Jungkook es un chico sin hogar el cual sufre de una regresión de edad involuntaria sin ser consciente de ello. Las calles pueden ser un peligro para él; sin embargo ha estado sobreviviendo más tiempo de lo pensado por su propia cuenta. A pesar de lo...
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Las vacaciones de Taehyung había llegado a su fin, ciertamente fue un poco difícil para el pequeño. En su mentalidad de dos años fue difícil entender el porqué su cuidador se mantuvo con él todo un mes y un día cualquiera ese ya no era el caso. Angustiado y llorando a mares, abandonó los brazos de su amado cuidador temprano en la mañana. Hubiera sido preferible seguir durmiendo antes de irse, pensó por un momento Taehyung, pero al verlo llorar desahuciado comprendió que en realidad no era una buena idea, de todos modos iba a reaccionar de la misma forma de una otra manera. Así que con un tiempo prolongado le hizo saber que iba a volver y Jungkook pareció entenderlo al menos un poco.
Fue trasladado en los brazos de Namjoon tan pronto cómo había aparecido en la puerta. Desde allí supo que su cuidador tenía que irse y, fue extraño que no lo llevara, al menos en casa de Jin cómo de costumbre. No entendía nada por todavía estar más dormido que despierto, por someterse al llanto tan rápido cómo Taehyung lo hizo salir de su cuello y lo obligó a quedarse en casa.
Fue absolutamente trágico para su infantil mente.
Pero Taehyung era lo suficientemente amable para no dejarlo solo. Lo había visto la noche anterior correr de extremo a otro, preparando todo y facilitando todas sus necesidades para quien sea que lo estaría cuidando. Jungkook quiere con todas sus fuerzas ser un buen chico para Taehyung, pero su apego hacia el cuidador es más grande que su propia fuerza de voluntad al intentar serlo; él lo intenta, pero falla una vez que su mente aturdida le recuerda cuanto lo quiere a su lado, estar en sus brazos y que le susurre pequeños halagos que solo y únicamente Taehyung sabe hacer. Llora en el ancho hombro de Namjoon, su labio tirita incontrolable, su pequeño pecho se aprieta mientras mira la ventana, vislumbrando a lo lejos las hojas de los árboles, menearse al viento fresco, cómo lo había estado haciendo en los últimos treinta minutos. Siente su cuerpo balancearse de un lado a otro, una cálida mano cepilla su cabello; a medida que pasa el tiempo, siente el cansancio de despertar muy temprano pasar por su cuerpo, llorar también lo ha cansado de sobremanera. Sus pestañas húmedas se sienten más pesados de lo normal y poco a poco va cerrando los ojos, solo era cuestión de segundos antes de quedarse completamente dormido.
Namjoon sintió el cuerpo del menor relajarse, los pequeños sollozos se detuvieron hace algunos minutos; el pequeño movió su cabeza en otro ángulo, rozando su nariz por el cuello de Namjoon y dejándole a la vista de que se había quedado dormido. El cuidador temporal sonrió caminando hasta la cama, dejando al menor cuidadosamente sobre ella y asegurándose de no despertarlo. Despegó los sudorosos cabellos de su frente y acarició su pancita ligeramente descubierta; la sonrisa no abandonó su rostro, sus largos dedos acariciaron su rojiza mejilla gordita, antes de levantarse y abandonar la habitación.
Namjoon bajó las escaleras, llevando una de sus manos a los bolsillos para sacar su celular que había estado vibrando los últimos cuarenta minutos; sin duda obra de un Taehyung desesperado por saber si su bebé estaba bien, dejando múltiples mensajes y llamadas perdidas. Namjoon agitó la cabeza y respondió con un "él está bien, se ha quedado dormido, no te preocupes" al instante recibiendo otra ronda de mensajes.
