Learn to love (choni g!p )

Capitulo 26

Cheryl POV
T: ¡Mi amor! ¿Cuando te harás la prueba? –preguntó quejándose y recargando su barbilla en mi hombro.

Estábamos en la sala de cine viendo una película, ya era de noche y estábamos en pijamas, yo estaba sentada en forma de indio y tenía unas palomitas entre el hueco de mis piernas.

Toni lleva casi 4 semanas insistiéndome que me haga la prueba de embarazo, pero yo me niego porque quiero darle una linda sorpresa.

C: Bebé... ya te dije que pronto, cuando menos te lo esperes te diré, quiero tomarte por sorpresa.

T: Pero oye... quiero saberlo ya –quitó las palomitas de mi regazo y recostó su cabeza en mi regazo.

C: Nunca me vuelvas a quitar mi comida –dije haciéndome la enfadada.

T: Oye no te enojes –levantó mi blusa de pijama y acarició mi estómago–, creo que ya tienes pancita.

Reí levemente.

C: Claro que no, no se va notar hasta que tenga tal vez 3 meses.

T: ¿Podemos ir a la farmacia ahora? –preguntó tiernamente.

C: Toni es más de media noche –acaricié su rostro y metí una palomita a su boca.

T: Las farmacias son de 24 horas.

Me agaché para besar sus labios, quería silenciarla y lo logré.

Como en la primera vez que estaba embarazada, estaba muy necesitada de sexo, aunque haya tenido solo unas semanas, y creo que ahora estoy embarazada de nuevo. Creo.
Pronto animé a Toni a subirse sobre mi, me besó y exploró. Entró en mi, me embistió por un rato y ambas llegamos al éxtasis.

*

Al día siguiente las cortinas de la sala de cine estaban abiertas por lo que el sol me pegaba en la cara y tenía la manta suavecita que trajimos en la noche. Aun seguía desnuda por lo que estaba completamente tapada, Toni no estaba a mi lado y fruncí el ceño.

Tomé mi ropa interior, me la puse y me volví tapar con la manta. Me estiré para tomar el control remoto y encendí la pantalla gigante para poner algún reality  show.

Pasó un rato más y Toni apareció por la puerta con una bandeja en sus manos.

T: ¡Buenos días mi amor! ¡Mi vida! –se acercó a mi cantando y no pude evitar sonreír–. Te hice el desayuno –puso la bandeja en mi regazo y yo me destapé.

C: Que detalle, gracias amor te amo.

T: Te amo más –besó delicadamente mis labios.

Probé la comida y mis ojos se pusieron en blanco de lo delicioso que mi TT cocina.

C: Delicioso, ¿pero que hacías despierta tan temprano?

T: Te preparé el desayuno y... fui a la farmacia por esto –me entregó una prueba de embarazo, rodeé los ojos con una sonrisa por lo tierno que era esto.

C: Bebé... te dije que quería darte yo la sorpresa.

T: No puedo esperar, y además te recuerdo que tu arruinaste la sorpresa que te quería dar, ahora es mi turno –le sonreí, tenía que cambiar de tema.

C: ¿Por qué no dormimos en estos sofás gigantes más seguido? Son tan cómodos... –me tiré en el sofá.

T: Estas intentando cambiarme de tema, y no dormimos aquí porque tenemos nuestra habitación.

C: Bien bien, cuando termine de desayunar lo haré –Una gran sonrisa se formó en su rostro y se acercó a mi para darme un beso.

Soy muy rápida para comer, pero esta vez quería tardarme un poco más, así que Toni me daba con la cuchara como si fuera un bebé.
Estábamos recargadas en el respaldo del sofá y Toni tenía su brazo por detrás de mi sosteniéndome de la cintura y acariciando por debajo de mi blusa. Amaba que hiciera eso.

Al fin terminé y Toni me cargó por las piernas y me llevó a la entrada del baño que estaba en nuestra habitación.
Abrí la puerta y Toni intentó entrar conmigo pero la empujé jugando.

C: Espera afuera, entraré sola.

T: Pero...

C: Espérame ahí –la aventé a la cama y corrí al baño para después encerrarme por dentro.

Llámenme cruel pero, hace unos días encontré en internet una prueba de embarazo de broma, se que normalmente quieres hacer una broma donde salga "positivo" pero yo conseguí una "negativo".

Solo espero que Toni no se de cuenta de que no es la misma prueba de la que compró en la farmacia.

Hice todo el proceso para verificar la prueba verdadera, esperé unos minutos y cuando estaba lista suspiré y le di la vuelta.

Embarazada 4 semanas

Quería gritar de la emoción, no puedo creer que en verdad esté embarazada, mis ojos están comenzando a lagrimear y solo estoy pensando en lo bueno que es para mi broma.

Salté de la emoción, pero ahora tenía que poner mi cara seria y actuar.
Tomé la prueba real y la enredé en un papel para luego meterla en mi bolsillo de pijama. Después tomé la falsa y le quité el seguro a la puerta para después salir.
Toni en cuanto me vio vino rápidamente hacia mi, sus ojos estaban brillando esperando alguna respuesta.

T: ¿Y bien, bebé? ¿Cuantas semanas? –preguntó acariciando mis hombros.

Fingí un suspiro pesado y le entregué la prueba falsa, Toni inmediatamente la tomó en sus manos y su sonrisa desapareció.

Quería reír, pero mi corazón se estrujó al ver esto.

T: Pero... ¿por qué? –preguntó y las lágrimas se asomaron por sus ojos–, tal vez soy yo, tal vez podríamos volver intentarlo... y... –La atraje hacia mi bruscamente y me abracé a su cuerpo soltando una carcajada. Toni se separó y me miró con confusión–. ¿Qué es tan gracioso?

Saqué la prueba real y se la entregué.

C: Lo siento, una pequeñita broma.

T: Entonces... ¿estás...? –las lágrimas esta vez son de felicidad y tiene una sonrisa enorme en su rostro.

C: Así es, mi amor.

Me abrazó mientras me levantaba, sus brazos alrededor de mi cintura sosteniéndome como si fuera escapar y los míos alrededor de su cuello. Mis ojos estaban cerrados disfrutando de este hermoso abrazo.

T: No lo puedo creer, eres tan cruel, eso fue cruel.

C: Solo fue una pequeña bromita, al menos logré sorprenderte.

Me bajó y me calló con un apasionado beso de esos que me encienden, pero Toni se separó para besar toda mi cara.

T: Te amo, demasiado, como no tienes idea.

C: Te amo más –atrapé sus labios con los míos un momento y me separé.

T: Desde ahora no me separaré de ti ni un momento, haré todo lo que me pidas, te llevaré a donde quieras. ¿Quieres una pizza de la mismísima Italia? Iremos.

C: Eso es muy tierno, pero si puedo hacer las cosas.

T: Lo se, pero no quiero perderme nada de estos meses –acarició mi rostro–. ¿Desde cuando empiezan los síntomas? Ya sabes, antojos, cambios de humor, etc.

C: Supongo que ya, y olvidas muchos más síntomas, que ya tengo. –sonreí mordiendo el labio levemente.

T: Claro... ya entendí –se rió.

C: Y sabes, ahora que lo mencionaste esa pizza no suena tan mal –soltamos una risa y Toni besó mi frente.