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Tienes mi corazón. Nunca seremos mundos separados- Umbrella


Alexander caminaba con una sonrisita juguetona en su rostro. Sus orbes verdes brillaban mientras saludaba a un par de personas de camino por los pasillos de la universidad. Se sentía extrañamente más feliz de lo habitual, sabia la razón, pero se la reservaba para si mismo. Entre sus pensamiento rondaban dos ojitos color miel que lo miraban con tanto amor que a veces le daban ganas de saltar y alzar su puño en victoria.

Se habia ganado la lotería con el Alfa que tenia a su lado.

Y lo chistoso es que ellos no habían cambiado su relación de manera drástica, ya que siempre se habían tratado con un exceso de cariño, lo único que ahora cambiaba es que podían besarse cada vez que querían, Alexander no sentía ninguna necesidad de estar con nadie más. La palabra fidelidad se la grabo en la cabeza con fuego luego de declararse a Beck, no le interesaba nadie más allá que su propio alfa, tal vez siempre fue así, al final, Alexander habia tenido un montón de parejas pasajeras basadas en sexo que solo servían para llenar aquel vacío que dejaba el hecho de no tener a Beck consigo.

El miedo era una perra y Alexander sabia aquello. Sabia que habia perdido demasiado tiempo buscando excusas para no declararse a Beck, uno de ellos siempre fue el miedo a perderlo, aquel nerviosismo de saber que si las cosas no salían bien, entonces podrían no volver a ser lo que eran nunca más.

Y Alexander siempre supo que vivir sin Beck no tendría ningún sentido.

"¡Hey!" Jeremy, su mejor amigo beta, se acerco con una sonrisita. Sus ojos marrones tenían el destello juguetón mientras su cabello  largo y amarrando en un moño desordenado lo dejaban ver muy despreocupado aunque no le quitaban aquella aura paternal. "¡¿como estas?!"

"Muy bien y tu?" Alexander le sonrió mientras pasaba su brazo por el hombro del más bajo "¿que haces aquí? ¿no tienes clases?"

"Las tengo, solo te pase a saludar" Le guiño el ojo "es más, creo que voy tarde" hizo una mueca

"Uy, no vayas a manchar tu perfecta asistencia" el alfa  se burlo "¿nos vemos en el almuerzo?"

"No pienso tocar el violín" refunfuño logrando que Alexander se riera fuerte "¡Alexander, ríete normal!" le regaño cuando noto que varias personas los miraban.

El alfa de rizos se volvió a reír más fuerte, llevando sus manos hacia su estomago.

"Lo siento" hablo entre risas "has estado toda tu vida con nosotros y ahora te preocupas de tocar el violín" se rio "¿si sabes que lo tocas hace años?"

"Eres un imbécil, ya me voy" rodo sus ojos "ve a clases, Alexander. Vas tarde"

"Si, si, voy papá"

Jeremy bufo antes de voltear e ir hacia sus clases, sin embargo, Alexander siguió al sentido contrario de donde debería ir. Su mirada se concentraba entre las estudiantes mientras buscaba a una persona en especifico.

Persona que estaba al final del pasillo, mirando su celular.

Alexander mordisqueo su labio un poco y camino más rápido, la figura delgada de su alfa se hacia mucho más nítida, notando su cabello castaño corto, sus brazos delgados y trabajados. La piel que ahora estaba un poco más bronceada y los ojos miel, que si bien estaban concentrados en el aparato, Alexander podía visualizarlos en su mente.

Beck.

Su precioso Beck se volteo justo cuando Alexander se dispuso a atraparlo por la cintura, escondiendo su cara en el cuello del más bajo y pegando su cuerpo en la espalda del alfa que se removió al sentir la lengua del rizado en aquella zona

Eres mío  (Beck & Alexander)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora