Maf... Daddy?

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-Te ves como un maldito ángel al que solo quiero corromper, tu voz es como el cielo y eso que solo masajeaba tu cabeza. -frunzo mas mi ceño porque no he entendido lo que ha dicho, pero me ha dicho ángel así que debe de ser algo bonito, veo sus ojos pero están de otro color, negro, apenas si puedo ver una linea fina de su color natural al rededor del negro y no se como lo hizo pero yo también quiero hacerlo- cariño, se que no entiendes pero solo te diré: si yo fuese tu, tendría mas cuidado. -bueno pero es que el habla pero es como si no dijese nada, no entiendo y me estreso-

-Eh... no entiendo, pero yo también quiero hacer lo que hacen tus ojos, Owen.

-¿Mis ojos? ¿Qué pasa con mis ojos?

-Pues que se ven todos negros y tu color de ojos es como un anillo delgado al rededor del negro, yo también quiero hacerlo, se ve bonito. -y veo como se sonríe, aunque no es como hace rato, desde que me dijo ángel su voz se escucha mas ronca- me gusta tu sonrisa -admito-

-Me gusta tu cabello -le sonrío y él se une- ahora sí, déjame seguir con tu cabello. -de mi parte yo solo vuelvo a mi posición anterior y cierro mis ojos-

Me enjuaga la cabeza, procede a ponerme acondicionador y me desenreda mi largo cabello, me gusta que me peine, me da sueño ya que me relaja y eso me gusta.

-Pareces Rapunzel -oh, supongo que será su novia o alguna chica que le gusta- ¿sabes quien es ella?

-No, pero ha de ser muy bonita.

-Es una princesa de Disney, ya sabes, la caricatura -y por un momento suspiro de alivio y escucho su risa a mis espaldas- Imagino que no sabes nada de eso, te prometo que luego veremos su película, ahora cierra los ojos que ya voy a enjuagarte. -le hago caso y cierro mis ojos-

Me avisa que ya puedo salir y lo primero que hace es crear una barrera abriendo una toalla enorme, inmediatamente me tapo con ella y él me carga como si yo no pesase más que una pluma.

-Puedo caminar, no quiero incomodar...

-No digas eso, me gusta cargarte -a mi también me gusta que me cargues, quise decirle pero me arrepentí- Bueno, pues te daré ropa interior mía y una pijama, aunque no se si te quede... bueno ya veremos, te seco y te ayudo a vestirte, ya vengo.

Me deja sobre la cama y observo la habitación, es bastante grande y oscura, tiene una cama King size, un escritorio con una lampara y mas cosas que no logro ver, unas mesitas de noche, tres puertas que dirigen al baño, closet y hacia afuera, es limpia y organizada con decoraciones en todos negros, grises claros y un poco de blanco. Veo que se acerca con un pantalón, bóxer y camisa, lo deja a un lado de nosotros y empieza por secarme el cuerpo mientras me pone el bóxer que me queda como un short, la camisa y por último el pantalón... PERO ME QUEDA ENORME, la camisa me queda de largo un poco más alto de la rodilla y los pantalones, puf, podría añadir a otras 12 yo e intentar llenarlo pero creo que faltarían mas yo, decide por dejarme con la camisa que parece vestido y me vuelve a llevar al baño, ahí me sienta en el lavabo y busca otra toalla para secarme el cabello y me lo vuelve a cepillar me indica que me quede ahí mientras él se agacha para buscar un cepillo nuevo y hago como me dice, de repente me pregunta mi color favorito y me quedo en blanco... ¿color favorito? creo que no tengo, solo me gusta el color de los duraznos que crecían en mi patio...

-No tengo color favorito, bueno si, durazno, pero solo he visto eso en fruta, no como un color.

-Ok, no tengo durazno... ¿te gusta el verde?

-Mmmh, me gustan las plantas, así que me gusta el verde, sipi, me gusta el verde.

-Pues he aquí, un cepillo de dientes verde para la princesa, deja lo destapo -yo solo asiento- Listo -Veo que lo enjuaga, le pone pasta dental y me lo ofrece- Toma, cepíllate.