Endlessly | Joker & Harley.

Capitulo 1 | God's Lonely Man

—No me gusta ser tu niñera.—Joker declara. Cassandra lo mira molesta y solo niega.—¿No tienes padres o algo así? ¿Un hermano?—Camina hacia la parte de atrás de su auto y la ayuda a meter sus pertenencias ahí.—Este será un viaje del que me voy a arrepentir por el resto de mi vida.

—O tal vez un viaje que te haga recuperar a Harley. O bueno, tal vez yo la recupero antes que tú tengas la oportunidad de ello.—Ríe.

—Oh no, no pienso hacerlo. Mucha toxicidad hubo entre ambos, lo mejor es que ella haga sus cosas y yo haga las mías por el resto de nuestras vidas.—Hace una pausa.—Además, ¿Qué te hace pensar que Harley consideraría la más mínima posibilidad de regresar a mi lado? Ya ha probado la libertad lo suficientemente y estoy seguro que su lado feminista creció de una manera que ni en tantos años junto a mi, yo hubiera permitido. Me causa algo de jaquecas pensar en eso aún, Harley Quinn siendo tan libre sin un amo a quien servir, eso pierde su responsabilidad como toda un arlequín.

—Oh vamos Joker, despierta. Las mujeres ahora son más independientes que los hombres en la actualidad, todas nos defendemos aún más y tenemos menos miedo a enfrentarnos a machistas narcisistas como tú. Es por eso que te haz quedado solo, y más porque tú fuiste el principal causante de toda esa llamada "toxicidad" que hubo entre ambos. Ahora solo necesito que me ayudes a recuperar a mi amiga, no a tratarla de conquistar.—Cuando terminan de empacar las cosas dentro del auto, ambos ingresan a este. Joker puso en marcha el automóvil.—¿Alguna vez pensaste en perderla?

Joker la mira mientras trataba de conducir junto a todos aquellos pensamientos en su cabeza. Puede ver como saca unos cigarros de su bolsillo y sin pensarlo enciende uno, también abrió la ventana para que el humo escapara hacia el aire libre.

—Ese tipo de preguntas simplemente no le son cuestionadas a hombres como yo, mucho menos cuando tenemos el corazón podrido.—Sonríe.—¿Pero que estoy diciendo? No hay hombre igual a mi, es por eso que no te podría contestar.

—Mamá murió de amor por mi padre años atrás. Ella siempre lo extrañó, siempre deseaba retroceder el tiempo atrás para poder mirarlo a los ojos una vez más, creo que de tanto pensarlo ella simplemente desistió ante su dolor. Fue más grande lo que sentía, por mucho.—La niña suspira.—Te entiendo, quieres escudarte para no morir de amor.

—No, no es eso...solo me escudo de Harley.

[...]

Desde hace un tiempo conocía a la pequeña Cassandra, siempre ha sido alguien valiente y con muchas agallas, cuando la conocí siempre supe que tenía la fuerza para mover un ejército entero sin problemas. Ella podía ser la inspiración de muchas niñas que buscan encontrar el significado de ellas mismas, era un maldito ejemplo a seguir. Pero también era una de las máximas debilidades de Harley, creo que Harley siempre sintió esa conexión hacia a ella porque ambas tenían un pasado bastante parecido. Simplemente chicas que siempre fueron pisoteadas y que un día pudieron alzar la voz.

—No necesito que seas mi papá.—Cassandra habla. Ambos bajan del auto después de unos cuantos kilómetros sobre la carrera, tenían que recargar el combustible del automóvil.—Solo pido que me ayudes como siempre yo lo he hecho. ¿Me das un cigarrillo?

—¿Estás loca? Tienes trece malditos años.

—Oh, lo siento Papá.

—No quiero ser tu maldito papá, solo quiero que no metas la pata arriesgando tus pulmones saludables como los adultos, fumar es algo estúpido.

—¿Entonces por qué lo haces tú si es algo estúpido? ¿Buscas verte más estúpido de lo que ya eres junto a tu cabello verde tan fosforesce que se puede ver desde kilómetros atrás, trajes y zapatos finos de diseñador y tus malditas cadenas de oro junto a tu dentadura postiza? Si eso no es más estúpido que fumar, quiero que me definas la palabra estúpido.

Joker la mira por un momento.

—Tu ganas niña.—Le entrega uno.—Pero será el primero y último que te daré en tu miserable vida.

—Te aseguro que no es tan miserable como la tuya.

—Al menos yo si tuve a mis padres.

—Al menos yo no perdí al amor de mi vida.

—Cierra el pico niña, no sabes a quien le estás hablando.—Joker lanza su cigarrillo hacia el piso y lo pisa apagándolo completamente.—Tenemos un largo camino por recorrer y aún no me dices a donde iremos exactamente.—Joker camina hacia el auto y entra encendiéndolo. Cassandra lo hace después de él.—¿A donde iremos? Dime ya.

—Tenemos que tomar un vuelo. Es todo lo que te puedo decir, es todo. Pero primero tenemos que ir a Metrópolis a visitar a alguien, ¿De acuerdo?

—¿Que hay en metrópolis que nos haga detener?

—¿Quieres ir o no payaso de pacotilla?

—Oh no lo se, tu eres la que mandas aquí. De pronto te haz convertido en la jefa mayor de todos. Tal parecer eres ahora la que manda inclusive aquí dentro de mi auto, ¿Algo más que quiera la alteza?

—No seas idiota. En fin, solo maneja.

—Bien manejaré, pero necesitas decirme todo en todo momento, me puedes perjudicar. Más ahora que me hiciste venir contigo sin seguridad, me siento algo extraño estando desprotegido.

—Vamos payaso, ni que te fueran a robar y meter en una bolsa. O bueno, tal vez ese será mi plan hacia a ti cuando terminemos este viaje si no manejas de una vez por todas. No tenemos tiempo señorita, rápido.—Insiste.

—Tranquila experta en secuestros, deberías trabajar para mi.

—Ni en un millón de años.

—Uno nunca sabe, en fin. Vámonos para que cierres el pico de una vez por todas, ¿Ok?—Ella asiente. Puede ver como saca algunas cosas de su mochila, era una manzana.—¿Es para mi? Seré tu gran maestro.

Cassandra optó por lanzarle la manzana golpeándolo en su ojo izquierdo.

—¡Oye! ¡Golpeadora frutera! ¡Basta ya!—Joker grita

—Estamos a mano, payaso.—Cassandra ríe.

Era mejor irse a Metrópolis de una vez por todas.