3- Inicio de clases.

275 35 10
                                    

Un nuevo amanecer se hace presente y con ello un nuevo día da inicio, todos levantándose temprano para iniciar con sus rutinas, algunos para arreglarse y emprender camino a sus trabajos, las amas de casa se levanta para prepararles el desayuno a sus familias y continuar con sus demás deberes o para los más pequeños de la casa, solo para prepararse e ir a la escuela para recibir la educación apropiada, y en la finca la Luna no es una excepción.

—¡Hanabi a desayunar!

Grita una pelo teñido parada en el inicio de las escaleras esperando a su pequeña hermanita.

—¡Ya voy Hina! —dice mientras baja rápidamente las escaleras.—

—Rápido que se te hará tarde para tú primer día de clases. —dice de manera sonriente.—

—No llegaremos tarde Hina. —sonríe.—

—Mejor es prevenir que curar renacuaja.

—Bueno está bien, pero vamos a comer que me muero de hambre. —dice para luego dirigirse a la mesa de la cocina en donde ambas toman asiento, para posteriormente reanudar su antigua conversación mientras comen.—

—Y dime, ¿no estás emocionada por hoy? —pregunta.—

—Claro, es la primera vez que iré a la escuela del pueblo. —sonríe.— No es lo mismo estudiar en casa con las institutrices que ir a la escuela y conocer personas de mi edad.

—Me alegro de que estés feliz, pero recuerda que seguirás con las institutrices de vez en cuando para ver tus mejoras académicas.

—Sí, daré lo mejor de mi.

—Me alegro. —sonríe.— Bueno pero ahora a comer porque quiero ir a dejarte hoy en tu primer día de clases.

—¿Enserio? —pregunta sorprendida.—

—¡Claro! ¿O es que te avergüenza que te vean con tú hermana mayor? —dice fingiendo tristeza—

—¡No! ¡Claro que no! Es solo que no pensé que me llevarías pero ¡Si quiero que me lleves!

—Muy bien entonces, ve rápido por tus cosas, Yo te estaré esperando en la camioneta, no tardes.

—¡Si!

La pequeña rápidamente sube las escaleras y se dirige a su habitación en busca de su bolso escolar, el cuál es muy sencillo de color celeste claro con detalles negros en los cierres y bolsillos para posteriormente de eso baje las escaleras y salga a la entrada principal en donde ve la camioneta estacionada en la entrada.

—¡Ya estoy lista!

—Muy bien, pero ahora subete rápido. —le enseña el asiento del copiloto.—

Hanabi asiente.

—Todavía no me lo puedo creer...¡Estaré en una escuela pública! Conoceré a personas de mi edad, ¡Estoy muy feliz!

—Ya veo. —sonríe—

—Gracias hermana.

—No hay de que, sé muy bien que no es lo mismo estar en una escuela que estudiar en casa, por ello quiero que empieces a estudiar en una.

—¡Sí! Me pregunto como sería conocer más gente. —dice pensativa.— Sólo espero caerles bien.

—Claro que les caerás bien a todos, ya lo veras —sonríe.— Pero recuerda ser amable con todos y lo más importante, se tú misma con los demás sin importar quien sea. Eso me funciono cuando estudie ahí.

—¿Quién no te querría hermana? eres un angel caído del cielo.

—Y así la mayor suelta una pequeña risa.— Recuérdalo.

-—Trataré de seguir tus consejos, sabes que no soy muy sociable.

—Lo sé renacuaja, solo se tú misma, lo demás se dará solo.

—Está bien, pero cambiando de tema ¿Cómo fueron los dos años que estudiaste ahí?

—La verdad fueron dos años muy divertidos, hice algunas amigas y conocí a algunos chicos y entre ellos mis mejores amigos Ino, Shino y Kiba, pero yo no estudie en esa escuela la primaria, solo fui dos de los tres últimos años de la preparatoria y eso solo fue porque logre convencer a nuestro padre de que me dejará asistir durante ese tiempo.

—Mmmm ¿Y cómo lograste que padre me dejará asistir a mí desde ahora?

—Solo digamos que no lo sabe todavía. —sonríe de lado.—

—¿¡Q-qué!? ¿Cómo que no lo sabe? —dice nerviosa.—

—Tranquila Hana, yo soy tú tutora ¿Recuerdas? Puedo decidir estás cosas por tí, pero calma, cuando nuestro padre venga la próxima ves le diré sobre mi decisión ¿Entendido?

—Sí, entendido. —se calma para luego sonreír—ufff, ya me habías asustado con eso.

—No tienes porque estarlo, pero bueno ya eso no importa ahora, hablaremos de eso más tarde. —estaciona la camioneta al frente de la escuela— Ya llegamos.

—¿Así qué está es la escuela?

—Sí, ¿te gusta?

—Sí es muy linda, además de que se ve llena de vida con tantos estudiantes.

—Sonríe por las ocurrencias de la menor- Si, pero recuerda, vendré por tí díez minutos antes de la salida. ¿ok?

—Si Hina, te estaré esperando.

—Más te vale, cuídate mucho y suerte.

—Gracias hermana.

—Te amo hermanita.

—Y yo a tí, nos vemos luego. —abre la puerta de la camioneta dispuesta a bajar.—

—¿No se te olvida algo?

Hanabi la mira confundida, mientras que Hinata hace una seña con una de sus manos sobre su mejilla dando a entender lo que quiere.

—Ah, ya entiendo —sonríe.— Claro hermana. —dice para darle un beso en la mejilla trás segundos después salir del carro con rumbo a la entrada principal de la institución.—

Bueno ya estoy aquí, no me acobardare ahora.

"La Patrona" [Itahina]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora