abrazara con cuidado, sabia que si padre la había herido, y pensar que su nadre lucia radiante en la mañana, ahora lucia demacrada, pero como siempre se sanaría e intentaria escapar y de nuevo a esto.

—tranquila mami, ya estoy aquí, no tengas miedo.

Resentido por el comportamiento de sus hermanos hacia su adorable madre, solo podía pensar en un dicho que había leído en algún lugar:

Cría cuervos y te sacaran los ojos.

Continuará.

Notice me Sempai!! [Yandere Chat Noir/Adrien y tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora