𝔼𝕝𝕖𝕧𝕖𝕟

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Capítulo 11

Los dos días siguientes pasaron sin incidentes para Ailish, afortunadamente la hinchazón de su nariz había desaparecido gracias a una técnica Muggle muy innovadora, el hielo

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Los dos días siguientes pasaron sin incidentes para Ailish, afortunadamente la hinchazón de su nariz había desaparecido gracias a una técnica Muggle muy innovadora, el hielo. Fue fácil ignorar a su hermano y a Cedric, aunque librarse de los gemelos no le fue tan sencillo. Ailish no estaba segura de quien fue el responsable de dejar a Malfoy con los pies pegados al suelo de uno de los pasillos más concurridos con los pantalones abajo, pero después de hablar con sus Slytherins descubrió que se confabularon con los Weasley para eso y para otros asuntos que tenían pendientes con Malfoy.

Ailish se dirigía al salón de Defensa Contra las Artes Oscuras junto a Theo y Daphne, después del desayuno Astoria salió corriendo a la biblioteca para terminar un trabajo. Tamar realmente quería estar en la clase de Ojoloco Moody, pero había algo que no dejaba de molestarla, ella no conocía muy bien al exauror, pero en las cenas a las que asistía con su padre el señor se comportaba diferente a como lo estaba haciendo en el colegio, no le dio importancia ya que pensaba que talvez estar con alumnos podría incomodarlo. Cuando llegaron Daphne y Ailish tomaron asiento en una de las mesas del centro y Theo se sentó detrás de ellas junto con Austin Isaacs.

Sacaron sus libros «Las fuerzas oscuras: una guía para la autoprotección», y mientras esperaban al profesor las chicas voltearon hacia Theo.

—¿Ustedes creen que la clase será mala? –preguntó Daphne–. Ya saben, él está loco.

—Ailish es quien más lo conoce, con esas elegante cenas de aurores y sus, ¿cómo decías Lish?, ahh sí, sus recurrentes y raras visitas a tu casa –molestó Theo.

—No es como que seamos los mejores amigos ¿saben?, él solo se limita a hablar lo necesario si Alex o yo estamos ahí, pero cuando esta solo con papá hablan de cosas muy extrañas –comentó con el ceño fruncido–, se la pasan secreteándose. Es muy desconfiado, ya saben, ser Auror tiene sus desventajas, pero es solo un viejo chiflado o al menos eso creo.

—Te ves linda cuando haces eso –dijo Austin con una sonrisa boba. Ailish frunció el ceño al no entender de que hablaba–. Si, justo eso.

El sonrojo y la burla de sus amigos no tardaron en aparecer, la sonrisa boba de Austin se fue solo cuando escucharon el peculiar sonido sordo y seco de los pasos de Moody provenientes del corredor antes de que entrara en el aula, tan extraño y aterrorizador como siempre. Entrevieron la garra en que terminaba su pata de palo, que sobresalía por debajo de la túnica.

—Ya pueden guardar los libros —gruñó, caminando ruidosamente hacia la mesa y sentándose tras ella—. No los necesitaran para nada.

Volvieron a meter los libros en las mochilas. Aunque Ailish no lo viera, sabía que Theo estaba emocionado.

Moody sacó una lista, sacudió la cabeza para apartarse la larga mata de pelo gris del rostro, desfigurado y lleno de cicatrices, y comenzó a pronunciar los nombres, recorriendo la lista con su ojo normal mientras el ojo mágico giraba para fijarse en cada estudiante conforme respondía a su nombre.

More than Expected- Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora