Amor En Invierno: Relatos Familiares [Libro 2]

El Nuevo Amor De Gelda.

Zeldris trabajaba en unos documentos en su computadora en la cocina mientras sus hijos jugaban en la sala, les había dicho que jugaran tranquilamente pero eso era imposible cuando Meliodas y Tristán estaban de visita.

-¡Ka… me… ha… me… ¡HA!-escucho que grito su hermano. Zeldris rodo los ojos.

¿Cómo un hombre de cuarenta años puede ser tan infantil? Se preguntó mentalmente pero la pregunta desapareció de su mente cuando escucho un gran estruendo en la sala y los ladridos de Emma comenzaron a resonar por toda la casa.

Se levantó rápidamente y fue a la sala de la chimenea a ver que sucedió, al llegar vio uno de los muebles de estanterías tirado en el suelo y todas las cosas que había en el mueble estaban tiradas en el suelo alrededor. Algunas cosas estaban rotas.

Diviso a los niños y Meliodas reunidos en una esquina mirándolo con temor, los niños estaban escondidos detrás del rubio.

Zeldris inhalo y exhalo para tranquilizarse.

-¡¿QUE SUCEDIÓ AQUÍ?!-grito fallando completamente en su intento de tranquilizarse.

-Al menos no dijo una grosería.-murmuro Meliodas acercándose a su hermano con precaución-.antes que nada, no me pegues. Por favor.-

-Tranquilo, no te voy a golpear.-dijo Zeldris poniendo sus manos en su caderas.

-Fue un accidente, Tristán tropezó y se llevó una de las patas del mueble por delante con su pie.-

-¿Y por qué su pie se trabo con una de las patas del mueble?-

-Se le trabo cuando evito mi kamehameha.-

Zeldris le sonrió a su hermano.

-Tú pagas este desastre y quiero el dinero el lunes.-

-Oye tu eres el empresario con dinero, ¿Por qué me quitas mi dinero? No eran objetos de gran valor.-

-Voy a llamar a Elizabeth.-Zeldris saco su teléfono de su bolsillo pero Meliodas se lo quito.

-Está bien, tendré el dinero el lunes.-dijo Meliodas-.Elizabeth ya esta bastante enojada conmigo para que se entere de esto-

-Eso explica porque estás aquí desde las nueve de la mañana ¿Ahora qué hiciste?-

-Estaba cargando a mi hermano y cuando entro a la cocina golpeo la cabeza de Elias contra la pared.-explico Tristán.

-Fue sin querer, es que Elias justo se movió y su cabeza dio contra la pared.-intento defenderse Meliodas.

-Y Elizabeth se enteró, se enojó y te echo del departamento. ¿Y por qué trajiste a Tristán?-pregunto Zeldris.

-Sabía que iba a venir aquí y le pedí que me trajera con el.-dijo Tristán.

Zeldris miro el reloj de la sala, once y cuarto de la mañana. Gelda no salía del trabajo hasta el mediodía, generalmente no tenía problemas cuidando a sus hijos los sábados a la mañana pero cuando Meliodas estaba, era muy difícil que las cosas estuvieran tranquilas.

-Ayúdame a arreglar esto.-le dijo Zeldris a Meliodas-.y ustedes vayan a ver la televisión luego veremos que comeremos-

Amélie, Celine, Tristán y Cedric se retiraron a la otra sala mientras que Zeldris y Meliodas comenzaron a juntar las cosas, volvieron a levantar la estantería. Las cosas que no estaban rotas las colocaron en su lugar y las que sí, las juntaron y las arrojaron al cesto de basura.

Luego pidieron una pizza para evitar que Meliodas cocinara o quisiera ayudar en la cocina. Una hora y media después, Gelda llego a casa.

-¡Ya llegue!-exclamo entrando por la puerta.