alcaparras antes de navidad

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Oh puertas pesadas que el destino ha cerrado

Para bloquear la alegría, es posible que no ganemos

La paz saldría para siempre

Si nos atrevemos a entrar.

- Sara Teasdale, "Gramercy Park"






























El vuelo a Nueva York había sido relativamente anodino. Julia se había pasado la mayor parte del tiempo repasando planes, mientras Carmen miraba el sol reflejarse en las nubes. Fue interesante, aunque Julia no estaba segura de si lo interesante abarcaba todo lo que sentía, observar su transformación de la Carmen que le hacía café y se inquietaba cuando estaba ansiosa por la Carmen Sandiego que caminaba con confianza la línea entre la criminalidad y la justicia. Julia lo notó principalmente en sus ojos. Su sonrisa nunca los alcanzó del todo, y perdieron su suavidad en el desapego de analizar todo lo que la rodeaba.

Los cinco se registraron en el hotel, Player los mantuvo fuera de la vista de las cámaras de seguridad hasta que llegaron a su suite, que consta de dos habitaciones conectadas a través de un espacio para sentarse.

"¡Habla de fantasía!" Zack ululó, despegando inmediatamente para explorar después de abrir el mini refrigerador y rebuscar entre los bocadillos. Mientras Shadowsan cerraba todas las cortinas, Ivy tiró la gran bolsa de lona sobre la otomana y estiró la espalda.

Pasaron tres horas antes de que comenzaran, lo que se sintió simultáneamente como demasiado y muy poco tiempo, pero el estado de ánimo era sorprendentemente relajado. Contrastaba la tensión tanto en Interpol como en ACME a la que Julia se había acostumbrado, y ahora, no sabía muy bien qué hacer consigo misma. Sus dedos agarraron la correa de su bolso antes de decidirse a dejarlo en el sofá y revisar su contenido para mantener sus manos ocupadas y su mente de caer en un estado de pavor.

"¿Crees que tengo suficiente tiempo para el servicio de habitaciones?" Preguntó Zack, ya aburrido con el espacio limitado.

Siempre coherente, Shadowsan gruñó molesto, lo que Julia, sintiéndose culpable, encontraba cada vez más gracioso. A ella le gustaba pensar que su constante temperamento descontento era una tapadera para su afecto a regañadientes.

"Siempre y cuando no pidas todo el menú", respondió Carmen, animando a Shadowsan a ser más paciente con una mirada, a lo que él también gruñó.

Julia sacó su computadora portátil, la abrió y la dejó sobre el mostrador. Después de unos segundos apareció el ícono de Player, su imagen apareciendo en la pantalla, cuando Carmen se acercó a ella. "Roja, Julia".

"Oye, player, ¿cómo estamos?"

"Todo sigue por buen camino. Ha habido algunas charlas recientes sobre la mafia. Parece un grupo de seis, si lo interpreto correctamente. He estado vigilando la vigilancia alrededor del ático de Maelstrom, y los agentes de VILE todavía están presentes ".

Seis era más de lo que esperaba Julia.

Carmen asintió. "Excelente. ¿Cómo está la situación de nuestro vehículo?

"Listo para que lo recojan cuando lo necesite. Te avisaré si algo cambia ".

"Eres el mejor."

La saludó antes de que su pantalla se volviera negra.

Hicieron contacto visual en la oscuridad del monitor y, volviéndose hacia Julia, Carmen examinó su expresión. "¿Qué ocurre?"

"Solo preocupada", confesó, desviando la mirada hacia un lado para mirar la encimera de formica.

Perhaps a rain check then by Estillis (Carulia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora