letters to oblivion (Fred Weasley)

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Angelina y George veían como Fred gritaba por todos los pasillos de alegría, como si acabase de ganarse miles de galeones.

-Weasley! Compórtese!- le exigió Umbridge desde su despacho mirándolo mal.

Fred paró inmediatamente y llevó la carta de la chica misteriosa a su pecho en forma de protección. No quería perderla por nada del mundo.

-Lo siento, profesora.- dijo este aún con una sonrisa, la sonrisa que le encantaba tanto a la dueña de las cartas. Con la que podría morir en paz.

-Que le parece gracioso?- preguntó Dolores mirándolo con los ojos entrecerrados a lo que Fred retrocedió unos pasos.

-No... no es nada, mi madre, me ha enviado una carta.- dijo para empezar a correr, no quería estar castigado, no de nuevo.

La morena y su gemelo lo encontraron en el gran comedor donde este seguía leyendo, una y otra vez, admirando la carta con una sonrisa tierna.

-Freddie...- le dijo George sentándose a su lado.- Tenemos que hablar seriamente.
-Tienes un problema serio, y vamos a ayudarte.- le dijo Angelina con una sonrisa.

Fred miró a sus amigos, Lee también se encontraba ahí. De que hablaban?
-Ah si?- preguntó este volviendo a llevar su carta a su pecho.

-Estás enamorado, lo entendemos, vamos a ayudarte a encontrar a tu chica.- le dijo George finalmente temiéndose una reacción en el pelirrojo.

Fred sin embargo miró al suelo nervioso, empezó a jugar con sus pies.
-Enamorado?- preguntó con una pequeña sonrisa.- De ella?

Miró al rededor del comedor para comprobar que nadie los escuchaba, mirando a cada y una de las chicas que habían...
-Quiero encontrarla.- dijo finalmente.