CAPITULO 4. "Me jodiste"

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"Hay dolores que duelen por fuera, y dolores que te van apagando por dentro"

Limpie las lágrimas que en ese momento estaban rozando sobre mis mejillas, di un paso hacia atrás y camine en dirección al baño.

-Izaya. -Dijo Darina corriendo detrás mío.

Honestamente estaba destruido, sentía como todo mi mundo se venía abajo, a pesar de los esfuerzos tan brutos que le obligaba a mi corazón a sentir no entendía la razón por la cual Patrick había actuado de esa forma, ¿Qué había pasado en toda la tarde-noche que se desapareció de redes?

-No quiero hablar con nadie Darina. -Dije echándome agua en el rostro.

-Tranquilo, si tú estás mal yo igual lo estaré, ¿Lo recuerdas? -Exclamo Darina dándome un abrazo reconfortante.

-No entiendo que pasó, ¿Qué hice mal?, ¿Por qué me trató de esa manera?- Mencioné balbuceando entre llantos

-No hiciste nada mal Izaya, fue el quien la cago y no debes sentirte culpable por ello. Tu eres fuerte y no permitiremos que una situación como está nos arruine el día, pensemos que solo fue un mal momento uno de esos que se puede pasar con un poquito de sal y limón.

La mayoría de las veces era yo quien aconsejaba a Darina en sus problemas o malas rachas sin embargo hoy los papeles se voltearon y hoy soy yo el de los problemas.

¿Te apetece hacer la tarea de química en mi casa? -pregunto Darina mientras que con la manga de su abrigo favorito me limpiaba las lágrimas.

-Nada me haría más feliz que pasar la tarde en tu casa, claro que sí.

*****

Al pasar el día, seguía sin entender la razón por la cual Patrick había actuado de esa forma, no lo había visto pasar por ningún lado, mucho menos en los pequeños recesos que teníamos por cada clase que pasaba, tampoco con la bolita de amigos con los que siempre convivía, algo estaba mal y de una u otra forma tenía que averiguarlo.

De un momento a otro levante la vista hacia el portón de la escuela, allí se encontraba Patrick charlando con el guardia de seguridad, no quería ni imaginar lo que pasaba por su mente en ese momento, tenia el terrible presentimiento de que estaba enfadado conmigo por lo ocurrido en la mañana, el guardia le ha dado paso a Patrick para salir del colegio, ¿Qué mierda ocurría?, él nunca se retiraba hasta avanzar mínimo una hora en los preparativos de la clausura, porque hoy no fue así?. Pasada las 2:30 de la tarde, el timbre de salida resonó en mis tímpanos, sabia que no lo vería como todos los días salir con sus 2 mejores amigos.

-Entonces, ¿Nos vemos hoy a las 5:00 de la tarde en mi casa?-Pregunto Darina quien tomaba su mochila por su espalda y al mismo tiempo hacia un morongo con su largo cabello.

-Claro Dari, nos vemos más tarde. -Respondí

Lamentablemente Darina vive fuera de la ciudad y por esa razón todos los días vienen por ella a la escuela, ya quisiera yo tener esa suerte y no caminar bajo el caliente y vil sol, siempre llegaba a casa con el cabello caliente y la cabeza adolorida.

Al llegar a casa lo primero que hice fue aventar mi pesada mochila llena de libros a la cómoda, un minuto más y se me rompía la espalda, me quite el uniforme que acaloraba más de lo que lograba hacerlo el sol, era de tela muy algodonosa y tosca al mismo tiempo. De una u otra forma tenia que tratar de comunicarme con mamá para avisarle que no estaría en casa toda la tarde, mis tripas resonaban en necesidad de alimento, unos huevitos con jamón no me harían mal, mas tarde hare una nota por si llega a venir mi madre temprano, la lea.

Symphony LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora