Beggin' | Bajifuyu

𝖂𝖆𝖗 𝖉𝖊𝖈𝖑𝖆𝖗𝖆𝖙𝖎𝖔𝖓

Pasaron un par de horas, el alfa pelinegro se encontraba en la cama acariciando los rubios cabellos del omega recostado sobre su pecho, su celular sonó con insistencia, tenía un leve presentimiento que era debido a la noticia de esa mañana. Tomo el dispositivo y respondió después de ver que era Kisaki quien le llamaba.

—Hey Baji, se acaba de prender esta mierda, ¿Viste las noticias cierto? Mikey convocó una reunión de emergencia en el templo dentro de una hora, esto es más grave de lo que dijeron en la televisión. —El sonido de algo rompiéndose de fondo lo desconcertó. —¡Hanma deja esa mierda te vas a cortar!... N-no, no, espera. —Keisuke quería reírse pues conocía al omega mencionado por el moreno. — Mierda, solo ve a la puta reunión y me dices que paso. No creo poder ir. —Un gemido se escuchó y comprendido que sucedía. —Hanma entro en celo desde ayer en la fiesta y no puedo controlarlo.

—Que te diviertas esta semana hijo de perra. Finalmente dejaras de ser virgen. —Soltó una estrepitosa carcajada ante las quejas del otro alfa.

—Vete a la mierda. —Y colgó.

Se rio a lo bajo, Kisaki realmente era un imbécil pues no se daba cuenta que Shuji estaba malditamente loco por él ya que cuando se lo menciono el alfa solo negó los hechos, Hanma era un atractivo omega que tenia un encanto algo peculiar, su actitud solía ser un asco a veces pero cambiaba totalmente cuando estaba con el moreno. Era de su conocimiento que el rubio estaba enamorado de una omega desde hace varios años, pero ella salía con Takemichi. Dejo el dispositivo a un lado y movió levemente al menor para despertarlo.

—Chifuyu. —Menciono en un tono bajo. — Tenemos que ir al templo.

El chico abrió sus ojos lentamente mientras murmuraba un pequeño "si" adormilado.

—Anda, después podemos pasar a comprar Peyoung Yakisoba para comer. —Le espeto poniéndose de pie el pelinegro.

—¿Lo compartiremos? —Murmuro el rubio sentándose sobre la cama aun envuelto en las sabanas.

—Como siempre.

[...]

Todos murmuraban pues nadie sabia con exactitud que ocurría. Cientos de suposiciones y teorías se planteaban los miembros de la ToMan ya que justamente el día anterior a la fiesta Manjiro se había reunido con Cyan Maruki la líder de una pandilla llamada Akai Tsuki, está gobernaba varias ciudades al sur de Japón, la fiesta había sido para celebrar que ahora estaba unida a la Tokyo Manji. Todo bajo el mando del invencible Mikey. Pero entonces ¿Por qué de repente Tenjiku había actuado de esa forma si sabían el poder que tenían ahora? Era simplemente ilógico. Keisuke tomo asiento junto con Chifuyu a un lado de Mitsuya después de haber saludado a los demás presentes, al parecer aun no llegaban Draken ni Mikey.

—Esto es una mierda. —Dijo Hakkai seguido soltó un suspiro entregándole un café al alfa de cabellos lilas quien temblaba levemente por el frio.

—Ni que lo digas, yo creí que las cosas estarían más tranquilas.—Respondió el menor de los gemelos Kawata. 

—Más le vale darse prisa a Mikey, me gusta el frio pero para estar en mi casa viendo anime no aquí afuera.—Chifuyu menciono juntándose más al alfa pelinegro tratando de estar calientito.

—Cállate otaku, este clima esta de puta madre.—Smiley soltó una carcajada cuando Baji le gruño abrazando al menor quien estaba indignado al haber sido llamado otaku.