Maf... Daddy?

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Me seco las manos con el paño que tengo en frente y agarro mi teléfono y entro al chat de Owen, no me preocupo por siquiera saludarlo y solo le dejo un mensaje. Guardo mi teléfono y me dirijo de vuelta a la mesa a sacar todo de sus empaques. Frente a mi tengo 4 perfectas mini tartaletas de fruta y un brazo gitano. Estaba por botar la caja hasta que me doy cuenta que tiene dos velas pegadas por la parte interna de lo que vendría siendo la tapa y agradezco mentalmente el gesto ya que había olvidado por completo las velas. Despego las velas, doblo la caja y la meto dentro de la basura, vasos, platos, cubiertos y dos cajas de jugo van entre mis manos y brazos hasta la cocina. No he agarrado las galletas ya que decido que sería demasiada azúcar... ahora que lo pienso, las tartaletas también, las guardo en la nevera y busco algo para encender las velas.

Veo que todo está organizado y aún no entiendo el porqué Mica aún no ha regresado, decido llamarla mientras voy a buscarla pero solo escucho hipidos. Me apresuro un poco y noto que la puerta está abierta pero no pienso entrar sin pedir permiso, este será el apartamento por el cual pago pero le cedí este espacio a ella por el tiempo que quiera y no pienso entrar sin su permiso. Escucho un suave perdón y le pregunto si puedo pasar.

-Claro, es tu casa.

-Lo sé cielo, pero te cedí este espacio para ti, es bueno que también tengas tu privacidad y yo tengo que respetarla, ¿está todo bien? ¿Quieres contarme por qué llorabas?

-Es que, de verdad quería pasar este día con él, pero me prometí nunca decir cuando es mi cumpleaños, bueno... contigo se me salió. Pero no quiero molestarlo con información que no es relevante.

-Ow cariño -la abrazo y siento cómo vuelve a llorar- nena, entiendo que tengas tus razones y capaz sean por cosas del pasado pero a Owen y a mi si nos importa sobre esas cosas. No sabes lo triste que estaría si se entera por otras vías que es tu cumpleaños o se entere meses después. Se que nos conocemos hace poco pero conozco a Owen y se que el te quiere y yo también, ¿Qué te parece si llamamos a Owen -la suelto un poco del abrazo y saco mi teléfono del bolsillo para revisar si el mensaje ya le llegó, y aún no es así- cuando aterrice y nos avise? ¿Te parece bien? -veo como asiente y le sonrío mientras le seco las lágrimas que aun le salen- Bueno, ve a lavarte la cara que no queremos una cumpleañera llena de mocos ¿o sí? ¿Qué dirá Dylan? corre que si no me como yo esa rica torta -veo como abre los ojos y sale corriendo-

Narra Mica

Es cierto lo que dice tío Teo, más tarde puedo llamarlo y hablar con él, había olvidado por completo que había invitado a Dylan y tampoco quiero que se coman toda la torta sin darme un poco. Mientras me lavo las manos escucho el timbre seguido de dos voces masculinas. Con un poco de prisa me lavo la cara y me peino mi cabello en una coleta alta, reviso que todo se vea bien y salgo a la sala.

Me acerco a Dylan.

-Hola, gracias por haber venido a pesar de que nos acabamos de conocer, espero no haber interrumpido nada importante, si tienes algo que hacer y nos puedes quedarte, siempre puedes irte. -Veo que me ve con los ojos abiertos y de repente siento que metí la pata y esa sensación de miedo que conozco mas que bien se instala en mi cuerpo- ¿dije algo mal? perdón, soy una idiota, no es que te estoy corriendo, solo no quiero que te sientas obligado a estar aquí, lo siento mucho, es que soy una imbécil.

Siento como estoy al borde de colapsar y de la nada ya no siento el piso bajo mis pies y unos brazos que me agarran fuertemente mientras me mecen.

-Shhh, está bien, no eres nada de lo que dijiste, eres una niña muy inteligente y linda, shhhh no estoy molesto, ¿Qué tal si le damos a esta linda niña un vaso de agua para que pueda calmarse un poco? ¿eso te parece bien princesa? -solo asiento y dejo que me lleve mientras siento como todo se vuelve un poco más confuso en mi mente pero al mismo tiempo no pienso en nada-