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Hinata Shoyo, 22 años, casta; omega. Y en estos momentos estaba pasando por uno de sus peores momentos, el celo en la calle.

—hah... mgh... casa – se intentó parar, pero, sus piernas flaquearon y cayó al piso.

—Hey, estas bien? Soy un omega, si quieres te puedo ayudar. ¿Dónde vives? – Hinata no sabía si confiar en el chico, el cual apenas podía ver por su nublada vista.

—Soy Hinata... vivo en los departamentos 22...

—Ok Hinata, te llevaremos allí. – el misterioso chico hizo una llamada a un tal Daichi. Quien supuso era su pareja. – mi pareja viene para acá, no te preocupes, esta todo bien. – y de un momento a otro, sucedió como un pestañeo, recuerda haber tenido su celo en la calle, pero ahora estaba en su casa.

—Oh, despertaste – la última persona que quería ver en estos momentos era a Kageyama, pero ahí estaba, con su ceño fruncido y su cara de pocos amigos. Aun así, él lo amaba. – ahora explícame. COMO FUE QUE UN ALFA TE TRAJO ACA. CON QUIEN MIERDA TE METISTE — preguntó gritando y agarrando la polera del omega, acercándolo más a él. Hinata pudo oler sus feromonas enojadas. Esto era peligroso.

Suspiró y se soltó del agarre con cuidado, abrió la boca y escogió sus palabras con sabiduría por que Kageyama ya estaba enojado y no era la idea enojarlo más.

—Con nadie Bakayama. Tuve mi celo en la calle, un omega me ayudó, y su pareja me trajo. Punto — tocó su mejilla y sonrió — estate tranquilo que... yo soy tuyo — se puso de puntitas y besó su nariz. De pronto el celular de Hinata sonó indicando una llamada de Kenma — ¿Aló?

—SHOYO, PRENDE LA TELE EN EL CANAL 25. APURATE – al momento que la prendió su corazón se detuvo.

«el gran jugador de vóleibol Kageyama Tobio fue visto hoy saliendo de un motel y BESANDOSE con la actriz Kiyoko Shimizu. Lo cual, nos afirma su relación»

Hinata no quiso escuchar más, con el dolor de su corazón se separó de su pareja y golpeó su pecho débilmente. Sonrió entre lágrimas y apagó la tele.

—Voy a la habitación, no duermas conmigo — caminó rápido hasta la habitación y se encerró.

Lloró y lloró, como nunca lo había hecho. Solo recuerda haber llorado así cuando terminó su primera relación con Atsumu Miya. Tocaron la puerta. Hinata no respondió.

—Em, supongo que te enteraste de la peor manera, pero, si estoy en algo con Shimizu — Kageyama suspiró mientras Hinata lloraba silenciosamente — Perdón. Mañana me iré a vivir con ella, así que supongo que no nos veremos dentro de un tiempo. Perdón por el daño causado Hinata. Buenas noches.

3 años después.

—Agh, porque le hago caso a Kenma. – Un cansado Hinata se dirigía al mall, a su cita a ciegas. Su mejor amigo, Kenma, le ha planificado varias citas con distintos alfas y betas. Pero ninguno logra robarse su corazón.

Llegó al lugar indicado, pero no veía a nadie con las descripciones.

"es alto, con el pelo café y los ojos del mismo color, se distingue rápidamente"

—¿Hinata? – el nombrado se dio la vuelta. Ojalá nunca lo hubiera hecho.

—¿Kageyama? — sus ojos se abrieron a más no poder. Una risita se escuchó a su lado y miró aburrido — Ah, hola Shimizu-san.

—¿Como has estado? Hace harto que no nos vemos. – dijo Kageyama tomando la mano de Shimizu.

—Bien, estoy viviendo con Kenma ahora así que... supongo que bien — miró sus dedos — ¿y ustedes?

—Bien, nos vamos a casar — dijo Kageyama sonriente mostrando el anillo.

El mundo de Hinata Shoyo se detuvo por segundos, hasta que sintió la necesidad de correr de ahí.

—Tengo cosas que hacer Kageyama, nos vemos — se inclinó y salió corriendo de ahí. Lágrimas corrían por sus ojos mientras repetía lo tonto que él era.

«¡¡estúpido!! ¿cómo creías que él estaría sin ella? ¡¡son almas gemelas!! Es obvio que se aman. ¡estúpido Hinata!»

No se dio cuenta que había llegado hasta la calle cuando sintió un golpe y sus reflejos fallaron, haciendo que se cayera.

—¡¡HINATA!! – Solo vio a un chico rubio del otro lado de la calle, que corrió lo más rápido y lo tomó rápidamente de la mano para poder sacarlo de ahí.

Negro.

Oscuridad.

¿Estaba muerto?

Escuchó el sonidito de la máquina que toma el pulso, y supo que no lo había logrado.

Lentamente abrió los ojos, y vio una cabellera rubia acostada a su lado izquierdo, el cual estaba durmiendo.

—¿Tsukishima?

—Hinata. – el rubio corrió a avisarle a una enfermera que había despertado.

¿Qué pasó?

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Holaaa, aquí Mai reescribiendo la historia xd 

Espero que les guste el "remake" Estaré actualizando la historia por unas horas hasta que quede decente. 

Lxs tkm <3

Mai fueraaaa ----------------->

Eclipse ☀ (Editado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora