Fue precipitado pero en el tiempo justo, fue justamente temprano para evitar más cosas, y justamente tarde para poder prevenir otras cuantas, cinco meses parecen pocos, o tal vez no, pero aunque duela admitirlo, para mí, a tu lado cariño, cada segundo fue un infierno; porque no era una relación, era un juego de adivinanzas sobre que papel me tocaría jugar ese día, ¿sería la chica que corre a consolarte e intentar reparar lo que tus padres rompieron?, ¿sería la que corre a recoger los pedazos que destrozaste tu mismo para unirte de nuevo?, ¿sería la que se dejaba usar y terminaba a media noche llorando hecha bolita?, ¿o sería la chica que no podía dejar de hablar de la dulzura de tus palabras?
Terminamos, yo lo decidí, recuerdo que estaba esperando una cuarta llamada, dónde llorabas y pedías perdón, y era porque yo sabía lo que iba a hacer, no sentiría lastima y si lo hacía me la metería por donde pudiera, porque me pondría como prioridad, pero no pasaba, y ahora que lo pienso, nunca tuve el pensamiento de que no se iba a repetir, pero estaba tardando, y aunque ahora es diferente, en ese tiempo era una persona poco paciente, quería todo y lo quería en el momento, nuestra ruptura no fue la excepción. Pasó tal vez dos o tres semanas después de que la idea de terminar se me cruzará, y yo sabía que no te atreverías a preguntar por qué lo hacía, por qué terminaba lo nuestro y era porque lo sabías, así que lo hice.
Terminé la relación y recuerdo que al día siguiente tenía una salida de parte del colegio, me sentía libre y feliz, la verdad, sé que algo en nuestra relación cambio ese día, yo iba a dejar de ser tu soporte, después de eso, de superarte por así decirlo, me perdiste, como amiga, como pareja, como alguien, y tal vez rompí un montón de promesas que te hice, porque no siempre iba a estar para ti, como prometí, no siempre te iba a amar, como prometí, son promesas que decidí romper, pero fui lo suficientemente idiota como para creer que mantener esa primera promesa, "siempre estaré para ti cuando lo necesites", era algo bueno, no lo fue, fue idiota y no me dejo sanar de la forma que lo necesitaba, pero estuve para ti, no puedes decir que no, y la verdad que si te atrevieras a insinuar siquiera que no mantuve esa promesa, que no la mantengo, estaría enojada, porque en ningún maldito momento cuando llegaste llorando a mí te di la espalda o te ignore, y ciertamente, tú y yo sabemos, en lo más profundo de nuestro ser, en lo único que fue capaz de sobrevivir a los cimientos inestables que construimos para nuestra relación, que si lo necesitas y lo pides, yo estaré para ti. Y no te engañe en que siempre sentiría algo por ti, desde que te conocí siempre has tenido un sentimiento especial en mi corazón, no es odio, no llegues a conclusiones precipitadas, ahora te guardo, no lo sé, ¿Cariño?, ¿aprecio?, ¿gratitud?, no lo sé.
Siempre he creído en eso de tu primer amor, yo lo tuve, no fuiste tú, pero fuiste algo, vi hace tiempo un tiktok que hablaba sobre que en nuestra vida teníamos tres tipos de amores, el primer amor, ese que nos enseña a amar, que tal vez digamos que no lo fue pero lo fue, que dejamos ir por inmadurez, el segundo, el tóxico, donde salíamos lastimados, habían peleas, traiciones, mentiras, era el que te enseñaba lo que querías y no en una relación, el que te ayudaba a diferenciar entre el buen y mal amor, y el tercer amor, el real, somos maduros, sabemos lo que queremos, lo que necesitamos, sabemos que queremos en una pareja y que no, nos volvemos más cálidos, personalmente, tu fuiste mi segundo, aún sigo esperando el tercero, pero no lo presiono.
¿Recuerdas que intentamos seguir siendo amigas?, vaya idiotez, porque sólo me lastimó, tu me hablabas y decías lo mucho que me extrañabas, y yo lo aguantaba, porque creía que sí, que estaba bien eso, que yo me tenía que sentir culpable por haber cortado contigo, recuerdo esas conversaciones donde me decías lo mucho que me extrañabas y que sabías que lo habías arruinado, y a mí sólo me quedaba consolarte, ¿Qué rayos pensamos que iba a suceder?, ¿A quién se le ocurrió que había sido una buena idea?, supongo que la nostalgia nos gano, pero, a veces me pregunto, si dolía tanto como decías, ¿por qué saliste con él? ¿o era ella?, lo hiciste y recuerdo que me sentí, traicionada, no, no, no traicionada, engañada, porque tu habías dicho que me amabas semanas atrás y ahora estabas con esa persona, pero ¿Qué derecho tenía yo a quejarme? ninguno, yo hice lo mismo, terminamos, te prometí que te amaba y salí con un chico casi que al siguiente día, pero no me arrepiento, él fue maravilloso, duró menos de lo que tu y yo duramos, pero no me hizo sentir insegura en ningún momento, no me excluyo y bueno, conectábamos bien, no sé que sea de su vida ahora pero espero que sea feliz, se mudo y cortamos por eso, tu me metiste un rechazo/trauma a las relaciones a distancias.
Supongo que la ruptura no fue fácil, pero tampoco fue la parte más difícil, me hizo feliz, fue algo que me dejo con cierta paz, era la decisión que necesité, la ruptura fue todo lo que tuve y lo que quise y aprecié por un tiempo, gracias a eso pude poner los ovarios sobre la mesa y me decidí a trabajar en mí misma, trabajar en mí misma, la octava maravilla del mundo, es terrorífico, doloroso e incluso creo que me rompió y dio más pedazos, que había olvidado o ignorado, para curar y unir, fue difícil, es un proceso largo, demasiado, aún sigo trabajando en eso, pero lo que tu dejaste, la baja autoestima, el nulo amor propio, las inseguridades, ya no están ahí, tal vez aún se me dificultan las relaciones a distancia y el compromiso, pero tienes aportaciones parciales a eso muy insignificantes.
Así que eso es todo, agradezco más la ruptura de lo que agradezco haberte conocido, agradezco que me obligue a trabajar en mi, porque me ayudo a darme cuenta de algo, no te necesitaba, no necesitaba que ni tu ni nadie más me amará o me validara para yo tener valor, creo que lo mejor que me dejó el haberte dejado fue la relación conmigo misma, gracias a todo lo que pasamos en la relación y lo que el fin de esta me hizo darme cuenta, me decidí a cuidar de mí, así que supongo que gracias por haberme dado un empujoncito a trabajar en la relación que tengo ahora conmigo misma, me obligaste a ponerme como prioridad y bueno, nunca había visto un equipo tan espectacular como lo es mi persona y mi mente.
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You were my honey moon
Короткий рассказHay diferentes etapas en una relación tóxica, y supongo que la tuya fue la luna de miel, porque en mi corazón aún después de sanarte, no te pude odiar del todo, y aún después del daño que me hiciste, en su momento, no hubiera dudado en volver contig...