Vida de papel

III

Capítulo 3: Biblioteca

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【---¿Creés en Dios?--- ella frunció el ceño ante el rumbo que está tomando la conversación.

---¿Quieres que sea sincera?--- preguntó, haciendo que él asienta.

---Si vamos a convivir, creo que lo mejor será que ambos seamos sinceros en todo--- contestó con simpleza mientras se encoje de hombros.

---No--- contestó al fin--- jamás he pertenecido a alguna religión, pero, ¿Esto que tiene que ver?

Pareció que esto lo hizo pensar sus palabras.
Constantine se encuentra recargado en el escritorio de ella, el cual está al pie de la cama, misma en la que Kingston se encuentra sentada.

---A decir verdad, estoy un ochenta porciento seguro que esto que vemos es algo relacionado con la religión.

---¿Osea que lo que vemos son ángeles y demonios?--- dijo incrédula.

---Algo más bajo en realidad--- aclaró--- quizás almas en pena, no creo que haya demonios en la tierra.

---¿Pero si almas en pena?--- dijo medio burlona.

Él inclino la cabeza, como si no entendiera el por qué de su burla y es que, realmente no la entiende.

---Dije que es una posibilidad--- cruzó sus brazos sobre su pecho--- estoy buscando posibilidades sobre el por qué veo exactamente las mismas cosas que una chica aleatoria de mi vida, así que dime ¿Tu que piensas que sea? Vamos, dame opciones.

Ella intentó desesperadamente buscar en sus conocimientos algo que concordara con lo que ven, enfermedades, alucinaciones o envenenamiento pasaron como posibles por qué's, pero éstas fueron desechadas mucho antes de siquiera mencionarlas, si fuera algo de eso lo más lógico es que cada uno viera lo que su subconsciente quiere, no lo que un desconocido decide no querer ver.

Llevo ambas manos a su rostro, soltando un suspiro frustrado, haciendo que Constantine se sintiera algo incómodo, no tiene ni puta idea de cómo consolar a alguien, así que verla en medio de un casi ataque de ansiedad sólo le hace ver lo oxidado que está en cuanto relaciones humanas.

---No lo sé--- admitió finalmente, deslizando lentamente sus manos de su rostro a su nuca, aplastando su cabello dorado de paso--- he estado la mitad de mi vida asimilando que estoy loca, que alguien llegue de pronto y me diga que no tengo nada de loca es difícil de asimilar, así que lo siento si me tardo en darte algo lógico.

Claro que él entiende ese sentimiento, fue el mismo que experimento toda la noche de ayer.

---Siendo sincero tarde toda mi vida en encontrar a alguien como yo, no tengo prisa alguna en forzar alguna conclusión--- intento consolarla.

Medio funcionó y no es por que no fueran palabras alentadoras, sino que en realidad ambos tienen prisa por saber que demonios pasa con ellos.

---Gracias Constantine--- dijo poniendo una sonrisa--- se ve que eres un buen chico.】

¿Un buen chico?

Sonó raro oírlo, nunca nadie se había tomado la amabilidad de decirle algún alago, su yo de ocho años se hubiera emocionado. No era el caso.

Habían pasado ya cuatro días de su conversación con la chica rubia, en ese par de días aunque hablaban, realmente no hacen mucho por encontrar algo, estaban intentando asimilar toda la situación.